_
_
_
_
Tribuna:TEMAS DE NUESTRA ?POCA
Tribuna
Art¨ªculos estrictamente de opini¨®n que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opini¨®n han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opini¨®n de personas ajenas a la Redacci¨®n de EL PA?S llevar¨¢n, tras la ¨²ltima l¨ªnea, un pie de autor ¡ªpor conocido que ¨¦ste sea¡ª donde se indique el cargo, t¨ªtulo, militancia pol¨ªtica (en su caso) u ocupaci¨®n principal, o la que est¨¦ o estuvo relacionada con el tema abordado

Olimpismo, esa contradicci¨®n necesaria

Los contrasentidos y paradojas en el olimpismo moderno han sido la nota dominante en toda su historia. Los problemas actuales no son nuevos. La decisi¨®n sovi¨¦tica de no acudir a los Juegos Ol¨ªmpicos de Los Angeles, como contestaci¨®n a la ausencia norteamericana hace cuatro a?os, en Mosc¨², aunque haya quedado aderezada con todos los argumentos de la falta de seguridad, simplemente ha sido una consecuencia de la tormentosa herencia ol¨ªmpica desde sus inicios y del inexorable tributo a pagar en el tenso mundo pol¨ªtico actual. El ideario recuperado de la Grecia antigua por Pierre de Fredi, bar¨®n de Coubertin, a finales de siglo, no ha podido pasar de la utop¨ªa m¨¢s que en escasas ocasiones. Rara ha sido la edici¨®n de los Juegos que ha transcurrido sin sobresaltos.Desde la pol¨ªtica, en su sentido m¨¢s profesional, hasta el dinero, en todas sus proyecciones, la mayor¨ªa de los ingredientes ol¨ªmpicos han ido rompiendo continuamente el te¨®rico esp¨ªritu coubertiniano. No han podido, sin embargo, ni podr¨¢n, seguramente, acabar con ¨¦l de forma definitiva. El olimpismo es un bien ¨¦tico adem¨¢s de un espect¨¢culo de ocio enormemente rentable, que no interesa perder. Su problema es que en cuanto intenta sobrepasar su poder -espiritual en cierto modo-, est¨¢ abocado al fracaso. La alta pol¨ªtica y los intereses de las grandes potencias acaban imponi¨¦ndose.

El que dentro de unos d¨ªas -cuando se inauguren en Los ?ngeles los Juegos de la 23? Olimpiada- falte una serie de pa¨ªses no ser¨¢ un hecho ins¨®lito, aunque deval¨²a decisivamente la competici¨®n. Hist¨®ricamente, los problemas pol¨ªticos se han sucedido para afectar en mayor o menor grado al olimpismo. En los ¨²ltimos tiempos han llegado los boicoteos, pero en 1916, 1940 y 1944, como m¨¢ximos ejemplos, hubo dos guerras mundiales para suspender los Juegos. Y, en medio, multitud de agresiones al ideario coubertiniano.

Los Juegos Ol¨ªmpicos de la era moderna nacieron como un intento del bar¨®n franc¨¦s Pierre de Coubertin de conseguir a trav¨¦s del deporte una confraternizaci¨®n de la juventud del mundo. La pureza del esp¨ªritu ol¨ªmpico deb¨ªa presidir todo el proyecto, pero los obst¨¢culos y paradojas no pudieron salvarse nunca. En este sentido, el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional (COI), m¨¢ximo organismo encargado de velar por el olimpismo, se convirti¨® en el depositario de una serie de ideas maravillosas, pero dif¨ªcilmente reales.

Las dificultades del COI, por otra parte, no son raras. El ejemplo de las Naciones Unidas, organismo a quien se parece, reducido su ¨¢mbito al mundo del deporte, no le es ajeno. Sin que en el movimiento ol¨ªmpico haya derecho de veto institucionalizado, en la pr¨¢ctica es como si as¨ª fuera. La discrecionalidad en la participaci¨®n ol¨ªmpica pasa siempre incluso por encima de los deportistas, de su esfuerzo en la preparaci¨®n o de sus intereses. Quiz¨¢ sea esta la primera y no tan popular contradicci¨®n, pero s¨ª la m¨¢s profunda y grave, porque afecta a los grandes protagonistas, tratados como simples t¨ªteres, mercanc¨ªa de lujo en la exposici¨®n cuatrienal, y siempre y cuando convenga a los planes de su pa¨ªs.

