Escepticismo en algunas comunidades aut¨®nomas ante la reestructuraci¨®n del Ministerio de Cultura

La reestructuraci¨®n del Ministerio de Cultura (v¨¦ase EL PAIS de ayer) ha sido acogida por los responsables de la pol¨ªtica cultural auton¨®mica con cierto escepticismo. Cuestionar la misma existencia del ministerio ha sido la reacci¨®n de alguno de ellos. Culminado el proceso de transferencias culturales, las comunidades aut¨®nomas consideran, sin embargo, que no han recibido toda la dotaci¨®n presupuestaria y de personal que dicho proceso debiera haber conllevado. La creaci¨®n de la Direcci¨®n General de Cooperaci¨®n Cultural, cuyo titular ser¨¢ nombrado dentro de 15 d¨ªas, ha sido acogida con agrado.

Fuentes de la Generalitat de Catalu?a manifestaron que resulta contradictorio el pleno traspaso de las competencias a la Generalitat y el mantenimiento, por parte del ministerio, de atribuciones en distintos terrenos. El conflicto m¨¢s claro planteado actualmente hace referencia a la Ley de Patrimonio Hist¨®rico y la declaraci¨®n de Bienes de Inter¨¦s Cultural. La Generalitat ya ha anunciado que de mantenerse finalmente la redacci¨®n actual plantear¨ªa el conflicto ante el Tribunal Constitucional."El Ministerio de Cultura tiene derecho a organizarse como mejor le plazca", manifest¨® ayer el conseller de Cultura de la Generalitat, Joan Rigol. Desde el punto de vista catal¨¢n, seg¨²n dijo, la existencia misma del Ministerio de Cultura es contradictoria con lo que se desprende del Estatut, que "recoge la voluntad de autogestionarse con plena competencia en todas las materias culturales". "No se trata de discutir una reestructuraci¨®n, ni tan siquiera la existencia del Ministerio, sino los mecanismos de redistribuci¨®n de los impuestos en la medida en que inciden en la elaboraci¨®n de los presupuestos auton¨®micos". Seg¨²n Rigol, junto a una notable dotaci¨®n ministerial hay unas administraciones auton¨®micas sin recursos necesarios para proyectos de su competencia.

El Gobierno vasco considera que la reestructuraci¨®n del Ministerio de Cultura tiene escasa incidencia en la comunidad dado que las transferencias en materia cultural est¨¢n realizadas desde 1983, informa Tonia Etxarri. Para el viceconsejero de Cultura, Sebasti¨¢n Aguirretxe, tien inter¨¦s la creaci¨®n de la Direcci¨®n General de Cooperaci¨®n Cultural porque, "podr¨ªa servir para potenciar la interrelaci¨®n entre las comunidades".

Potenciar la creatividad

"Nosotros estamos en contra de que desaparezca el ministerio como tal", a?adi¨® el viceconsejero, "porque creemos que no tiene que haber una intervenci¨®n de la Administraci¨®n en la organizaci¨®n de la cultura, pero debe permanecer un organismo que potencie la creatividad en es campo".El conselleiro de Educaci¨®n y Cultura de la Xunta de Galicia, V¨ªctor Manuel V¨¢zquez Portome?e, acogi¨® bien la reestructuraci¨®n del Ministerio de Cultura, pero opina que este ministerio deber¨ªa desaparecer. "Esta reestructuraci¨®n es m¨ªnima", dijo, "pues la medida m¨¢s acertada que se deb¨ªa de tomar, cuando las competencias en materia de cultura ya est¨¢n transferidas en su totalidad, ser¨ªa la de la desaparici¨®n del Ministerio de Cultura. Sin embargo, la decisi¨®n significa un paso adelante en la disminuci¨®n del burocratismo en el ministerio. Un paso que se debe completar mediante la consecuente reducci¨®n de personal y su transferencia a las comunidades aut¨®nomas que actualmente soportan una clara carencia de funcionarios cualificados".

Seg¨²n V¨¢zquez Portome?e, la decisi¨®n tomada debe ir seguida de "una efectiva transferencia de los fondos que integran el presupuesto del ministerio en congruencia con la plenitud competencial que corresponde a las autonom¨ªas".

El principal grupo de la oposici¨®n gallega, el PSOE gallego, ha valorado positivamente la reestructuraci¨®n, informa Manuel Rivas. Su portavoz parlamentario Ceferino D¨ªaz, considera que la Xunta impulsa "una cultura y una administraci¨®n de la cultura de car¨¢cter provinciano, al margen de las corrientes de modernidad".

La consejer¨ªa de Cultura de la Junta de Andaluc¨ªa, con cuyo titular fue imposible hablar ayer, recibi¨® el total de competencias transferidas hace cuatro meses informa Carlos Funcia. Por lo tanto, toda actividad cultural oficial depende de la instituci¨®n auton¨®mica.

De una reciente reuni¨®n en Sevilla de la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias (FEMP) sali¨® un comunicado en el que se insist¨ªa en la necesidad de coordinar las actividades culturales a trav¨¦s de planes provinciales y regionales, pero tambi¨¦n se abogaba por la necesidad del mantenimiento de "un Ministerio que promocione y difunda la cultura espa?ola en el exterior".

Tampoco fue posible localizar ayer al consejero de Cultura de Comunidad Valenciana.

Juan van Halen, de la comisi¨®n de Cultura de Alianza Popular, opina que "cualquier paso hacia adelante que significase la futura supresi¨®n del Ministerio de Cultura actual es un error, porque hay que reforzar la cultura nacional que nos es com¨²n a todos los espa?oles, a¨²n teniendo en cuenta la suma de las culturas regionales".

En una tertulia mantenida anoche en la sede de Fundes, el ministro de Cultura, Javier Solana, se refiri¨® al Museo del Prado, del que dijo hay que dotar de autonom¨ªa, y se?al¨® que no tiene el estatuto deseado por el gabinete. El prop¨®sito de su departamento es que se duplique el personal y se ampl¨ªen sus instalaciones. Indic¨® que ya se ha conseguido que la pinacoteca tenga un apartado propio en los presupuestos del Estado, que responde a un informe del propio museo. Anunci¨® la creaci¨®n de una oficina de cooperaci¨®n cultural con las autonom¨ªas y los ayuntamientos, una vez concluya el proceso de transferencias, y se d¨¦ soluci¨®n a un problema con Navarra.