Millones de brasile?os salen a la calle para despedir al presidente que nunca ejerci¨®
Los funerales del presidente Tancredo Neves est¨¢n previstos para las cuatro de la tarde de hoy, en su ciudad natal, S?o Jo¨¢o del Rey, en el Estado de Minas Gerais. Pero poca gente en Brasil conf¨ªa que se cumpla el programa: todo el protocolo, hasta ahora, fue literalmente atropellado, hasta causar cuatro muertos y decenas de heridos, por la m¨¢s formidable y emotiva manifestaci¨®n popular jam¨¢s vista en Brasil. Seg¨²n la Prensa brasile?a, m¨¢s de dos millones de personas salieron a la calle en S?o Paulo para despedirse de Neves, fallecido en la madrugada del lunes, a los 38 d¨ªas su primera operaci¨®n, la v¨ªspera de su toma de posesi¨®n.
Desde que el ata¨²d con el cuerpo de Tancredo Neves fue retirado del hospital en S?o Paulo para ser trasladado a Brasilia, raudales de gentes se volcaron en las calles. En la primera ciudad, el trayecto entre el hospital y el aeropuerto es de 12 kil¨®metros y el cortejo necesit¨® m¨¢s de dos horas para recorrer esa distancia.En Brasilia, aunque el n¨²mero de personas concentradas a lo largo de las anchas avenidas haya sido menor, el impacto emocional tambi¨¦n fue enorme. Aplausos y l¨¢grimas acompa?aron el cortejo. El trayecto entre la base a¨¦rea y el palacio del Planalto, sede de la presidencia, necesit¨® m¨¢s de cuatro horas para ser recorrido (el protocolo hab¨ªa previsto do horas).
El pueblo permaneci¨® en silencio cuando el ata¨²d fue llevado por la rambla de acceso al palacio del Planalto. Llevado por seis soldados representando las tres armas, el ata¨²d pas¨® por una formaci¨®n de honor de los dragones de la independencia, que es la guardia presidencial en Brasil. La escena fue especialmente emocionante, ya que hubo brasile?os que creyeron ver a Neves caminando entre la misma guardia. Una voz aislada grit¨® en medio del silencio: "Viva el presidente", y s¨®lo entonces la multitud aplaudi¨®.
El clima de emoci¨®n lleg¨® ayer a su punto m¨¢ximo en Minas Gerais, provincia de la cual Neves fue gobernador, y por la que sali¨® elegido diputado y senador. Un cortejo de 18 kil¨®metros reuni¨® en la tarde de ayer a centenares de miles de personas en Belo Horizonte, la capital de la provincia, ciudad en la que cuatro personas murieron y decenas resultaron lesionadas al ser pisoteadas por la multitud, informa Efe. A las siete de la ma?ana de hoy estaba previsto el transporte del cuerpo de Neves, a bordo de un helic¨®ptero, a S?o Jo?o del Rey.
No hay precedentes en la historia de Brasil de manifestaciones como las vividas en los ¨²ltimos dos d¨ªas. Ni con ocasi¨®n de la muerte de dos de los m¨¢s populares presidentes brasile?os -Getulio, Vargas, que se suicid¨¦ en 1954, y el presidente Juscelino Kubitschek, muerto en un accidente ferroviario en 1976- hubo manifestaciones tan multitudinarias. Y sin embargo, Neves no deja una herencia construida como la de los estadistas citados. Quiz¨¢ por primera vez en la historia, el pueblo llen¨® las calles para llorar por un gobernante que no gobern¨®.
Mientras el pa¨ªs exteriorizaba su dolor, en Brasilia el presidente de la C¨¢mara de Diputados, Ulises Guimar¨¢es, jefe pol¨ªtico del PMDB, principal partido brasile?o, reiter¨® un llamamiento que se viene repitiendo cada vez con m¨¢s intensidad en las ¨²ltimas semanas: el respaldo de todos al nuevo presidente, Jos¨¦ Sarney. Ulises Guimar¨¢es no quiso comentar la posible reforma ministerial. Dijo que ¨¦sa era una decisi¨®n exclusiva del presidente. Pese a varios indicios de que algunos ministros prefieren renunciar a gobernar sin Neves, asesores de Jos¨¦ Sarney afirman que habr¨¢ una petici¨®n informal para que todos permanezcan en sus puestos, a fin de evitar que se refuerce la impresi¨®n de que la Alianza Democr¨¢tica (coalici¨®n entre el Frente Liberal, integrado por disidentes del antiguo r¨¦gimen militar, y el PMDB) no podr¨¢ sobrevivir a la ausencia de Tancredo Neves.
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