Los Juegos Ol¨ªmpicos fueron pensados -as¨ª figura en la Carta Ol¨ªmpica- como una competici¨®n individual: "Los Juegos Ol¨ªmpicos son competiciones entre individuos y no entre pa¨ªses", dice su noveno principio fundamental. Pero de ello no existe realmente nada: aunque el atleta gane personalmente, quien en verdad capitaliza el posible ¨¦xito es su naci¨®n. Coubertin no quer¨ªa ya en un principio admitir deportes de equipo en el programa de los Juegos, precisamente para evitar los nacionalismos exacerbados, aparte de lo discutible que es la categor¨ªa ol¨ªmpica de bastantes modalidades. Su admiraci¨®n por el helenismo se tradujo no s¨®lo en ello, sino en su oposici¨®n a que participasen las mujeres. Sin embargo, en Amberes, 1920, el esgrimista franc¨¦s Victor Boin prest¨® el primer juramento ol¨ªmpico de los atletas y a?adi¨®: "Por el honor de nuestro pa¨ªs".

El escaparate ol¨ªmpico ha supuesto de hecho el lanzamiento publicitario de muchos pa¨ªses que de otra forma ser¨ªan ignorados en el concierto internacional. El caso de Liechtenstein, por ejemplo, gracias a sus esquiadores, o de ciertos pa¨ªses africanos, en virtud de sus atletas, son ejemplos significativos. Por otro lado, las m¨²ltiples medallas conseguidas por la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana, un pa¨ªs diez veces menor que los gigantes URSS o Estados Unidos, no han sido, para la conciencia general, las medallas de Kornelia Ender, por recordar s¨®lo la m¨¢s conocida, sino de "sus nadadoras", "sus remeros" o "sus atletas". Pocos nombres de nadadoras alemanas han quedado en la memoria de los aficionados. Han sido y contin¨²an siendo "n¨²meros", programados cient¨ªficamente desde su infancia, seg¨²n los par¨¢metros biomec¨¢nicos adecuados para practicar cada especialidad. Al final, tras el habitual y, la mayor¨ªa de las veces, fugaz asombro por cada triunfo, lo que queda, como un bombardeo continuo de anuncios televisivos es el izado de la bandera (ahora ya s¨®lo ser¨ªa la ol¨ªmpica), el himno y el r¨®tulo DDR.

Discriminaciones

Curiosamente, el ¨¦xito femenino de la RDA en los ¨²ltimos a?os (la participaci¨®n ol¨ªmpica de las dos Alemanias separadas s¨®lo se produjo a partir de los Juegos de M¨¦xico, en 1968) ha sido posible merced a una batalla ganada por las mujeres s¨®lo 40 a?os antes, en 1928. Los Juegos Ol¨ªmpicos modernos, sin llegar al extremo griego de no permitirles siquiera asistir a las pruebas, prohibi¨® su presencia en una contradicci¨®n m¨¢s del abierto esp¨ªritu ol¨ªmpico. Seg¨²n palabras del propio Coubertin en sus memorias, "su papel deber¨ªa ser, sobre todo, coronar a los vencedores". Hombres, naturalmente.

La Carta Ol¨ªmpica, actualmente, recoge en sus reglas de admisi¨®n de participantes en los Juegos una especial para autorizar a concurrir a las mujeres "conforme a los reglamentos de las federaciones internacionales interesadas, despu¨¦s del visto bueno del COI". Y eso que, desde su origen, la Carta se?alaba que no se pod¨ªa admitir ninguna discriminaci¨®n contra "un pa¨ªs o persona por razones raciales, religiosas o pol¨ªticas". No se refer¨ªa a las discriminaciones sexuales, y hasta que no se implant¨® el control de sexo obligatorio, ya se ha comprobado que varios campeones o ganadores de medallas ol¨ªmpicas femeninas no eran mujeres. Por ejemplo, las atletas velocistas polacas Stella Walasiewicz (WaIsh, al nacionalizarse norteamericana) y Eva Klobukowska, o la esquiadora austriaca Erika Heinegger, ya p¨²blicamente Erik.

