Nuevos apuros para el presidente boliviano al producirse una nueva escisi¨®n en el MNRI
La divisi¨®n en el partido pol¨ªtico del presidente boliviano, Hern¨¢n Siles Zuazo, el Movimiento Nacionalista Revoluci¨®n ario de Izquierda (MNRI), proyecta nuevas sombras sobre el proceso democr¨¢tico de este pa¨ªs andino, sometido en las ¨²ltimas semanas a duras pruebas. Un sector del MNRI, encabezado por el ex ministro de Asuntos Exteriores Mar¨ªo Velarde, otrora hombre de confianza de Siles Zuazo, decidi¨® el martes separarse del partido y crear una nueva formaci¨®n pol¨ªtica, denominada MNRI-Siglo XX, que pasar¨¢ a la oposici¨®n. Velarde asegur¨® que su partido "ser¨¢ dr¨¢stico en el Parlamento al fiscalizar los actos del Gobierno", si bien no explic¨® las causas que le llevaron a separarse del MNRI.Esta decisi¨®n, significa la p¨¦rdida por parte del Gobierno de cuatro diputados y el refuerzo de la hegemon¨ªa opositora en el Congreso. La crisis se produce cuando el presidente efect¨²a consultas con los partidos representados en el Gobierno para recomponer ¨¦ste y fortalecer su mandato frente a los embates de la oposici¨®n y los sindicatos.
Divisiones en el MNRI
En un esfuerzo por ampliar su base, el Gobierno concluy¨® acuerdos pol¨ªticos el pasado mes de julio con el Partido Socialista-Uno (PS-1), que obtuvo el cuarto puesto en las elecciones generales de 1980. Sin embargo, este compromiso motiv¨® una divisi¨®n en el seno del PS-1. El presidente ha tenido que enfrentarse ya, desde que accedi¨® al poder, con la divisi¨®n de su partido en cuatro sectores diferentes, tres de ellos convertidos hoy en ac¨¦rrimos opositores a su mandato.El Gobierno boliviano est¨¢ integrado, adem¨¢s de por el MNRI, por el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), del vicepresidente Jaime Paz Zamora, por el Partido Comunista boliviano (PCB) y por el Partido Dem¨®crata Cristiano (PDC). "
El MIR, de Paz Zamora, se separ¨® de la coalici¨®n de poder en enero de 1983, pocos meses despu¨¦s de la llegada al poder de Siles Zuazo, alegando divergencias internas, pero volvi¨® a ingresar en el Gobierno con el objetivo declarado de contribuir al fortalecimiento del amenazado sistema democr¨¢tico.
A la presi¨®n pol¨ªtica contra el Gobierno de Siles Zuazo se suma ahora una nueva oleada de huelgas y paros laborales motivados por la grave crisis econ¨®mica. Siles Zuazo ha convocado a los sindicatos controlados por la poderosa Central Obrera Boliviana (COB) a "parar las huelgas salvajes que sangran a¨²n m¨¢s la ya depauperada econom¨ªa nacional". Intentos similares en este sentido no tuvieron ¨¦xito.
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