As¨ª abrieron las cajas de seguridad
Los tres atracadores que descendieron al s¨®tano con cuatro rehenes obligaron al cajero a que buscara las llaves y abriera con ella la c¨¢mara acorazada en cuyo interior est¨¢n situadas las cajas privadas de seguridad.El hombre que dirig¨ªa la operaci¨®n en el s¨®tano era el asaltante de la metralleta, el que parec¨ªa el jefe. Ese personaje fue el ¨²nico que cubri¨® su rostro con un pasamonta?as, que se quit¨® en varias ocasiones.
Las cajas de seguridad fueron abiertas con un sencillo instrumental, que los delincuentes abandonaron al terminar su acci¨®n: dos destornilladores, un cortafr¨ªos y una palanqueta de u?a. Un destornillador fue encontrado con sangre, lo que hace suponer que uno de los ladrones se cort¨® al abrir alguna caja. Todos los tipos que actuaron en el s¨®tano llevaban guantes. El contenido de las cajas fue introducido en siete bolsas de mediano tama?o que llevaban preparadas. Los atracadores despreciaron los documentos de cualquier tipo, cogieron joyas, lingotes de oro y dinero espa?ol y extranjero, que entregaron al interventor, para que llenara los sacos. De esta manera abrieron 64 de las aproximadamente 100 cajas de seguridad all¨ª instaladas.
Los siete atracadores abandonaron la sucursal entre las 14.32 y las 14.40 horas. El saqueo de las cajas de seguridad fue suspendido porque punto rojo, los vigilantes del exterior, avisaron a punto azul, los que operaban en el s¨®tano, de la necesidad de darse prisa ante un peligro inminente. La salida de la entidad se produjo en cuesti¨®n de segundos. Los clientes y empleados vieron c¨®mo las siete bolsas iban bien cargadas y fueron advertidos de que no deb¨ªan dar aviso durante unos minutos.
Los siete atracadores abandonaron el lugar, unos en direcci¨®n a Cibeles y otros hacia Atocha, en dos o tres coches. Los testigos no se ponen de acuerdo al respecto y citan un Peugeot 504, un Renault 18 y un Seat Panda.
El ¨²nico problema con el que la banda se enfrent¨® fue el del transporte. Durante el asalto, ya hab¨ªan pedido, sin conseguirlas, las llaves del coche del director de la entidad. Luego tuvieron que robar a punta de pistola un coche en la misma plaza de la Lealtad, porque uno de los suyos no arranc¨®. Sin embargo, la polic¨ªa no ha informado si ese coche ha sido aprehendido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.