Respecto a la discriminaci¨®n racial, ?frica del Sur est¨¢ excluida del movimiento ol¨ªmpico precisamente por su r¨¦gimen de apartheid. Pero en otra de las contradicciones flagrantes del olimpismo, sus relaciones con otros pa¨ªses, que s¨ª pertenecen al Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, a trav¨¦s del rugby, han provocado graves problemas. Efectivamente, el deporte del bal¨®n ovalado, con planteamientos brit¨¢nicos aristocr¨¢ticos parecidos a los iniciales del olimpismo moderno, ha obviado sistem¨¢ticamente todo contacto, no s¨®lo con el COI, sino incluso con las restantes federaciones internacionales. Y siendo el ¨²ltimo reducto del atleta amateur fue quien primero estuvo a punto de colapsar totalmente el olimpismo con el mayor boicoteo de los producidos en la historia ol¨ªmpica. D¨ªas antes de comenzar los Juegos de Montreal, en 1976, los pa¨ªses africanos exigieron la expulsi¨®n de Nueva Zelanda; porque su equipo nacional de rugby, los famosos All Blacks, efectuaban en aquel momento una gira por Sur¨¢frica. Al no atenderse su petici¨®n (como la de Taiwan a participar con el nombre de China, aunque China Popular a¨²n estaba fuera del olimpismo, y que tambi¨¦n se retir¨®), s¨®lo se quedaron en la ciudad canadiense Senegal y Costa de Marfil.

Las tensiones por las relaciones con el rugby han continuado. Ante los macroboicoteos de Mosc¨²-80 y Los ?ngeles-84, las giras habituales de este deporte, de Inglaterra, fundamentalmente, han provocado ya para esta edici¨®n la ausencia de Alto Volta, aunque sea testimonial, y la m¨¢s directa a los pr¨®ximos Juegos de la Commonwealth, en Edimburgo, como represalia contra el Reino Unido. En cualquier caso, es otra espita siempre abierta para gasear las citas ol¨ªmpicas a falta de la correspondiente invasi¨®n de Afiganist¨¢n. La URSS no ha necesitado echar mano ahora de Granada, y ha visto m¨¢s deportivo, acorde con las reglas del olimpismo, aducir violaciones de la Carta Ol¨ªmpica. La Carta Ol¨ªmpica, que se viola sistem¨¢ticamente, incluso desde dentro.

En los Juegos de 1904, en San Luis, tambi¨¦n sede de la Feria Internacional, el comit¨¦ organizador celebr¨® unas competiciones paralelas para atletas de otras razas, no merecedores de la categor¨ªa ol¨ªmpica, al parecer. Ninguno era blanco, naturalmente. El Ku Klux Klan, que ahora amenaza a los participantes de pa¨ªses asi¨¢ticos y africanos, diciendo, que los Juegos Ol¨ªmpicos son para humanos, no para simios, tal vez lo promovi¨®. El rimbombante Anthropological day, acogi¨® a negros, indios, chinos, sioux, patagones, cocopas, sirios, turcos y tagalos. En la Prensa de la ¨¦poca, el asombro, junto al dominio absoluto norteamericano en los Juegos normales, vino por detalles como los tres metros conseguidos en lanzamiento de peso por un pigmeo.

El ut¨®pico 'amateurismo'

Aparte de la impotencia frente a los grandes bloques, quiz¨¢ sea el problema del amateurismo la gran batalla ol¨ªmpica y su m¨¢s profunda contradicci¨®n. Coubertin fue el primero que supo desde el principio que el amateur puro era un imposible, pero empez¨® con amateurs, porque no tuvo

otro remedio. As¨ª se diferenciaba del profesionalismo practicado entonces por boxeadores y remeros brit¨¢nicos en el T¨¢mesis, donde se celebraban fuertes apuestas. El olimpismo, pues, se inici¨® s¨®lo con estudiantes y burgueses arist¨®cratas ricos. Sin ir m¨¢s lejos, los que se pod¨ªan pagar el viaje hasta el lugar de competici¨®n, como algunos norteamericanos a Atenas en 1896, en un hueco de sus vacaciones por la Vieja Europa. El bajo nivel de las marcas, por todo ello, estuvo justificado. Pero la elecci¨®n no iba a mantenerse muchos a?os y, en cualquier caso, la contradicci¨®n de una participaci¨®n abierta empezaba a coartarse.

