El PCE definir¨¢ en su conferencia de febrero 'pol¨ªtica de convergencia' de izquierda

La conferencia nacional que celebrar¨¢ el PCE el pr¨®ximo mes de febrero ser¨¢ el marco en el que los comunistas expliquen con perfiles ya n¨ªtidos c¨®mo se va a concretar, con vistas a las elecciones generales de 1986, la pol¨ªtica de convergencia con otras fuerzas pol¨ªticas de la izquierda por la que apostaron p¨²blicamente el pasado mayo. Este minicongreso de tres d¨ªas de duraci¨®n, al que asistir¨¢n unas 400 personas, es un proceso obligado tras el 112 congreso del PCE.

En ese congreso se aprob¨® la celebraci¨®n anual de estas conferencias para que la direcci¨®n rindiera cuentas ante sus militantes y al tiempo se pasara revista al cumplimiento de los mandatos del ¨²ltimo congreso.Hasta ahora, la direcci¨®n del PCE no ha sido capaz de explicar con claridad en qu¨¦ consiste esa llamada a la convergencia y cu¨¢l puede ser su traducci¨®n en t¨¦rminos electorales. El sector af¨ªn a Santiago Carrillo, ex secretario general, grupo que se opone a esa propuesta, interpretan que la actual direcci¨®n va a despojar al viejo partido de sus cl¨¢sicos emblemas -la hoz y el martillo-, diluy¨¦ndolo en un conjunto de fuerzas con p¨¦rdida de sus se?as de identidad. Los carrillistas, principalmente en Madrid y Valencia, se preguntan, tras apelar a la fibra sensible de la militancia, d¨®nde est¨¢n las fuerzas sociales con las que se puede converger. A su juicio, por la izquierda, fuera del PSOE no hay nada.

Gerardo Iglesias, secretario general del PCE, considera que existe una izquierda desorganizada con la que los comunistas deben conectar y converger. Desde la actual direcci¨®n se ofrece un ejemplo ya casi hist¨®rico de lo que puede ser la convergencia. Santiago Carrillo fue precisamente el protagonista cuando auspici¨® la llamada Junta Democr¨¢tica junto con Antonio Garc¨ªa Trevijano y Rafael Calvo Serer. "Esos se?ores no representaban a nadie y, sin embargo, su iniciativa sirvi¨® para crear un gran movimiento", afirman fuentes cercanas a la direcci¨®n.

Listas electorales

En el curso de este mes se est¨¢ discutiendo en todas las agrupaciones del PCE esta pol¨ªtica de convergencia, con un balance hasta ahora altamente positivo, seg¨²n versiones oficiales. La direcci¨®n ya ha sido informada de que en cada regi¨®n los dispuestos a converger son diferentes. Tambi¨¦n en la misma conferencia puede darse por seguro que los seguidores de Carrillo propondr¨¢n someter a votaci¨®n si el partido acudir¨¢ a las elecciones con listas propias y con todos los s¨ªmbolos de identidad comunista, ante los cuales tan sensible se muestra gran parte de la militancia. El sector que apoya las tesis de la direcci¨®n considera que el "problema de Carrillo se reduce a si va a estar bien situado en las listas electorales".En la conferencia de febrero se har¨¢n p¨²blicos los datos relativos a la militancia con respecto al a?o anterior cuando se celebr¨® el 11?. En este tiempo el PCE ha perdido unos 8.000 militantes, y cuenta en la actualidad con 76.300, seg¨²n cifras oficiales. Entre 1.200 y 1.400 se pasaron a lo largo de 1984 al Partido Comunista de Ignacio Gallego. S¨®lo la salida de Jaime Ballesteros ha supuesto el abandono de 200 militantes. No obstante estas cifras, Francisco Palero, secretario de Organizaci¨®n, asegura que "el PCE ya ha roto la curia de descenso".

Otra curva que se mantiene en sentido descendente en los tr¨¢ficos del PCE es la referente a las finanzas, problema que los dirigentes tratar¨¢n de solucionar en este a?o que empieza, y en cualquier caso antes de las pr¨®ximas elecciones. Aunque la leuda electoral asciende a 400 millones de pesetas, se asegura que el partido cuenta con la confianza de los bancos, toda vez que nunca han dejado de cumplir los plazos de pago establecidos.