El PSOE acepta dialogar con Garaikoetxea sobre la financiaci¨®n de la autonom¨ªa vasca
El Gobierno vasco dispondr¨¢ de un plazo de casi dos meses para intentar superar, mediante una pol¨ªtica de pactos con la oposici¨®n, la situaci¨®n de semibloqueo institucional en que se encuentra actualmente la comunidad aut¨®noma. Los socialistas han respondido afirmativamente a la oferta de negociaci¨®n planteada por el vicelendakari, Mario Fern¨¢ndez, sobre las aportaciones de las diputaciones a los presupuestos de Euskadi, pero seguramente otras cuestiones, y singularmente la de la actitud del Gabinete de Carlos Garaikoetxea ante ETA, estar¨¢n sobre la mesa.
El portavoz del Gobierno vasco anunci¨® ayer que Garaikoetxea y Mario Fern¨¢ndez mantendr¨¢n contactos, antes del pleno del Parlamento que se celebrar¨¢ el pr¨®ximo mi¨¦rcoles, con todos los grupos de la oposici¨®n. Si, tal como se da por seguro, tales contactos no modifican las actuales intenciones de voto de Euskadiko Ezkerra, Coalici¨®n Popular y PSOE, el d¨ªa 14 se producir¨¢ un empate a 32 votos, lo que obligar¨¢ a recomenzar todo el proceso de elaboraci¨®n del acuerdo sobre aportaciones de las diputaciones a los presupuestos. As¨ª, la votaci¨®n definitiva dif¨ªcilmente se producir¨¢ antes de fin de a?o. Es el plazo con que cuenta Garaikoetxea para definir una pol¨ªtica de pactos para la legislatura.Jos¨¦ Mar¨ªa Benegas, secretario general del Partido Socialista de Euskadi-PSOE, afirm¨® ayer que su grupo no pone condici¨®n alguna al di¨¢logo propuesto por Mario Fern¨¢ndez, ni siquiera respecto al temario del mismo.
Sin embargo, la f¨®rmula utilizada para comunicar oficialmente la aceptaci¨®n de la oferta -"abrir un di¨¢logo para conocer las posibilidades de llegar a acuerdos que permitan la gobernabilidad de la comunidad aut¨®noma"- implica claramente que el PSOE se propone hablar no s¨®lo de las aportaciones de las diputaciones, sino del conjunto de factores que dificultan hoy la gobernabilidad del Pa¨ªs Vasco.
Cambio de actitud
M¨¢s concretamente, es casi seguro que los socialistas vascos exigir¨¢n a Garaikoetxea, como precio de su eventual apoyo, un cambio de actitud respecto a las cuestiones que determinaron durante el pasado verano el deterioro de las relaciones Vitoria-Madrid: extradiciones, rebrote de las guerrillas de las banderas y de los secretarios de Ayuntamiento, acatamiento condicional de la legalidad constitucional, declaraciones del lendakari a la Prensa francesa, etc¨¦tera.A su vez, la prioridad dada por el Gobierno vasco a las negociaciones con los socialistas est¨¢ determinada por la posibilidad de obtener contrapartidas en relaci¨®n a los otros dos grandes motivos de preocupaci¨®n actuales: paralizaci¨®n de las transferencias y reconversi¨®n industrial. La l¨ªnea de pacto con el PSOE se ve favorecida, adem¨¢s, por la significativa evoluci¨®n producida ¨²ltimamente en algunos influyentes sectores de dicho partido respecto a los criterios de aplicaci¨®n de la ley de Territorios Hist¨®ricos.
El diputado vizca¨ªno Ricardo Garc¨ªa Damborenea, muy escuchado en las altas esferas en Madrid, sorprendi¨® relativa mente el pasado fin de semana afirmando en unas declaraciones que la discusi¨®n sobre el modelo de organizaci¨®n interna de la comunidad aut¨®noma es "un problema de los nacionalistas", insinuando que estar¨ªa dispuesto a aceptar cualquiera de las dos f¨®rmulas enfrentadas: la centralista o la provincialista. Pero esa flexibilidad -que no se da, por motivos contrapuestos, ni en Euskadiko Ezkerra ni en Coalici¨®n Popular- podr¨ªa favorecer, dada la evoluci¨®n del debate en el PNV, el pacto con un Garaikoetxea en dificultades dentro de su partido.
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