Precedente 'desde fuera'

Se ha hecho referencia a la arrogancia de Estados Unidos, pero la Uni¨®n Sovi¨¦tica, tras su revoluci¨®n comunista, y precisamente en oposici¨®n a la burgues¨ªa capitalista que imperaba en el olimpismo, plante¨® una aut¨¦ntica batalla en el campo deportivo, hasta su incorporaci¨®n en Heisinki-52. Su ausencia actual, pues, tuvo su precedente desde fuera. En 1928, lleg¨® a organizar unas Espartakiadas, coincidiendo con los Juegos de Amsterdam. Entonces s¨ª fueron unos aut¨¦nticos Juegos paralelos, muy diferentes a los que ahora se pretende celebrar al margen de la cita de Los ?ngeles, al estar programadas solamente reuniones por deportes. En 1928, 5.000 participantes sovi¨¦ticos y 600 extranjeros de 12 pa¨ªses, con discreto nivel, compitieron para herir a los capitalistas ol¨ªmpicos. Cuatro a?os m¨¢s tarde, curiosamente, cuando iban a repetirse en Berl¨ªn y se celebraban los primeros Juegos en Los ?ngeles, el COI consigui¨® suspenderlos.

En los principios del olimpismo moderno, el tema de qu¨¦ atleta pod¨ªa ser elegido como ol¨ªmpico, tan pol¨¦mico desde siempre, era el m¨¢s importante para el COI, hasta el punto de dedicarle siete apartados, y era realmente un alarde de dureza clasista: "El que no sea obrero, artesano o jornalero" no pod¨ªa participar. Harold Abrahams, protagonista de Carros de fuego, fue ya criticado en 1924, por tener entrenador personal, ya que eso ol¨ªa a profesionalismo. Casos como los de Dorando Pietri, Jim Thorpe, Paavo Nurmi o Jules Ladoumegue fueron descalificaciones famosas por tener ligeras compensaciones en su deporte y en el que no era el suyo.

El proceso hist¨®rico oficial del amateur ol¨ªmpico, cada vez m¨¢s marr¨®n, ha ido evolucionando con la pol¨¦mica regla 26 de la Carta Ol¨ªmpica, hasta equipararse pr¨¢cticamente con los boxeadores y remeros del T¨¢mesis del siglo XIX. Ahora son los modernos esclavos de escaparate para las multinacionales. Al margen, claro, con otra falacia consentida, quedan los profesionales militares del Este.

Primero se permiti¨® a los atletas percibir una ayuda o compensaci¨®n de su federaci¨®n o Comit¨¦ Ol¨ªmpico Nacional. Ahora, tras el Congreso Ol¨ªmpico de Baden-Baden, en 1981, y la sesi¨®n del COI en Nueva Delhi en 1983, ya pueden cobrar por sus actuaciones o por publicidad, pero con el subterfugio de hacerlo a trav¨¦s de sus organismos jer¨¢rquicos, "que les guardar¨¢n el dinero hasta despu¨¦s de su retirada". Esquiadores como Ingernmar Stenmark y Hanni Werizel, que pidieron la llamada licencia B, para cobrar directamente, s¨®lo han sido v¨ªctimas, al no poder ya participar en los Juegos (aunque s¨ª en copas del mundo y campeonatos mundiales), un tanto absurdas en el marem¨¢gnum general. Los atletas de las millas urbanas, aut¨¦nticos feriantes modernos del m¨²sculo, Carl Lewis, los baloncestistas, los futbolistas (profesionales aunque no hayan jugado partidos en un mundial) y pronto los tenistas no tienen nada de amateurs.

