'Carretera de la muerte'
En el n¨²mero del 4 de septiembre de 1984, y bajo el t¨ªtulo Carretera de la muerte, publica ese diario unPasa a la p¨¢gina 10
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art¨ªculo firmado por L. M. de Dios en el que hace una serie de consideraciones acerca de los accidentes sufridos por los emigrantes portugueses en tr¨¢nsito por Espa?a. Sobre el particular quisiera hacer algunas precisiones.
Quiz¨¢ la cuesti¨®n m¨¢s impartante que suscita el problema del alto grado de accidentalidad que sufren estos emigrantes es la escasa posibilidad de actuaci¨®n efectiva que tienen las autoridades de un pa¨ªs sobre conductores formados en otro, sobre los que asimismo no es posible hacer llegar ninguna de nuestras acciones educativas durante el resto del a?o, puesto que nuestro contacto con ellos se ci?e exclusivamente a uno o dos d¨ªas durante el verano. Pese a ello, no parece que sea adecuado hablar de "t¨ªmidos intentos para tratar de solucionar el problema" por parte de las autoridades de Espa?a y Portugal. Por el contrario, el esfuerzo desplegado por la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, que ha contado con colaboraciones estimables, ha sido importante, y as¨ª hay que tener en cuenta que en las tres ¨¢reas de descanso para emigrantes portugueses en tr¨¢nsito organizadas por este organismo (una m¨¢s que el a?o pasado) se han detenido para descansar del orden de los 10.000 veh¨ªculos, habiendo sido su tiempo medio de detenci¨®n de 45 minutos. Es dif¨ªcil evaluar cu¨¢l es la cantidad de veh¨ªculos que recorren Espa?a con destino a Portugal procedentes de los pa¨ªses del norte y centro de Europa, pues hay que tener en cuenta que en definitiva llevan matr¨ªcula del pa¨ªs de origen y, por tanto, no existen c¨¢lculos exactos por parte de las autoridades aduaneras; no obstante, se puede estimar que no ser¨¢ muy superior a 30.000 su n¨²mero, por lo que afirmar como se hace en su art¨ªculo que "las ¨¢reas de descanso no sirven demasiado" resulta dificilmente defendible.
La Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, tras una primera evaluaci¨®n de la actual campa?a de marroqu¨ªes y portugueles y por el notabil¨ªsimo incremento de utilizaci¨®n de las ¨¢reas con relaci¨®n a a?os precedentes, ha comenzado ya a programar la actuaci¨®n del a?o pr¨®ximo sobre la base de instalar mayor n¨²mero de ¨¢reas y con mejores servicios y m¨¢s eficaz se?alizaci¨®n y localizaci¨®n, sin perjuicio de que eventualmente pueda adoptarse alg¨²n otro tipo de acciones para controlar el estado de los veh¨ªculos y los tiempos de conducci¨®n. Por la misma raz¨®n, han comenzado? ya los contactos con las autoridades de los pa¨ªses de residencia habitual y de destino para conseguir el m¨¢ximo de difusi¨®n de la existencia de la campa?a hasta tratar de lograr que la parada en alguna de las ¨¢reas de: descanso entre ya desde el principio en la programaci¨®n del viaje desde su origen.- Director General de Tr¨¢fico.
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