Grave divisi¨®n en el partido de Neves 10 d¨ªas antes de asumir la presidencia bras¨ªle?a

El presidente electo de Brasil, Tancredo Neves, se enfrenta, 10 d¨ªas antes de asumir la presidencia, a inesperados problemas de ¨²ltima hora. La elecci¨®n de las mesas del Senado y de la C¨¢mara de Diputados, la semana pasada, provoc¨® una grave divisi¨®n en el Partido del Movimiento Democr¨¢tico Brasile?o (PMDB), que dirige el propio Neves, entre el sector m¨¢s conservador y los grupos de centro-izquierda e izquierda del partido. La dificultad para terminar de organizar el Gobierno tambi¨¦n provoc¨® un creciente malestar entre el PMDB y los integrantes del Frente Liberal, todos ellos disidentes del r¨¦gimen militar anterior.La habilidad de Neves no ha sido suficiente para impedir que la carrera por la obtenci¨®n de puestos en la futura Administraci¨®n provocara divisiones agudas entre los grupos que respaldaron su candidatura.

Aunque ning¨²n nombre haya sido oficialmente confirmado, el Gabinete ya est¨¢ pr¨¢cticamente perfilado, y varios de los ministrables ya est¨¢n trabajando junto a los ministros salientes. Algunos, como el abogado Almir Pazzianoto, futuro ministro de Trabajo, o Francisco Dornelles, futuro ministro de Hacienda, ya hablan a la Prensa en calidad de integrantes del Ejecutivo que entrar¨¢ en funciones el d¨ªa 15. Dornelles dijo ayer que en la primera reuni¨®n del nuevo Gobierno, prevista para el d¨ªa 16, se anunciar¨¢n "medidas de impacto".

Sin embargo, varios ministerios permanecen todav¨ªa sin decidir, y el presidente electo es presionado por grupos del Noreste para ampliar el n¨²mero de carteras, y poder cumplir as¨ª los compromisos asumidos durante la campa?a por la presidencia. El nuevo Gabinete se anunciar¨¢ probablemente el viernes. Pero la disputa no va a terminar ah¨ª: hay por lo menos un centenar de puestos de segundo nivel que tienen fuerte importancia pol¨ªtica y los aspirantes son muchos. Es el precio de haber montado una coalici¨®n muy heterog¨¦nea para lograr la jefatura del Estado.

Mientras tanto, los asesores del futuro presidente est¨¢n preocupados con los esc¨¢ndalos que se denuncian cada semana. En los ¨²ltimos dos meses, las actuales autoridades denunciaron fraudes en el sistema de seguridad social (jubilaci¨®n y asistencia m¨¦dica), un negocio de al menos 500 millones de d¨®lares (unos 92.500 millones de pesetas) en falsos cr¨¦ditos para la construcci¨®n naval y la liquidaci¨®n de dos bancos privados. Las consecuencias repercutir¨¢n en el futuro Gobierno.

El nuevo presidente ha asegurado en varias ocasiones que en su Gobierno no habr¨¢ lugar para el revanchismo. Por su parte, los miembros del Gobierno saliente han manifestado que no admitir¨¢n ninguna acci¨®n de venganza contra su actuaci¨®n durante los 20 a?os de r¨¦gimen militar.