Lo importante es ganar

La ¨²ltima gran contradicci¨®n del olimpismo es su propia impotencia para congeniar el gigantismo imparable del gran espect¨¢culo, pese a los boicoteos, con la participaci¨®n abierta, que s¨®lo fue una teor¨ªa incluso en sus comienzos. Lo importante, seg¨²n los atletas y los pa¨ªses, es ganar. Lo de participar, que Coubertin s¨®lo se limit¨® a recoger, pero no a inventar, es otra utop¨ªa en medio de la m¨¢s absoluta comercializaci¨®n.

Pagar 3.000 d¨®lares (unas 480.000 pesetas) por hacer un relevo de la antorcha, aunque la mayor parte de lo recaudado sea para una asociaci¨®n de ni?os minusv¨¢lidos, es s¨®lo la guinda de unos Juegos que rizar¨¢n el rizo este a?o contra la instrucci¨®n II de la Carta Ol¨ªmpica, cuyo t¨ªtulo reza: "Los Juegos Ol¨ªmpicos son no lucrativos". Pero la elite, atletas y directivos-empresarios, es la que manda en el gran montaje. Y por ello la lucha contra el doping es una batalla casi perdida, porque la detecci¨®n casi siempre va detr¨¢s de los medios de laboratorio puestos al servicio de quienes deben ganar a todo precio, y no ya el precio psicol¨®gico de convertirse en aut¨¦nticas m¨¢quinas humanas desde ni?os, sino incluso al coste de su misma salud.

Lejos, muy lejos, de todo esto quedan los abrazos de atletas de distintas razas, religiones e ideolog¨ªas en las ocasiones en que pudieron superar todos los inconvenientes. Lejos queda la boda del lanzador de martillo norteamericano Harold Conolly y la lanzadora de disco checoslovaca Olga Fikotova, ambos medallas de oro en sus pruebas, a ra¨ªz de los Juegos de Melbourne.

Sedes menos conflictivas

Y lejos queda que la soluci¨®n a los boicoteos sea la sede permanente en Grecia. Ello supondr¨ªa quitarle un aliciente de promoci¨®n y de movilidad al olimpismo, que podr¨ªa acabar con su actual inter¨¦s. Grecia, adem¨¢s, no es precisamente un pa¨ªs con garant¨ªas de no tener problemas pol¨ªticos internos, o externos. La cuesti¨®n s¨®lo estriba en elegir sedes lo menos conflictivas posibles y no ir m¨¢s all¨¢ de sus propias fuerzas, olvidando planteamientos triunfalistas, como es el de conceder la organizaci¨®n a las grandes potencias (aunque fuese Los ?ngeles ¨²nica candidata en su momento) o a pa¨ªses con problemas vigentes, como suceder¨¢ con Se¨²l-88.

Ahora mismo hay empate en boicoteos, pero nadie puede garantizar ya, tal como han ido la historia ol¨ªmpica y el mundo pol¨ªtico, que a cualquiera no se le ocurra desempatar. Porque lejos, muy lejos, queda que el COI consiga alg¨²n d¨ªa el estatuto jur¨ªdico ideal y de la ONU deportiva (al final ha declinado pedir su protecci¨®n, pues podr¨ªa ser a¨²n m¨¢s contraproducente) se convierta en la Cruz Roja salvadora. S¨®lo sufrir¨ªa entonces, de cuando en cuando, alguna bala perdida, pero no de lleno el misil en cada oportunidad que se presente.

* Denominaci¨®n correcta y equivalente a Juegos Ol¨ªmpicos, pero no a olimpiada, palabra griega que s¨®lo significa cuatro a?os, per¨ªodo de tiempo entre cada edici¨®n de los Juegos, por lo que su mal uso, en gran parte por ser m¨¢s corta, es lamentable, e incorrectamente, ya habitual. El diccionario de la Real Academia Espa?ola, en su nueva edici¨®n, tambi¨¦n se contradice al aceptar la misma acepci¨®n para el tiempo entre cada competici¨®n y la competici¨®n misma.

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo

?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?

Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.

?Por qu¨¦ est¨¢s viendo esto?

Flecha

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.

