Desaparece el empresario que denunci¨® una red de funcionarios corruptos en Barcelona

La Audiencia de Barcelona ha dado orden de busca y captura contra Jos¨¦ Mar¨ªa Humbert Rovira, ex gerente de una empresa dedicada a los embargos y lanzamientos judiciales, que puso al descubierto, una red de funcionarios corruptos de los juzgados. La orden de detenci¨®n fue decretada ayer al mediod¨ªa, despu¨¦s de que no compareciera a un juicio que deb¨ªa celebrarse contra ¨¦l por presunta malversaci¨®n de caudales p¨²blicos.

Jos¨¦ Mar¨ªa Humbert Rovira deb¨ªa haber comparecido ayer a las 11 de la ma?ana ante la Secci¨®n Cuarta de lo Penal de la Audiencia Provincial de Barcelona para ser juzgado por el presunto delito de malversaci¨®n de caudales p¨²blicos, supuestamente cometidos en 1980 al vender unos cuadros y tapices que hab¨ªan sido depositados, por orden del juez, en uno de los almacenes de su propiedad. El fiscal solicitaba por estos hechos una pena de once a?os de prisi¨®n.La trama delictiva en laque se ve implicado el industrial Jos¨¦ Mar¨ªa Humbert Rovira y numerosos funcionarios de la Administraci¨®n de Justicia se puso al descubierto el pasado 19 de junio de 1983, cuando fue detenido por la Guardia Civil en el puerto de El Masnou, a pocos kil¨®metros de Barcelona. El detenido intent¨® "comprar su libertad" con una larga carta en la que denunciaba a cerca de 20 funcionarios de los juzgados de distrito y primera instancia de Barcelona, que habr¨ªan percibido en los siete ¨²ltimos a?os sobornos por un total de 200 millones de pesetas.

Humbert Rovira, ex gerente de la empresa Conductoras de Barcelona, SA, se dedicaba desde 1976 al almacenamiento de bienes embargados por orden judicial, as¨ª como a la pr¨¢ctica de desahucios. Humbert contaba con el apoyo de numerosos funcionarios de la Administraci¨®n de Justicia, a quienes pagaba importantes comisiones a cambio de que en los juzgados se le nombrara "persona de confianza" para efectuar estos tr¨¢mites jur¨ªdicos. Humbert Rovira, que se hab¨ªa dedicado a los m¨¢s diversos empleos, cre¨® a partir de entonces un verdadero imperio econ¨®mico.

Este industrial abri¨® un total de ocho almacenes, uno de los cuales ten¨ªa 3.000 metros cuadrados; algunos de estos locales se incendiaban peri¨®dicamente por causas fortuitas", desapareciendo los objetos all¨ª depositados y cobrando las p¨®lizas de seguro. El ¨²ltimo de los almacenes siniestrados fue el de la calle Badal, 112, de Barcelona, a ra¨ªz del cual se abrieron unas investigaciones y se detuvo a un empleado, que fue visto cuando entraba en el local, con una lata de gasolina, minutos antes de que se declarase el fuego.

Este incendio signific¨® el principio del fin de Humbert Rovira. Los juzgados de instrucci¨®n n¨²mero 8 y n¨²mero 1 de Barcelona, que presid¨ªa Manuel Sa¨¦z Parga, orden¨® su detenci¨®n, que se efectu¨® el 19 de junio de 1983 en el puerto de El Masneu. Entonces surgi¨® el intento de pacto y una carta denuncia en la que se recog¨ªan numerosas irregularidades jur¨ªdicas. Las corrupciones denunciadas por Humbert Rovira fueron investigadas por el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 12 de Barcelona, que preside el magistrado-juez Luis Fernando G¨®mez de Vizcarra. El tema fue encomendado al fiscal Eduardo Pe?a, el mismo que redact¨®, y dirigi¨® la investigaci¨®n del presunto fraude a la Seguridad Social en el que se ven implicadas cerca de 300 empresas catalanas. Estas diligencias culminaron el pasado mes de junio con el procesamiento de Humbert Rovira y con su puesta en libertad, despu¨¦s de que pagara una fianza de un mill¨®n de pesetas.

En medios jur¨ªdicos se aseguraba ayer que la desaparici¨®n de este industrial podr¨ªa provocar el archivo de las diligencias instruidas contra los funcionarios de Justicia denunciados.