Dimite la secretaria de Estado de Universidades

La secretaria de Estado de Universidades e Investigaci¨®n, Carmina Virgili, ha presentado su dimisi¨®n al ministro de Educaci¨®n, Jos¨¦ Mar¨ªa Maravall. Virgili, que va a cumplir 58 a?os, ha aducido razones personales al pedir su relevo como m¨¢xima responsable de la pol¨ªtica universitaria. Maravall ha aceptado la dimisi¨®n, si bien ¨¦sta no ser¨¢ efectiva hasta dentro de algunos semanas. Entre los nombres que se barajan para sustituirla en el cargo figuran el de Emilio Lamo de Espinosa, director general de Universidades, y Juan Manuel Rojo, director del gabinete de estudios de la Comisi¨®n Asesora de Investigaci¨®n Cient¨ªfica y T¨¦cnica.

Carmina Virgili confirm¨® a este peri¨®dico que hace ya dos o tres meses hab¨ªa solicitado al ministro ser relevada del cargo en cuanto hubiese concluido la redacci¨®n de la ley de la Ciencia, "convencida de que con la misma se culmina una primera y decisiva etapa de la modernizaci¨®n del sistema cient¨ªfico y t¨¦cnico y de la Universidad, que se abri¨® con la aprobaci¨®n de la ley de Reforma Universitaria".A?adi¨® la secretaria de Estado que se encuentra cansada, pero muy sastifecha de haber contribuido a esta tarea, aunque precis¨® que no es el cansancio en modo alguno el motivo de la presentaci¨®n de su dimisi¨®n, sino su deseo sincero de regresar a su labor docente e investigadora. "El cansancio es l¨®gico despu¨¦s de cualquier trabajo intenso", dijo, "pero no creo que deba ser empleado como motivo para renunciar a una tarea de equipo a la que uno se ha comprometido, y mucho menos cuando ¨¦sta ha resultado tan gratificante".

Carmina Virgili agreg¨® que todos los que la conocen saben que la ense?anza y la investigaci¨®n, constituyen la vocaci¨®n de toda su vida, y que la dedicaci¨®n a ambas cosas s¨®lo las interrumpi¨® en cierto modo para ocuparse del decanato de la facultad de Ciencias Geol¨®gicas y posteriormente para colaborar con el equipo de Jos¨¦ Mar¨ªa Maravall.

"Nunca agradecer¨¦ suficientemente la confianza que el minis tro desposit¨® en m¨ª, as¨ª como la oportunidad que ello me ha dado de colaborar con el formidable equipo de la secretar¨ªa de Estado", agreg¨®.

Para Carmina Virgili, el dejar el cargo "no supone en modo alguno abandonar el trabajo de contribuir a la reforma de la Universidad, en la que asegura que va a continuar desde su puesto de profesora. "No tendr¨ªa sentido otra cosa", concluye, "puesto que me he pasado todo este tiempo repitiendo que la modernizaci¨®n de la Universidad corresponde a la Administraci¨®n s¨®lo en una m¨ªnima parte, ya que quien tiene la verdadera responsabilidad es la propia comunidad universitaria".

La secretaria de Estado de Universidades expres¨® por primera vez su deseo de ser relevada del cargo en los primeros d¨ªas del mes de febrero. El ministro de Educaci¨®n, Jos¨¦ Mar¨ªa Maravall, le pidi¨® entonces, seg¨²n fuentes oficiales, que continuara al frente de la secretar¨ªa. Despu¨¦s de Semana Santa, Virgili insiti¨® de nuevo en su petici¨®n a Maravall, y en esta ocasi¨®n s¨ª le fue aceptada.

Varias semanas en su puesto

No obstante, permanecer¨¢ en su puesto algunas semanas m¨¢s, hasta que el ministro decida quien debe ser su sustituto. En principio, dos son los nombres que se barajan para ocupar el cargo que quedar¨¢ vacante: Emilio Lamo de Espinosa, director general de Universidades, el actual "n¨²mero dos" de Carmina Virgili y Juan Manuel Rojo, director del gabinete de estudios de la Comisi¨®n Asesora de Investigaci¨®n Cient¨ªfica y T¨¦cnica.

Los altos cargos del departamento que se ver¨¢n afectados por el cambio de la titular son, adem¨¢s del ya citado Emilio Lamo; el jefe de su gabinete t¨¦cnico, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba; el director general de Pol¨ªtica Cient¨ªfica, Emilio Mu?oz, y los dos asesores ejecutivos que tiene asignados la secretar¨ªa de Estado: Francisco de As¨ªs de Blas y Pedro Miralles. Todos ellos pondr¨¢n su cargo a disposici¨®n del nuevo secretario de Estado, como es habitual en los ceses y dimisiones. Este peri¨®dico no consigui¨® ponerse en contacto con ninguno de ellos para conocer su opini¨®n.

En tanto el relevo no sea oficial, Carmina Virgili prosigue sus tareas habituales. Ayer por la ma?ana despach¨® el estatuto del profesorado universitario en la comisi¨®n de subsecretarios, y por la tarde estuvo con Jos¨¦ Mar¨ªa Maravall explicando la ley de la Ciencia a un equipo de altos cargos del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas). Hoy har¨¢n lo mismo con un equipo de periodistas.

Carmina Virgili, que pertenece al PSOE desde 1972, fue decana de la facultad de Geol¨®gicas de la universidad Complutense de Madrid, de cuya c¨¢tedra de Estratigraf¨ªa y Geolog¨ªa Hist¨®rica es titular. Nacida en Barcelona en 1927, Carmina Virgili es una de las primeras mujeres que accedieron a una c¨¢tedra universitaria en Espa?a, hecho ¨¦ste que se produjo en 1963. Fue designada secretaria de Estado el 7 de diciembre de 1982.