Jacques Verges
El abogado que en los sesenta defendi¨® a militantes del FLN argelino se har¨¢ cargo del caso de Klaus Barbie, apodado 'el Carnicero de Lyon'
En los a?os sesenta defendi¨® a militantes del Frente de Liberaci¨®n Nacional de Argelia (FLN). Hoy ha aceptado defender a Klaus Barbie, apodado el Carnicero de Lyozi, un ex capit¨¢n de las SS que la tradici¨®n popular asocia con el asesinato del mayor h¨¦roe de la Resistencia francesa, Jean Moulin. El abogado Jacques Verges prepara su defensa con todos los medios a su alcance, sin importarle las acusaciones de oportunismo ni las amenazas.
Es un hombre fr¨ªo, con algunos rasgos de humor, que pesa cada palabra que dice, pero que no tiene pelos en la lengua: "Klaus Barbie no es muy distinto de algunos capitanes franceses que yo conoc¨ª en Argelia. S¨¦ perfectamente que esta comparaci¨®n ser¨¢ muy mal acogida en Francia, pero yo no me enrol¨¦ como voluntario a los 17 a?os en las tropas de De Gaulle para ver ahora una comedia como el juicio que se le pretende hacer en Lyon".Maitre Jacques Verges cumplir¨¢ 60 a?os el pr¨®ximo mes. No es muy alto y tiene los ojos ligeramente rasgados. Durante la entrevista ha atendido ocho veces el tel¨¦fono, rebosante de vitalidad.
En el despacho del distrito nueve de Par¨ªs, cerca del bulevar de Clichy y de Pigalle, prepara cuidadosamente la defensa de uno de los hombres m¨¢s odiados en Francia. "Yo no s¨¦ qu¨¦ hizo Klaus Barbie durante la guerra, pero s¨ª s¨¦ que no hizo precisamente aquello de lo que se le acusa". El antiguo capit¨¢n alem¨¢n, refugiado durante muchos a?os en Bolivia, no tendr¨¢ que responder de la muerte de Jean Moulin porque no existen pruebas de su implicaci¨®n directa y porque la reapertura del caso Moulin significar¨ªa reavivar un gran esc¨¢ndalo. El responsable de la Resistencia fue entregado a la Gestapo por alguien de su propio entorno. "En vista de lo cual se le acusa ahora de haber ordenado la deportaci¨®n de jud¨ªos". El abogado est¨¢ convencido (le que Barbie es inocente. "Si tuviera dudas sobre ese tema concreto", a?ade, "si creyera que Barbie tuvo algo que ver en la matanza de jud¨ªos o en la de los ni?os de Iziers, creo que no habr¨ªa aceptado defenderle. O al menos se me hubiera planteado un problema grave".
?Acaso los miembros del FLN que ¨¦l defendi¨® eran tambi¨¦n jud¨ªos inocentes de los cargos que se les imputaban? "Es diferente. Las autoridades francesas pod¨ªan considerarles culpables con las leyes en la mano, pero yo estimaba que se trataba de hechos de guerra y que desde el punto de vista de la historia eran tambi¨¦n inocentes".
El abogado vuelve continuamente al tema Barbie. "Es la primera vez en la historia de Francia que se juzga a un hombre por hechos ocurridos hace m¨¢s de 40 a?os". Personalmente cree que todos los delitos relacionados con la II Guerra Mundial ten¨ªan que haber prescrito ya. ?Incluso en el caso de Adolfo Eichmann? "S¨ª, incluso para Eichmann o Mengele". Asegura que Klaus Barbie fue secuestrado, aunque formalmente se trat¨® de una extradici¨®n especial concedida por el Gobierno boliviano. "La Corte Suprema de aquel pa¨ªs hab¨ªa rechazado la extradici¨®n porque no exist¨ªa un tratado con Francia y porque Barbie era un ciudadano boliviano".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.