El exilio del cineasta Tarkovsk? se produce en un clima de mayor control cultural en la URSS
El director de cine sovi¨¦tico Andrei Tarkovski, de 52 a?os, se ha convertido, tras el director de teatro Yuri Lyubimov, en el segundo creador art¨ªstico de prestigio que se exil¨ªa de la URSS en lo que va de a?o, sobre el tel¨®n de fondo de un clima de creciente control y rigidez en el campo cultural. Tarkovski, que es conocido internacionalmente, sobre todo por su pel¨ªcula Andrei Rublev (1966), anunci¨® anteayer en Italia que ha decidido pedir asilo pol¨ªtico en Estados Unidos -donde se encuentra desde hace a?o y medio- porque carece de fibertad para seguir trabajando en su pa¨ªs.El caso de Tarkovski es muy semejante al de Lyubimov, de 66 a?os, director del teatro moscovita de la Taganka, puesto del que fue despose¨ªdo a principios de marzo pasado tras una prolongada estancia en Europa occidental. Lyubirnov, que hab¨ªa abandonado la URSS en el oto?o de 1983, mantuvo un largo tira y afloja con las autoridades sovi¨¦ticas para que se le garantizase la posibilidad de continuar su trabajo al frente del escenario m¨¢s vanguardista -dentro de lo posible- de la URSS. La muerte del l¨ªder sov¨ª¨¦tico Yuri Andropov pareci¨® cerrar definitivamente la puerta al regreso del artista.
Tarkovski, catalogado como uno de los directores m¨¢s prestigiosos de la URSS, es autor de seis largometrajes. Adem¨¢s de Andrei Rublev -sobre el famoso pintor ruso de ?conos-, destacan Solaris (1972) y Stalker, as¨ª como Espejo. Su producci¨®n ha desaparecido totalmente de las carteleras sovi¨¦ticas desde hace varios meses. Anteriormente se pasaba en salas peque?as o en lugares de acceso restringido, ya que se consideraba, por lo general, como un cine de minor¨ªas, en ocasiones herm¨¦tico y dif¨ªcil de entender. En opini¨®n de cr¨ªticos cinematogr¨¢ficos, el director, que ha ejercido su profesi¨®n a lo largo de m¨¢s de 20 a?os, trata, a trav¨¦s de la ¨¦pica medieval y de la ficci¨®n cient¨ªfica, problemas contempor¨¢neos del mundo sovi¨¦tico. Su ¨²ltima cinta, Nostalgia, ha sido rodada en Italia.
Seg¨²n todos los indicios, las autoridades de la URSS est¨¢n dispuestas a controlar m¨¢s intensamente que antes los valores difund¨ªdos desde las pantallas o los escenarios. El pasado mayo, una resoluci¨®n del Comit¨¦ Central del Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica y del Gobierno criticaba la divulgaci¨®n cinematogr¨¢fica de valores ambiguos y situaciones confusas no acordes con las caracter¨ªsticas que debe reunir el h¨¦roe socialista. En su calidad de ide¨®logo del partido, el actual l¨ªder, Konstant¨ªn Chernenko, hab¨ªa manifestado en junio de 1983 que la literatura y el cine deben propor cionar un ideal a imitar con "objetivos nobles" y convicciones ideol¨®gicas firmes.
Por otra parte, las autoridades sovi¨¦ticas quieren retirar de la escena la producci¨®n teatral de Yuri Lyubimov a partir del comienzo de la pr¨®xima temporada, seg¨²n afirman fuentes bien informadas. Dado que no existe todav¨ªa un repertorio de sustituci¨®n, el nuevo director de la Taganka, Anatoli Efros, ha enviado una carta a Konstant¨ªn,Chernenko para que permita la continuaci¨®n de la cartelera anterior en tanto no se forme otra nueva. Mientras, ensaya Los bajos fondos, de Gorki.
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