Un rinc¨®n para la bomba

El se?or Savater sigue insistiendo en una carta publicada el 26 de octubre a la Carta a los Pueblos que se posicione ante ETA. Hablar de extradidiones, s¨ª; pero, por favor, un rinconcito para la bomba. Nos ofrece tres ¨²nicas v¨ªas: "Condenar a ETA, ensalzarla o dar cuenta de ella". Preferimos una cuarta: situar a ETA en su aut¨¦ntico contexto y objetivos. Como fen¨®meno pol¨ªtico.Parece que exige la cl¨¢sica condena a doble columna, presentar las dos caras de la moneda: por un lado, exilio, torturas, prisi¨®n. Por otro, secuestro, bomba y tiro en la nuca. Una balanza equilibrada. Como aquel ministro que dec¨ªa: "Hemos ganado 2-1".

Pero, ojo con la balanza, porque puede col¨¢rsenos por detr¨¢s un esquema inquietante y cometemos, adem¨¢s, una "petici¨®n d¨¦ principio". Un fallo en un fil¨®sofo. Es decir, que al plantear el problema hemos supuesto ya la soluci¨®n. Al equipararlos, o bien rebajamos al Estado a la altura de una banda terrorista, o alzamos a,¨¦st¨¢ a la altura -del primero. Si esto se reconoce, el llamado terrorismo dejar¨ªa de existir.

Y si no", ?por qu¨¦ s¨®lo equiparar ambas a la hora de condenar y no a la de reconocer? Por eso es peligroso exigir las dos caras de la moneda, porque se puede usted quedar sin duro. Si se es l¨®gico y democr¨¢tico-