Luis Alfonso de Borb¨®n regresa a Espa?a tras el tr¨¢gico accidente de la hija de Rossi

Luis Alfonso de Borb¨®n, de nueve a?os, hijo del duque de C¨¢diz y Mar¨ªa del Carmen Mart¨ªnez-Bordi¨², regres¨® ayer a Madrid por v¨ªa a¨¦rea, procedente de Miami (Estados Unidos). Luis Alfonso, a quien recogi¨® su padre en el aeropuerto, fue testigo de la muerte violenta de Mathilda Rossi, que fue arrollada por la h¨¦lice de una motora para el esqu¨ª acu¨¢tico, en aguas de las Bahamas. Mathilda era hija del anticuario franc¨¦s, Jean-Marie Rossi, actual compa?ero de la madre de Alfonso. Su cad¨¢ver llegar¨¢ probablemente el pr¨®ximo martes a Par¨ªs, donde resid¨ªa.

Luis Alfonso de Borb¨®n, hijo de un primo hermano del Rey de Espa?a y bisnieto del anterior jefe del Estado, Francisco Franco, se mostr¨® huidizo con los periodistas que le esperaban en el aeropuerto, ocultando su rostro en ocasiones para evitar que los fot¨®grafos captaran su imagen. No hubo declaraciones en Barajas, y Luis Alfonso, que viajaba desde Miami acompa?ado de su t¨ªa Arantxa Mart¨ªnez-Bordi¨², se traslad¨® a su domicilio familiar, junto a su padre, con quien dentro de unos d¨ªas se desplazar¨¢ a una playa para continuar sus vacaciones.Por su parte, B¨¢rbara de Rossi (de soltera B¨¢rbara Hottinguer), madre de Mathilda y esposa del compa?ero de la madre de Luis Alfonso, ha decidido regresar a Par¨ªs al mismo tiempo que su marido, Jean-Marie Rossi, y el resto de la familia, acompa?ando el cad¨¢ver de su hija Mathilda, informa Feliciano Fidalgo. Toda la familia, en cuanto se hayan resuelto los tr¨¢mites administrativos espec¨ªficos del caso, retornar¨¢ a Rueil-Malmaison, el poblado de la periferia parisiense donde los Rossi poseen su residencia campestre.

Durante los tres ¨²ltimos d¨ªas, seg¨²n manifest¨® un allegado de la esposa de Rossi, su piso de Rueil-Malmaison se abarrotaba de ramos de flores de amigos que deseaban manifestarle su p¨¦same. Telef¨®nicamente,. desde la residencia de un amigo pr¨®ximo (la casa de las Bahamas que hab¨ªa alquilado su marido parece ser que no. tiene tel¨¦fono), B¨¢rbara orden¨® a sus empleados que avisaran a todos los amigos para que no enviaran flores, ya que ella anteayer cambi¨® de intenci¨®n y en vez de regresar inmediatamente decidi¨® unirse a la comitiva familiar, que en los pr¨®ximos d¨ªas, tan pronto como se hayan resuelto todos los tr¨¢mites, acompa?ar¨¢ al cad¨¢ver de su hija Mathilda, que ten¨ªa 13 a?os de edad.

Esta decisi¨®n de la "se?ora de Rossi", como recalcan significativamente sus dos empleados (un hombre y una mujer) cuando hablan de ella, parece que desmiente tajantemente algunos rumores, por lo visto sin fundamento tangible, que se difundieron acerca del enojo, por no decir algo peor, que hubiese podido surgir entre los esposos Rossi por el hecho de que el conductor de la lancha motora que caus¨® el accidente fatal fuese, Luis Alfonso de Borb¨®n, el hijo de la ex duquesa de C¨¢diz.