Los 'supermanes' de Pumar¨ªn

ROC?O GARC?A ENVIADA ESPECIALLa aparici¨®n de una brigada de supermanes en el barrio ovetense de Pumar¨ªn ha causado sorpresa y en algunos casos indignaci¨®n. Coalici¨®n Popular, el PSOE y el PCE, partidos presentes en el Ayuntamiento, se han pronunciado en contra del "grupo parapolicial", que en opini¨®n del alcalde de Oviedo, Antonio Massip, socialista, puede llegar a crear una espiral de violencia. Ellos, los supermanes, un tanto desbordados por lo que en principio se plante¨® como un juego bien intencionado, afirman que lo ¨²nico que pretenden es que "Pumar¨ªn duerma tranquilo".

En lo que va de a?o se han presentado 12 denuncias por delitos "no graves" en este barrio de Oviedo. Pero todo empez¨® despu¨¦s de que Televisi¨®n Espa?ola emitiese una pel¨ªcula sobre los llamados "¨¢ngeles guardianes de Nueva York". Entonces, 15 aguerridos asturianos, comandados por el presidente de la asociaci¨®n de vecinos del barrio, Alfonso Fern¨¢ndez, decidieron convertirse en salvaguardias de Pumar¨ªn ante "la creciente oleda da de robos", seg¨²n manifiestan los integrantes de la brigada. Se compraron unas camisetas blancas y, despu¨¦s de coser la letra S en el pecho, salieron el pasado d¨ªa 7 a recorrer por la noche las calles del barrio en busca de "delincuentes y cacos". Seg¨²n cuenta Antonio Massip, alcalde de Oviedo, parece que el primer d¨ªa "no les entraban las camisetas".Aunque la pol¨¦mica creada en la ciudad parece rodeada de con notaciones pol¨ªticas, con acusaciones de "derechistas y fascistas", algunos de los supermanes lo niegan rotundamente. Vicente Zapico, de 45 a?os; Jos¨¦ Manuel Zuazua, de 48, y Manuel ?lvarez Fern¨¢ndez, de 36, integrantes de la brigada protectora, afirman que son ex militantes del PSOE y que fueron los guardaespaldas del actual presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, durante la campa?a electoral de 1977 por tierras asturianas. "Nosotros lo ¨²nico que queremos es colaborar con la polic¨ªa para acabar con la delincuencia del barrio", aunque todos reconocen que ninguno de ellos ha sido atracado y que "esto no se puede comparar con el barrio neoyorquino del Bronx".

Los comerciantes de la zona se muestran divididos sobre la actuaci¨®n de sus buenos vecinos. La due?a de la mercer¨ªa M. Faedo, situada en la misma avenida de Pumar¨ªn, afirma: "Nunca me han robado", y explica que "la mayor parte del barrio piensa que el problema de la delincuencia lo tienen que resolver los gobernantes". Asimismo, Jos¨¦ Rubio Fern¨¢ndez, carnicero, dice que el barrio tiene una delincuencia normal y que la aparici¨®n del grupo, "aunque tienen buena voluntad", es "innecesaria". En 18 a?os, Jos¨¦ Rubio no ha sido objeto de ning¨²n robo. No opinan lo mismo el due?o de la joyer¨ªa Villa y la dependienta de la pasteler¨ªa del barrio, Mari Carmen Arg¨¹elles, quienes se muestran de acuerdo con cualquier grupo que les d¨¦ m¨¢s seguridad. En lo que va de a?o, la joyer¨ªa ha sido objeto de un intento de descerrajar la verja, hecho ocurrido hace cinco d¨ªas, y en la pasteler¨ªa robaron semanas atr¨¢s 4.000 pesetas, tabaco rubio y el dinero de una m¨¢quina tragaperras.

Los supermanes han solicitado en dos ocasiones la presencia de la polic¨ªa, una de ellas al ver un cristal roto de un coche aparcado, y la otra, tras las molestias ocasionadas "por dos muchachos borrachos" a una pareja.

Tanto el alcalde de la ciudad, Antonio Massip, como el delegado del Gobierno, Obdulio Fern¨¢ndez, califican la aparici¨®n de los supermanes de "payasada".

Todos los miembros de la banda "est¨¢n siendo vigilados continuamente, y no les vamos a dejar moverse", afirma el jefe superior de polic¨ªa, quien reconoce: "Lo que no podemos hacer es prohibirles pasear por la zona", aunque les ha recomendado que prescindan de las camisetas.

Estos supermanes en versi¨®n asturiana est¨¢n euf¨®ricos con su actuaci¨®n. "Hemos conseguido acabar con la delincuencia del barrio en un 90%", afirma Manuel ?lvarez, tras 24 horas sin dormir y con claros s¨ªntomas de entusiasmo despu¨¦s de varias copas a lo largo de la jornada.

Los aguerridos supermanes de Pumar¨ªn no pueden volar como Cristopher Reeve. Quiz¨¢ la mon¨®tona realidad del barrio les impide elevarse sobre rascacielos fant¨¢sticos y los sujeta a zascandilear, cansinos, por las aceras sin sorpresas de su ciudad.