En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PA?S
Recomendaciones EL PA?S
Recomendaciones EL PA?S
_
_
seductrice.net
universo-virtual.com
buytrendz.net
thisforall.net
benchpressgains.com
qthzb.com
mindhunter9.com
dwjqp1.com
secure-signup.net
ahaayy.com
tressesindia.com
puresybian.com
krpano-chs.com
cre8workshop.com
hdkino.org
peixun021.com
qz786.com
utahperformingartscenter.org
worldqrmconference.com
shangyuwh.com
eejssdfsdfdfjsd.com
playminecraftfreeonline.com
trekvietnamtour.com
your-business-articles.com
essaywritingservice10.com
hindusamaaj.com
joggingvideo.com
wandercoups.com
wormblaster.net
tongchengchuyange0004.com
internetknowing.com
breachurch.com
peachesnginburlesque.com
dataarchitectoo.com
clientfunnelformula.com
30pps.com
cherylroll.com
ks2252.com
prowp.net
webmanicura.com
sofietsshotel.com
facetorch.com
nylawyerreview.com
apapromotions.com
shareparelli.com
goeaglepointe.com
thegreenmanpubphuket.com
karotorossian.com
publicsensor.com
taiwandefence.com
epcsur.com
southstills.com
tvtv98.com
thewellington-hotel.com
bccaipiao.com
colectoresindustrialesgs.com
shenanddcg.com
capriartfilmfestival.com
replicabreitlingsale.com
thaiamarinnewtoncorner.com
gkmcww.com
mbnkbj.com
andrewbrennandesign.com
cod54.com
luobinzhang.com
faithfirst.net
zjyc28.com
tongchengjinyeyouyue0004.com
nhuan6.com
kftz5k.com
oldgardensflowers.com
lightupthefloor.com
bahamamamas-stjohns.com
ly2818.com
905onthebay.com
fonemenu.com
notanothermovie.com
ukrainehighclassescort.com
meincmagazine.com
av-5858.com
yallerdawg.com
donkeythemovie.com
corporatehospitalitygroup.com
boboyy88.com
miteinander-lernen.com
dannayconsulting.com
officialtomsshoesoutletstore.com
forsale-amoxil-amoxicillin.net
generictadalafil-canada.net
guitarlessonseastlondon.com
lesliesrestaurants.com
mattyno9.com
nri-homeloans.com
rtgvisas-qatar.com
salbutamolventolinonline.net
sportsinjuries.info
wedsna.com
rgkntk.com
bkkmarketplace.com
zxqcwx.com
breakupprogram.com
boxcardc.com
unblockyoutubeindonesia.com
fabulousbookmark.com
beat-the.com
guatemala-sailfishing-vacations-charters.com
magie-marketing.com
kingstonliteracy.com
guitaraffinity.com
eurelookinggoodapparel.com
howtolosecheekfat.net
marioncma.org
oliviadavismusic.com
shantelcampbellrealestate.com
shopleborn13.com
topindiafree.com
v-visitors.net
djjky.com
053hh.com
originbluei.com
baucishotel.com
33kkn.com
intrinsiqresearch.com
mariaescort-kiev.com
mymaguk.com
sponsored4u.com
crimsonclass.com
bataillenavale.com
searchtile.com
ze-stribrnych-struh.com
zenithalhype.com
modalpkv.com
bouisset-lafforgue.com
useupload.com
37r.net
autoankauf-muenster.com
bantinbongda.net
bilgius.com
brabustermagazine.com
indigrow.org
miicrosofts.net
mysmiletravel.com
selinasims.com
spellcubesapp.com
usa-faction.com
hypoallergenicdogsnames.com
dailyupdatez.com
foodphotographyreviews.com
cricutcom-setup.com
chprowebdesign.com
katyrealty-kanepa.com
tasramar.com
bilgipinari.org
four-am.com
indiarepublicday.com
inquick-enbooks.com
iracmpi.com
kakaschoenen.com
lsm99flash.com
nana1255.com
ngen-niagara.com
technwzs.com
virtualonlinecasino1345.com
wallpapertop.net
casino-natali.com
iprofit-internet.com
denochemexicana.com
eventhalfkg.com
