Una conferencia de Ferrater Mora abre el seminario sobre los exilios espa?oles

Con la conferencia del fil¨®sofo Jos¨¦ Ferrater Mora sobre el Exilio planetario se abri¨® ayer en Sevilla el seminario titulado Los exilios en el pensamiento y la literatura, que dirige Jes¨²s Aguirre, duque de Alba, en el seno de la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo. Destacadas personalidades -Ferrater, L¨¢zaro Carreter, Jorge Sempr¨²n, Savater y otros- tratar¨¢n de desvelar las claves de los exilios impuestos y voluntarios, pero tambi¨¦n de "destruir el equ¨ªvoco de que todo exilio es coactivo".

El seminario sobre Los exilios en el pensamiento y la literatura ha batido el r¨¦cord de matr¨ªculas que ostentaba otro curso hermano: el que se desarrollaba en torno a la literatura fant¨¢stica. La conferencia inaugural no pudo pronunciarla su autor, Jos¨¦ Ferrater Mora, cuya esposa se halla enferma en un hospital americano, y fue el propio director del seminario, Jes¨²s Aguirre, quien la ley¨®. Hay una intenci¨®n principal de rescatar el exilio de determinados l¨ªmites en el fundamento de la organizaci¨®n del seminario: "Destruir el equ¨ªvoco de que el exilio va ligado a coacci¨®n". "Queremos", explica Jes¨²s Aguirre, "que no se hermane el exilio solamente con lo pol¨ªtico. El pol¨ªtico no se extra?a de su propio ambiente, ya que en su ideario hay una dependencia de lo externo. El pol¨ªtico es nervioso, y el escritor, ensimismado". Parten los organizadores de la idea principal de que el exilio "es consustancial al hombre. No es, pues, inexacto decir que la vida es una vacaci¨®n de la muerte, que est¨¢ ah¨ª y es el exilio definitivo". Los exilios han existido en todos los siglos, a lo largo y ancho del devenir humano. Por eso se ha seleccionado una muestra fenomenol¨®gica, porque "hubi¨¦semos deseado hablar tambi¨¦n de Juan Luis Vives y les exiliados del siglo XV".

Dice el duque de Alba, "desde Pedro Salinas, el mar de Puerto Rico es ya un mar espa?ol. Luis Cernuda aporta a Espa?a toda la realidad del mundo mexicano". Por otro lado, no todos son coactivos: Jorge Santallana se autodefin¨ªa como "hu¨¦sped del mundo", y Juan Ram¨®n dijo que la Espa?a del exilio ten¨ªa los mismos vicios que la peninsular; ambos, voluntarios. Tambi¨¦n los no pol¨ªticos, como Severo Ochoa. "?sos son m¨¢s tristes que los meramente pol¨ªticos".

Exilios y recuperaciones

Aunque cada vez con menos frecuencia, a¨²n persisten los exilios coactivos, a juicio del director del seminario: "Es dif¨ªcil en pa¨ªses occidentales, pero en los del Este y en Cuba hay exilios forzados. Por Cuba todos sentimos fascinaci¨®n porque era algo nuevo y rom¨¢ntico. Ahora resulta grotesco llamarlo as¨ª y, desde el punto de vista humano, resulta repelente. Hay que pensar que quienes lo defienden lo hacen por sueldo". Especialmente contundente se mostr¨® Jes¨²s Aguirre al contestar sobre el fin del exilio: el regreso, que tiene la propia vertiente f¨ªsica del regreso, la vuelta, la llegada, y la otra cara que constituye la recuperaci¨®n. "En el caso de la recuperaci¨®n de los exiliados del 39, no suele estar protagonizada por los propios recuperados, sino por los pol¨ªticos, que a veces no merecen m¨¢s que su cargo. El retrato de una recuperaci¨®n suele ser una foto en sepia del recuperado, y multicolor del recuperador. Una buena recuperaci¨®n ser¨ªa, por ejemplo, la publicaci¨®n de la obra del exiliado. A¨²n seguimos sin tener en Espa?a las obras completas de Am¨¦rico Castro".