Fracasa el intento de los cosmonautas del 'Discovery' de rescatar el sat¨¦lite a la deriva

La agencia espacial norteamericana, NASA, ha renunciado a intentar de nuevo la puesta en marcha del motor del sat¨¦lite de comunicaciones Syncom IV-3 desde el transbordador espacial Discovery. Por dos veces la nave se acerc¨® al sat¨¦lite a la deriva para que la cosmonauta Rhea Seddon, manipulando el brazo mec¨¢nico, moviera el interruptor que deb¨ªa poner en marcha los cohetes del Syncom IV-3, lo que no sucedi¨®.

La tripulaci¨®n del Discovery maniobr¨® lentamente durante m¨¢s de tres horas alrededor del sat¨¦lite averiado adapt¨¢ndose a su velocidad de rotaci¨®n. Siguiendo las instrucciones que les llegaban desde el Centro espacial de Houston, el comandante de la misi¨®n, Karol Bobko, y el piloto Donald Williams, situaron la enorme nave dem¨¢s de 100 toneladas y 37 metros de largo a escasos metros del sat¨¦lite cil¨ªndrico de cuatro metros de di¨¢metro y 7 de largo, cuyo peso era superior a las ocho toneladas.El director de vuelo, John Cox explic¨® a la Prensa las dificultades de la operaci¨®n. "No es nada f¨¢cil", dijo, y record¨® que todos los anteriores encuentros espaciales hab¨ªan sido ensayados durante meses, y los astronautas hab¨ªan seguido instrucciones milim¨¦tricas, mientras que esta vez se hab¨ªa improvisado sobre la marcha. Por esta raz¨®n los dirigentes de la NASA autorizaron al piloto del Discovery a realizar un solo intento de acercarse al sat¨¦lite.

Usando una c¨¢mara de televisi¨®n situada en el extremo del brazo mec¨¢nico al que el pasado martes se le hab¨ªa acoplado lo que los astronautas bautizaron como una pala matamoscas de fabricaci¨®n artesanal, la astronauta Rhea Seddon la dirigi¨® hacia el sat¨¦lite haci¨¦ndola resbalar posteriormente con la intenci¨®n de accionar el interruptor de alimentaci¨®n el¨¦ctrica que deb¨ªa poner en marcha los motores.

Dos intentos

Por dos veces Rhea Seddon consigui¨® su objetivo, pero en ning¨²n caso el motor se puso en marcha. Durante el segundo intento la mencionada pala matamoscas que hab¨ªan fabricado artesanalmente los propios tripulantes se rompi¨® por su extremo, parti¨¦ndose un trozo de aluminio que estaba enganchado con cinta adhesiva. El sat¨¦lite de comunicaciones Syncom IV-3, que pertenec¨ªa a la compa?¨ªa Hughes e iba a ser arrendado a la Marina estadounidense, ha quedado definitivamente a la deriva en una ¨®rbita de 192 a 286 millas sobre la Tierra, cuando su ¨®rbita prevista se situaba en 22.300 millas sobre el Ecuador. Dise?ado para ponerse en funcionamiento autom¨¢ticamente, los t¨¦cnicos de la compa?¨ªa Hughes creen que el fallo est¨¢ en una palanca situada en uno de los lados del sat¨¦lite que se qued¨® atrancada al salir al espacio.

Si los tripulantes del Discovery hubieran conseguido su objetivo ser¨ªa la cuarta vez en el ¨²ltimo a?o que se salvaba un sat¨¦lite a la deriva por medio del transbordador espacial. La compa?¨ªa de seguros Intec, deber¨¢ pagar a la compa?¨ªa Hughes el 30% del valor del sat¨¦lite, valorado en unos 80 millones de d¨®lares (unos 1.400 millones de pesetas).

El Discovery, que fue lanzado al espacio el pasado viernes, deb¨ªa regresar ayer a la Tierra, pero su misi¨®n fue alargada para intentar rescatar el sat¨¦lite averiado, que hab¨ªa sido puesto en el espacio desde las bodegas del transbordador espacial. La NASA ha anunciado que no intentar¨¢ de nuevo acercarse al Syncom IV-3, confirmando que el aterrizaje se efectuar¨¢ en Florida ma?ana a las 14,17 hora peninsular.