El defensor dice que Piotrowski no quiso matar al sacerdote polaco Popieluszko
El abogado de Grzegorz Piotrowsk?, de 33 a?os, principal acusado por el asesinato del sacerdote Jerzy Popieluszko, aleg¨® ayer en el proceso de Torun que su defendido no tuvo intenci¨®n de matar, y rechaz¨® la petici¨®n del fiscal, que el pasado martes pidi¨® la pena de muerte contra el ex capit¨¢n de los servicios secretos polacos.El proceso qued¨® ayer aplazado hasta el pr¨®ximo martes porque la abogada que defiende a Adam Pietruszka, de 46 a?os, coronel degradado y presunto instigador de los autores materiales del asesinato, se desvaneci¨® y tuvo que ser llevada a un hospital antes de que pudiese pronunciar su alegato.
El proceso de Torun ha puesto a prueba los nervios de los implicados: l¨¢grimas del ex teniente Leszek Pekala, muecas y movimientos incontrolados del ex teniente Waldemar Chinielewski, desmayo de Piotrowski y, para culminar, el desvanecimiento ayer de la abogada. Adem¨¢s de este incidente, la ¨²ltima jornada del juicio conoci¨® incluso momentos de jolgorio. El defensor de Piotrowski, un gordo enorme y bigotudo que con frecuencia ten¨ªa que secarse el sudor de la cara, dijo que la gente no quiere la cabeza de su defendido.
El abogado narr¨® una conversaci¨®n con "cuatro obreros" que hab¨ªan apretado los dedos con un signo que en Polonia significa desear buena suerte. Argument¨® el letrado que Popieluszko no muri¨® a consecuencia de los golpes propinados por su defendido, sino de asfixia, y dijo que Piotrowski nunca actu¨® con ¨¢nimo de matar. Esta argumentaci¨®n equivale a calificar el delito como secuestro y lesiones, con resultado de muerte, lo que, seg¨²n el C¨®digo Penal polaco, significar¨ªa una pena m¨¢xima de 10 a?os.
Ret¨®rica grandilocuente
El abogado us¨® una ret¨®rica grandilocuente y, para apoyar su argumento de que Piotrowski no ten¨ªa, ¨¢nimo de matar al sacerdote, aleg¨® que no hizo uso de su pistola reglamentaria. A?adi¨® el defensor que en Polonia, a diferencia de otros pa¨ªses, no se entrena a los hombres de los servicios de seguridad para que disparen con fusiles contra los arzobispos. De esta forma, el jurista alud¨ªa pol¨¦micamente al asesinato del arzobispo Romero en El Salvador. Las piedras y restantes utensilios que los acusados llevaban en el coche no prueban, seg¨²n el defensor, que Piotrowski tuviese intenci¨®n de matar a Popieluszko.
Hubo risas en la reducida sala n¨²mero 40 del tribunal de Torun cuando el defensor de Plotrowski aleg¨®: "Unos dicen que fue la CIA y Radio Free Europe dice que fue el KGB, pero la realidad es que el ¨²nico autor [del crimen de Popieluszko] fue Pietruszka", a quien el abogado defini¨® como "un jugador refinado". En su alegato, el defensor argument¨® que Piotrowski es una persona capaz de "ser reciclada socialmente".
El defensor del ex teniente Pekala, de 32 a?os, pidi¨® que se le imponga una pena de s¨®lo 15 a?os porque su defendido actu¨® movido por la devoci¨®n que profesaba a su jefe Piotrowski y dio muestras de buena fe al denunciar el lugar donde hab¨ªan arrojado el cad¨¢ver del sacerdote.
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