El hermetismo de Paramio

Supongo que a los sexagenarios, como yo, les acontece con frecuencia creciente el verse invadidos por una desconfianza en los poderes de su mente. Deberemos considerarlo como el resultado de un proceso natural del temido envejecimiento. Ahora bien, en muchas ocasiones nos rebelamos a aceptar la desmoralizadora consecuencia anterior. Como, por ejemplo, ahora, y de ah¨ª mi carta.?Ser¨¢ posible atribuir a mi deterioro neuronal la nula comprensi¨®n de determinados razonamientos aportados en su art¨ªculo Acomodarse en el caos (EL PAIS, 14 de marzo de 1985, p¨¢ginas 13-14) del admirable y consecuente escritor que es Ludolfo Paramio? Por favor, se?or director, d¨ªgame usted si sus j¨®venes neuronas y su amplio saber son armas suficientes para entender lo que sigue (del citado art¨ªculo): "La cuesti¨®n es saber si esa aceptaci¨®n de un mundo delicuescente y la consiguiente renuncia a los esquemas preconce o un retroceso" (tomado literalmente del p¨¢rrafo segundo de la columna cuarta de la p¨¢gina 13). Y otro tanto le agradecer¨ªa que me aclarara sobre: "... frente a la proliferaci¨®n de propuestas y modelos est¨¦ticos o intelectuales, no contamos en estos momentos bidos deben verse como un avan- / con ning¨²n criterio objetivo de valoraci¨®n", que es tambi¨¦n la transcripci¨®n literal del p¨¢rrafo segundo de la columna quinta de la p¨¢gina 13, y p¨¢rrafo primero, columna primera de la p¨¢gina 14.

Si el fallo es propio... ?ay de m¨ª! Si es de EL PAIS, por favor, dense normas para una mayor responsabilidad ante el lector.-