Estados Unidos espera continuidad durante los pr¨®ximos meses en la pol¨ªtica exterior sovi¨¦tica
La pol¨ªtica exterior sovi¨¦tica seguir¨¢ una l¨ªnea de continuidad en los pr¨®ximos meses, a la espera de que el nuevo dirigente del Kremlin, Mijail Gorbachov, decida cu¨¢l ser¨¢ el nuevo equilibrio, en la asignaci¨®n de recursos para conseguir su objetivo de mejorar la econom¨ªa sovi¨¦tica, que se encuentra en un estado catastr¨®fico. Esta es la opini¨®n m¨¢s extendida entre los expertos que siguen en EE UU la sucesi¨®n producida en la c¨²pula de la otra superpotencia. La influencia del veterano Andrei Gromiko en la pol¨ªtica exterior ser¨¢ creciente en esta primera fase, estiman asimismo los observadores en Washington.
Pasado este primer per¨ªodo de continuidad, nadie se atreve a pronosticar en Estados Unidos cu¨¢l ser¨¢ la direcci¨®n que imprima a la Uni¨®n Sovi¨¦tica el nuevo dirigente sovi¨¦tico. El hecho de que no viviera la ¨¦poca de Stalin y que tuviera 10 a?os cuando Hitler invadi¨® la URSS no significa necesariamente que vaya a seguir una l¨ªnea m¨¢s suave en pol¨ªtica exterior. Gorbachov y los dirigentes de su generaci¨®n han conocido ya una URSS consolidada como superpoder y pueden tener m¨¢s tentaciones de usar la potencia militar que sus antecesores, que sufrieron las consecuencias de la II Guerra Mundial.Para algunos expertos, como Zbigniew Brzezinski, ex consejero de Seguridad Nacional de Jimmy Carter, o Arnold Horelick, director del Centro de Estudios del Comportamiento Sovi¨¦tico Rand-Universidad de California, el vigor de Gorbachov y su capacidad para presentar una imagen m¨¢s favorable en Occidente le convierten en un "adversario mucho m¨¢s formidable" para Estados Unidos. "Es muy h¨¢bil, un gran relaciones p¨²blicas que va a tratar de ganarse los corazones y las mentes de la opini¨®n p¨²blica occidental", afirm¨® ayer un funcionario del Departamento de Estado.
Aunque la Administraci¨®n Reagan ha cogido con prudente satisfacci¨®n la llegada al poder del Gorbachov, no se quiere dejar ganar por el espejismo del nuevo estilo que parece reflejar el nuevo dirigente. Se recuerda en EE UU el error cometido cuando lleg¨® a estimar que Yuri Andropov era un liberal con tendencias occidentales. A pesar de la infinidad de estudios y an¨¢lisis del fen¨®meno sovi¨¦tico que existen en EE UU y de la informaci¨®n obtenida por las diferentes agencias de espionaje, el desconocimiento de la realidad de la URSS es muy grande. Esta ignorancia ha sido resumida por Heriry Kissinger al afirmar que "nadie sabe lo que realmente piensa la nueva generaci¨®n de pol¨ªticos sovi¨¦ticos. No tenemos ning¨²n contacto con ellos".
El pol¨ªtico laborista brit¨¢nico, Dermis Healey, que seentrevist¨® con Gorbachov el pasado noviembre, en Mosc¨², y en enero, en Londres, dijo a la televisi¨®n norteamericana que el nuevo secretario general del PCUS deber¨¢ decidir a finales de este a?o las prioridades de la econom¨ªa sovi¨¦tica, entre la mantequilla y los ca?ones, para establecer el pr¨®ximo plan quinquenal. Entonces, la URSS deber¨¢ escoger entre mantener el actual nivel de gasto militar o reducirlo en beneficio de las necesarias reformas econ¨®micas y de la mejora de la calidad de vida de sus ciudadanos. En Washington se considera que las prioridades de Gorbachov se dirigen sobre todo a realizar una pol¨ªtica de reformas del ineficiente sistema productivo.
Para ello, los sovi¨¦ticos necesitan mantener abierta la l¨ªnea de continuidad en el di¨¢logo con EE UU, que permita una reducci¨®n de la tensi¨®n entre los dos superpoderes. Vuelve a hablarse en Washington de la vuelta del esp¨ªritu de distensi¨®n y el historiador de temas sovi¨¦ticos, Robert Tucker, afirma que efectivamente ahora se ha producido "la verdadera sucesi¨®n de Breznev".
Contener el rearme
Para Gorbachov no ser¨¢ suficiente con mantener el deshielo con EE UU, sino que necesita en los pr¨®ximos meses contener de alguna forma el rearme norteamericano y llegar a alg¨²n tipo de acomodo con Reagan sobre su proyecto de defensa en el espacio.
En este sentido le puede ser de gran valor el mensaje de paz del presidente Reagan que el vicepresidente George Bush dice llevar a Mosc¨², donde hoy asistir¨¢ a las exequias por Konstant¨ªn Chernenko. "Traigo conmigo un mensaje del presidente Reagan", dijo Bush en el aeropuerto de Mosc¨². "Es un mensaje de paz y no tenemos mayor esperanza ni m¨¢s alta meta que crear una relaci¨®n m¨¢s estable: y constructiva con la Uni¨®n Sovi¨¦tica".
Bush reconoci¨® que "Estados Unidos y la Uni¨®n Sovi¨¦tica tienen diferencias sobre muchas cuestiones importantes" pero asegur¨® que "el presidente Reagan no ahorrar¨¢ esfuerzos para conseguir esos objetivos. Habr¨¢ paciencia y persistencia".
En Washington, la desaparici¨®n de Konstant¨ªn Chemenko, un a?o escaso m¨¢s joven que Reagan, ha reavivado el inter¨¦s por el estado de salud del presidente. El descubrimiento de un nuevo p¨®lipo durante el chequeo m¨¦dico a que se someti¨® el viernes, ha sido mirtusvalorado por los portavoces de la Casa Blanca, a pesar de que Reagan se va a someter temporalmente a una dieta especial establecida por la Sociedad contra el C¨¢ncer.
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