Nadie falt¨® a la cita

Felipe Gonz¨¢lez lleg¨® al Congreso, que ayer ten¨ªa colocadas las alfombras de los pasillos tras la operaci¨®n de lavander¨ªa veraniega, y se encontr¨® con una espera tumultuaria. "?Vaya atasco!", sentenci¨® antes de que le pusieran varios micr¨®fonos delante. Manuel Fraga, presidente de AP, lleg¨® con su malet¨ªn y un gran paquete de copias de su discurso para los periodistas. Fraga subi¨® a su despacho durante el descanso para preparar su intervenci¨®n y orden¨® tajantemente que nadie le molestara. Seg¨²n le dijo a su secretaria, incluso un diputado de AP era en aquel momento un estorbo.El hemiciclo, por vez primera en lo que va de periodo de sesiones, estuvo lleno. Aparecieron personajes tan poco habituales como Oscar Alzaga, del PDP, coligado con AP, y Jes¨²s Sancho Rof (UCD). Socialistas y conservadores aplaudieron con fervor a sus primeros espadas. Felipe Gonz¨¢lez y Fraga estuvieron casi monocordes en sus primeros discursos. S¨®lo en las r¨¦plicas se les calent¨® la lengua. El diputado socialista Guillermo Galeote mantuvo la sonrisa ir¨®nica mientras habl¨® Fraga. Jorge Verstryrige, de AP, ri¨® estent¨®reamente las frases de su jefe. Sobre todo aquella de que "una sardina es una ballena que ha pasado por las manos de un Gobierno socialista".