Los siete miembros de ETA deportados a Cuba pueden abandonar la isla si otro pa¨ªs los acoge

Los siete etarras deportados ahora en Cuba no est¨¢n vigilados, se mueven con libertad y pueden salir de la isla si lo desean, siempre que encuentren un pa¨ªs que acepte acogerlos, seg¨²n comunic¨® el pasado s¨¢bado un portavoz de la Embajada cubana en Madrid. Seg¨²n el portavoz, Fidel Castro se comprometi¨® con Espa?a a recibir a los etarras y a permitir su presencia en la isla durante seis meses, es decir, hasta el 1 de noviembre pr¨®ximo. En esa fecha, el Gobierno, cubano decidir¨¢ si renueva o no el permiso de residencia a los etarras que todav¨ªa puedan estar all¨ª.El trato a los etarras en Cuba es muy diferente al que recibieron los meses anteriores en Panam¨¢, donde estaban vigilados y controlados por fuerzas especiales de seguridad. Informa Jes¨²s Ceberio desde M¨¦xico que una vez que Fidel Castro accedi¨® a la petici¨®n del presidente Felipe Gonz¨¢lez para que los etarras fueran a la isla, se plante¨® un problema inesperado, ya que las autoridades cubanas no admit¨ªan la presencia en la isla de personas indocumentadas.

Los etarras rechazaron el pasaporte espa?ol, porque la aceptaci¨®n supondr¨ªa la p¨¦rdida de su condici¨®n de refugiados en Francia, que todav¨ªa tratan de recuperar. Los paname?os maniobraron inmediatamente ante el Alto Comisariado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), a fin de que les concediese una carta aceptada en todo el mundo como pasaporte de curso legal. Con este documento viajaron a La Habana, lo que provoc¨® un serio disgusto a las autoridades espa?olas, que permanentemente han tratado de evitar que se, reconozca a los terroristas de ETA la condici¨®n de perseguidos por razones pol¨ªticas. Esta carta de Naciones Unidas permitir¨ªa a los etarras viajar a cualquier pa¨ªs, a menos que Madrid consiga antes el compromiso de alg¨²n otro Gobierno para acogerlos.y mantenerlos bajo control.