Descartada causa terrorista en el incendio de un hospital en Buenos Aires

"?Viva Dios, viva Dios!" gritaban los orates recluidos en el sanatorio, privado Saint Emilien de Buenos Aires cuando, envueltos en llamas, corr¨ªan por los pasillos intentado escapar del fuego que les persegu¨ªa. La tragedia ha conmovido al pa¨ªs: 79 cad¨¢veres han sido identificados, 10 del centenar de heridos padecen tales quemaduras que se teme por su vida y 25 internados o asistentes han desaparecido. Est¨¢ descartada la intencionalidad terrorista en la cat¨¢strofe.No se encuentran los cad¨¢veres de los desaparecidos en el edificio, que a¨²n mantiene su estructura. Tampoco aparecen recogidos por sus familias. Algunos sobrevivientes, sometidos a curas de sue?o, quiz¨¢ vaguen a¨²n por las calles, perdida su identidad.

Parece un drama shakesperiano la maldici¨®n de las desapariciones en la Argentina: los desaparecidos bajo la represi¨®n de la dictadura militar, los desaparecidos en el hundimiento del crucero General Belgrano, los desaparecidos en las Malvinas durante la guerra terrestre, ahora ¨¦sto...

El director de la cl¨ªnica y dos de sus funcionarios est¨¢n detenidos. El Instituto estaba considerado como receptor de casos rechazados por otras cl¨ªnicas privadas, y sus propietarios lo son tambi¨¦n de otro centro m¨¦dico donde recientemente se desenmascar¨® a un cirujano -por otra parte muy eficaz y resolutivo- que no hab¨ªa terminado sus estudios de medicina y estaba aquejado de locura; solventaba la falta de medios t¨¦cnicos realizando operaciones de cadera y perforando huesos con taladradores de bricolage casero.

Est¨¢ descartada la intencionalidad terrorista del incendio y se sospecha fundadamente de un piroman¨ªaco de 19 a?os, internado en el centro, gravemente quemado, y que supuestamente mejorado ten¨ªa libre circulaci¨®n por el edificio.

La inadecuaci¨®n del centro para sus fines es objeto de repulsa. Varios pisos, permanec¨ªan cerrados para impedir la fuga de los enfermos y los barrotes y los vidrios irrompibles convert¨ªan el instituto en una c¨¢rcel. Muchos enfermos seniles eran amarrados a sus camas para mantenerlos tendidos.

Pisos de linoleum, revestimientos aislantes altamente inflamables, colchones de gomaespuma y muebler¨ªa de formica, se convirtieron r¨¢pidamente en pavesas, originando densas nubes de humaredas t¨®xicas, mientras estallaban las bombonas individuales de oxigenoterapia.