medcon-taiwan.com
life-himawari.com
myriamshomes.com
nightmarevue.com
healthandfitnesslives.com
androidnews-jp.com
allstarsru.com
bestofthebuckeyestate.com
bestofthefirststate.com
bestwireless7.com
britsmile.com
declarationintermittent.com
findhereall.com
jingyou888.com
lsm99deal.com
lsm99galaxy.com
moozatech.com
nuagh.com
patliyo.com
philomenamagikz.net
rckouba.net
saturnunipessoallda.com
tallahasseefrolics.com
thematurehardcore.net
totalenvironment-inthatquietearth.com
velislavakaymakanova.com
vermontenergetic.com
kakakpintar.com
begorgeouslady.com
1800birks4u.com
2wheelstogo.com
6strip4you.com
bigdata-world.net
emailandco.net
gacapal.com
jharpost.com
krishnaastro.com
lsm99credit.com
mascalzonicampani.com
sitemapxml.org
thecityslums.net
topagh.com
flairnetwebdesign.com
rajasthancarservices.com
bangkaeair.com
beneventocoupon.com
noternet.org
oqtive.com
smilebrightrx.com
decollage-etiquette.com
1millionbestdownloads.com
7658.info
bidbass.com
devlopworldtech.com
digitalmarketingrajkot.com
fluginfo.net
naqlafshk.com
passion-decouverte.com
playsirius.com
spacceleratorintl.com
stikyballs.com
top10way.com
yokidsyogurt.com
zszyhl.com
16firthcrescent.com
abogadolaboralistamd.com
apk2wap.com
aromacremeria.com
banparacard.com
bosmanraws.com
businessproviderblog.com
caltonosa.com
calvaryrevivalchurch.org
chastenedsoulwithabrokenheart.com
cheminotsgardcevennes.com
cooksspot.com
cqxzpt.com
deesywig.com
deltacartoonmaps.com
despixelsetdeshommes.com
duocoracaobrasileiro.com
fareshopbd.com
goodpainspills.com
hemendekor.com
kobisitecdn.com
makaigoods.com
mgs1454.com
piccadillyresidences.com
radiolaondafresca.com
rubendorf.com
searchengineimprov.com
sellmyhrvahome.com
shugahouseessentials.com
sonihullquad.com
subtractkilos.com
valeriekelmansky.com
vipasdigitalmarketing.com
voolivrerj.com
zeelonggroup.com
1015southrockhill.com
10x10b.com
111-online-casinos.com
191cb.com
3665arpentunitd.com
aitesonics.com
bag-shokunin.com
brightotech.com
communication-digitale-services.com
covoakland.org
dariaprimapack.com
freefortniteaccountss.com
gatebizglobal.com
global1entertainmentnews.com
greatytene.com
hiroshiwakita.com
iktodaypk.com
jahatsakong.com
meadowbrookgolfgroup.com
newsbharati.net
platinumstudiosdesign.com
slotxogamesplay.com
strikestaruk.com
trucosdefortnite.com
ufabetrune.com
weddedtowhitmore.com
12940brycecanyonunitb.com
1311dietrichoaks.com
2monarchtraceunit303.com
601legendhill.com
850elaine.com
adieusolasomade.com
andora-ke.com
bestslotxogames.com
cannagomcallen.com
endlesslyhot.com
iestpjva.com
ouqprint.com
pwmaplefest.com
qtylmr.com
rb88betting.com
buscadogues.com
1007macfm.com
born-wild.com
growthinvests.com
promocode-casino.com
proyectogalgoargentina.com
wbthompson-art.com
whitemountainwheels.com
7thavehvl.com
developmethis.com
funkydogbowties.com
travelodgegrandjunction.com
gao-town.com
globalmarketsuite.com
blogshippo.com
hdbka.com
proboards67.com
outletonline-michaelkors.com
kalkis-research.com
thuthuatit.net
buckcash.com
hollistercanada.com
docterror.com
asadart.com
vmayke.org
erwincomputers.com
dirimart.org
okkii.com
loteriasdecehegin.com
mountanalog.com
healingtaobritain.com
ttxmonitor.com
nwordpress.com
11bolabonanza.com