Pagar o morir

La VanguardiaTreinta y siete d¨ªas ha permanecido secuestrado por ETA el industrial vasco se?or Urteaga. En ese tiempo apenas se ha hablado del secuestro. Ni la familia ha dado informaci¨®n, ni ETA ha hecho llegar m¨¢s que una foto y una carta para mostrar que segu¨ªa vivo, ni los medios de comunicaci¨®n han dado los partes que eran habituales en otros tiempos. Las fuerzas del orden, eso s¨ª, han estado rastreando Guip¨²zcoa. ( ... ) Pero el rastreo ha resultado infructuoso.Parece que ¨²ltimamente se ha llegado a una asunci¨®n de papeles generalizada. La sociedad le niega a la organizaci¨®n terrorista la propaganda que significaba el aparatoso recuerdo diario del secuestro pendiente. La organizaci¨®n terrorista se conforma con el resultado final, en dinero. Se habla de una "exigencia" inicial de 500 millones y de un bot¨ªn final de entre 100 y 200 millones de pesetas. ?stas son, al menos, las cifras que ha dado el diario Deia. En los ¨²ltimos tres a?os, ha habido entre los secuestrados dos muertos y 10 liberados tras pagar el rescate. La conclusi¨®n es clara: paga o muere. En 15 a?os, desde 1970, se atribuyen 56 secuestros a ETA y sus comandos colindantes. Sale a unos cuatro por a?o; la mayor¨ªa ha terminado con el pago y la subsiguiente liberaci¨®n. El secuestro se ha consolidado como una forma de financiar las actividades terroristas.

El ritual va siendo conocido. Se nombran unos representantes. ?stos tratan de establecer contacto con la organizaci¨®n terrorista. Empieza el regateo. Todo ello lentamente. Parece que esta vez ha pasado m¨¢s de una semana hasta que lograran establecerse los contactos. La negociaci¨®n puede ser tensa, pero todo el mundo procura no perder los nervios. Es sabido que el se?or Urteaga, propietario y director de una acer¨ªa, es un nacionalista af¨ªn al PNV. Las significaciones pol¨ªticas parecen contar cada vez menos. ( ... )

, 25 de febrero