La CEE no presentar¨¢ a Espa?a el d¨ªa 3 una propuesta global sobre los temas pendientes

La pr¨®xima sesi¨®n de negociaci¨®n entre Espa?a y la CEE tendr¨¢ lugar el mi¨¦rcoles en Luxemburgo. Para prepararla, esta ciudad se convertir¨¢ ma?ana y el martes en lugar de encuentro de 30 ministros de la CEE: los de Econom¨ªa y Hacienda, los de Agricultura y los de Asuntos Exteriores. Entre todos, aunque se reunir¨¢n por separado, intentar¨¢n solucionar el acuciante problema presupuestario de la Comunidad y poner a punto un paquete que presentar el mi¨¦rcoles a Espa?a. Un acuerdo interno sobre el paquete, a pesar de su importancia, es sin embargo dif¨ªcil, seg¨²n las fuentes comunitarias consultadas por EL PA?S, que ya hablan de la pr¨®xima cita del 24 de octubre.

Tanto el cap¨ªtulo pesquero como el agr¨ªcola, especialmente en lo apartados de vino y aceite de oliva m¨¢s desarme arancelario, siderurgia y asuntos sociales, son puntos en los que a¨²n no hay acuerdo. Adem¨¢s, dos movimientos paralelos pueden dejar a Espa?a en un posici¨®n aislada y dif¨ªcil frente a la CEE, lo que ejercer¨ªa una importante presi¨®n sobre los negociadores espa?oles, si no quieren perder el tren de la adhesi¨®n.El primer movimiento es que se rompa el lazo, establecido desde junio de 1983, entre la ratificaci¨®n por los Parlamentos de los diez de los nuevos recursos financieros de la CEE y de las actas de adhesi¨®n de Espa?a y Portugal. En este terreno, la Rep¨²blica Federal de Alemania (RFA), que manten¨ªa la llama, est¨¢ cediendo. Los ministros debatir¨¢n la exigencia brit¨¢nica de limitar el aumento de los gastos, especialmente agr¨ªcolas de la CEE.

Precisamente ma?ana y pasado, los ministros comunitarios abordar¨¢n la cobertura del d¨¦ficit del presupuesto de los diez para 1984 y 1985. Este a?o ser¨¢n los propios Estados los que adelanten el dinero. Pero, en 1985, la propuesta sobre la mesa es la de anticipar la entrada en vigor de los nuevos recursos financieros, tras su ratificaci¨®n en el Parlamento. En principio, estos recursos no deb¨ªan entrar en vigor hasta el 1 de enero de 1986. La RFA, y Holanda en menor medida, quieren mantener el v¨ªnculo formal con la ratificaci¨®n del ingreso de Espa?a y Portugal. Pero al estar ligada la soluci¨®n para 1984 a una decisi¨®n sobre 1985, el v¨ªnculo puede saltar.

El segundo peligro para Espa?a est¨¢ unido a la petici¨®n portuguesa de firmar un acta de acuerdo que dejar¨ªa sentada la fecha del 1 de enero de 1986 para el ingreso de Portugal, sin garant¨ªas para el caso espa?ol. Este acuerdo, sobre todo si va acompa?ado del cierre del cap¨ªtulo pesquero, crear¨ªa un precedente para Espa?a, precedente que Francia potencia. Se podr¨ªa llegar de ese modo a una situaci¨®n en la que la negociaci¨®n con Espa?a siguiera bloqueada, mientras que este texto luso-comunitario llevar¨ªa a la firma del tratado de adhesi¨®n de los portugueses.

Esperar al final

La CEE siempre suele aguardar hasta el ¨²ltimo momento posible -al borde del precipicio y jugando con tensiones y crisis- para tomar decisiones importantes que requieren ajustes de intereses y sacrificios. El problema ser¨¢ que una vez que est¨¦n de acuerdo los diez para hacer una oferta a Espa?a, ¨¦sta tendr¨¢ sumas dificultades en cambiarla, especialmente si no queda tiempo. Estos son los principales problemas pendientes en la agenda comunitaria.

La delegaci¨®n espa?ola, presidida por Mor¨¢n, presentar¨¢ el mi¨¦rcoles a la CEE tres declaraciones en principio. Una sobre siderurgia, rechazando el protocolo que le ofreci¨® la Comunidad, por el cual la siderurgia espa?ola quedar¨ªa durante cuatro a?os al margen del r¨¦gimen comunitario, manteni¨¦ndose las restricciones a las exportaciones hacia la CEE. ?sta asegura que es necesario que el sector espa?ol siga requiriendo ayudas nacionales despu¨¦s de 1986. Espa?a preferir¨ªa una f¨®rmula por la cual quedaran al margen del r¨¦gimen de la CEE s¨®lo aquellas empresas precisas a las que se siguieran otorgando ayudas, en la medida en que ¨¦stas hubiesen cesado en los diez. Espa?a presentar¨¢ adem¨¢s un documento sobre la inclusi¨®n de la peseta en el ECU (Unidad de Cuenta Europea) y otro sobre su participaci¨®n en la ayuda al Tercer Mundo.

Como recordatorio, adem¨¢s de lo antes citado queda por negociar el r¨¦gimen de Canarias, las relaciones bilaterales entre Espa?a y Portugal, el r¨¦gimen de Andorra, la participaci¨®n espa?ola en el presupuesto de la CEE y otros temas. La cuesti¨®n de las instituciones y el estatuto de Espa?a en ellas est¨¢ planteando, ante las demandas espa?olas, m¨¢s problemas de los previstos inicialmente.

Es improbable terminar las negociaciones antes de que acabe 1984, seg¨²n fuentes comunitarias consultadas por EL PA?S, y entre las que empieza a cundir el pesimismo. Claro que los milagros son siempre posibles. Pero la fecha l¨ªmite para la firma del tratado de adhesi¨®n es marzo. De otro modo no habr¨ªa tiempo para ratificarlo.