Divisi¨®n de opiniones sobre el ¨²ltimo filme de Robert Benton en el festival de Berl¨ªn
"Mis pel¨ªculas tratan siempre del conflicto de unas personas que deben actuar de forma distinta a como lo hab¨ªan hecho hasta entonces", declar¨® Robert Benton, el director de Un lugar en el coraz¨®n, que hab¨ªa despertado cierta expectaci¨®n en el poco brillante Festival de Cine de Berl¨ªn. El filme, destacado en las candidaturas a los oscars de Hollywood, fue acogido con divisi¨®n de opiniones. No s¨®lo su prestigio como guionista (Bonnie and Clyde, El d¨ªa de los tramposos, ?Qu¨¦ me pasa, doctor?, entre otras), sino su ¨¦xito en la direcci¨®n de Kramer contra Kramer garantizaban que Un lugar en el coraz¨®n ser¨ªa un plato fuerte del festival.
La decepci¨®n fue paralela al entusiasmo. Entre ciertos aplausos, el filme motiv¨® los primeros s¨®lidos pateos de este a?o. No es de extra?ar. La cr¨®nica de esa joven viuda que debe afrontar la ruina de su granja y las historias paralelas de sus amigos ad¨²lteros, el joven ciego que alquila una habitaci¨®n en la granja y el buen¨ªsimo negro atacado por el Ku-Klux-Klan componen un melodrama gris, de escaso vuelo po¨¦tico, al que dif¨ªcilmente salva la brillante fotograf¨ªa de N¨¦stor Almendros.En conjunto, Un lugar en el coraz¨®n quer¨ªa reflejar las dificultades que para vivir tiene la gente noble, pac¨ªfica y decente. Los espectadores, igualmente nobles, decentes y pac¨ªficos, manifestaron su dificultad para ver pel¨ªculas de mayor inter¨¦s. Lo hacen de continuo en este festival de Berl¨ªn, cuyos primeros d¨ªas han marcado una muy baja cota de calidad en su programaci¨®n oficial.
Un cuento medieval para ni?os, Ronja, en el que aparecen unos divertidos greemlins ilustrando la historia de amor de los hijos de dos familias enemigas, ha causado cierto estupor entre los asistentes al festival, por mucho que el filme demuestre la inquietud ?le sus pa¨ªses productores, Suecia y Noruega, por el cine infantil.
Similar decepci¨®n ha causado la pel¨ªcula turca El luchador, que aunque como trasfondo a la historia de ese pobre obrero empe?ado en vencer en competiciones deportivas para salir de su miseria muestra aspectos de la, realidad turca actual, no alcanza el rigor de las pel¨ªculas de Yilmaz G¨¹ney.
Unanimidad en el rechazo del filme australiano Nos hemos equivocado de mundo, donde la estructura tradicional del cine norteamericano a la que imita no oculta una pretenciosidad irritante.
Los ¨¢nimos interiores del festival son tan fr¨ªos como los del exterior. El g¨¦lido clima de la ciudad no anima a nuevos visitantes, aunque ello no sea fundamental para algunos aspectos del festival, como el Foro de Cine Joven, abarrotado en todas sus sesiones.
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