Eurovisi¨®n cumple hoy en Suecia, 30 a?os de decadencia
Cuentan con 700 millones de espectadores
Los directivos de TVE son conscientes de que el viejo festival de Eurovisi¨®n, que hoy llega en Gotemburgo (Suecia) a la 30? edici¨®n, es un certamen musical decadente. Se transmitir¨¢, como ya ocurri¨® el pasado a?o, por la segunda cadena, entre otras razones porque la emisi¨®n por la primera habr¨ªa supuesto para RTVE perder alrededor de 100 Millones de pesetas en ingresos por publicidad, ya que Eurovisi¨®n s¨®lo hace un corte en la emisi¨®n, seg¨²n manifest¨® Ram¨®n G¨®mez Redondo, director de Programas de TVE. Paloma San Basilio cantar¨¢ en quinto lugar, en nombre de TVE. El telediario de la primera cadena se interrumpir¨¢ para verla.
Significa, en n¨²meros de audiencia, que esta iniciativa de la Uni¨®n Europea de Radiodifusi¨®n (UER) no contar¨¢ con los casi 16 millones de espa?oles mayores de 15 a?os que ven TVE-1 todos los s¨¢bados entre las 21.00 y 23.00 W)ras. La segunda cadena, a esa misma hora, dif¨ªcilmente convoca a tres millones de telespectadores, aunque su director, Enrique Nicanor, espera que Eurovisi¨®n pegue un tir¨®n de audiencia hasta alcanzar los ocho o nueve millones de personas mayores de 15 a?os. Los menores nunca son considerados en estos c¨®mputos estad¨ªsticos. Quiz¨¢ en esta ocasi¨®n, como en las anteriores, sea la palabra amor la que m¨¢s resuene en los o¨ªdos de los aproximadamente 700 millones de telespectadores que, seg¨²n los organizadores, ver¨¢n el concurso transmitido por primera vez en su historia v¨ªa sat¨¦lite (Eutelsat, para Europa e Intelsat para fuera del continente) y no por los circuitos terrestres de la red europea, para 39 cadenas de televisi¨®n y radio, entre ellas Australia y cinco pa¨ªses del este europeo."Todos los organismos que pertenecen a Eurovisi¨®n reconocen que estamos ante un festival en decadencia", afirma Enrique Nicanor. "Hay un inter¨¦s mucho menor respecto a los a?os sesenta, pero eso no quiere decir que no re¨²na condiciones para atraer todav¨ªa a determinados p¨²blicos, a pesar de que haya bajado en calidad y en popularidad. Nosotros tenemos que estar, como en otras muchas cosas, en Europa".
El directivo de TVE a?ade, sin embargo, que es importante que exista Eurovisi¨®n: "Las televisiones p¨²blicas de Norteam¨¦rica anhelan tener una organizaci¨®n como ¨¦sta. Respecto a si el festival representa o no a la m¨²sica actual, creo que es representativo del tono medio europeo, y nosotros estamos algo por encima de ese tono. Participar en este festival supone todav¨ªa, para los cantantes espa?oles y casas discogr¨¢ficas, una promoci¨®n extraordinaria, como avala el hecho de que hayan concurrido a la preselecci¨®n de la canci¨®n alrededor de medio centenar de obras. Es muy oportuno, por otra parte, que se transmita por la segunda cadena, aunque s¨®lo sea por alejar esa imagen de que TVE-2 est¨¢ apartada de la gran audiencia, cosa que, por otra parte, programas como Estudio abierto y Si yo fuera presidente, desmienten todas las semanas".
Concha Bautista, la primera representante que TVE envi¨® a Eurovisi¨®n (Cannes, 1961, con la canci¨®n Estando contigo, Espa?a no particip¨® en las cinco primeras ediciones del festival, 1956-1960), tambi¨¦n cree que el certamen est¨¢ en decadencia: "No s¨¦ a qu¨¦ se debe, si depende o no de las canciones. Creo que ahora el p¨²blico, sobre todo los j¨®venes, tienen diferentes gustos musicales. Los j¨®venes pasan del festival. Este a?o va una gran figura, Paloma, con una canci¨®n hecha a su medida, y yo le deseo lo mejor del mundo".
Comparte Concha Bautista dos r¨¦cords: ser, con Raphael, el ¨²nico cantante espa?ol que represent¨® a TVE en dos ocasiones, y ser, junto con Remedios Amaya, la ¨²nica que obtuvo "cero puntos", en N¨¢poles (1965). "Todos me daban por ganadora con la canci¨®n ?Qu¨¦ bueno, qu¨¦ bueno!, pero triunf¨® France Gall. Yo me qued¨¦ muy tristona. Sucedi¨® que el camerino de France Gall estaba Vac¨ªo y el m¨ªo repleto de reporteros. Aquel festival fue el trampol¨ªn profesional en mi carrera. Me dio a conocer en Espa?a y fui invitada a casi todas las televisiones de Europa".
Algo parecido ocurri¨® recientemente, cuando Ram¨®n G¨®mez Redondo elogi¨® la elecci¨®n de Remedios Amaya para ir a M¨²nich, en 1983, con Qui¨¦n maneja m? barca, como exponente de una etnia marginada. Pero los designios de Eurovisi¨®n eran otros, y son¨® la melod¨ªa ceremonial del zero points.
'Impresentable'
A Ramonc¨ªn, exponente de una m¨²sica que nunca ha estado presente en el festival, el certamen le merece esta opini¨®n: "He sufrido muchas veces el festival de Eurovisi¨®n. Antes nos reun¨ªamos todos para ver a Raphael cantar aquello de Yo soy aqu¨¦l. Ahora, ya no. Pienso que es un festival negativo, deprimente, lamentable, de una calidad musical ¨ªnfima. Suelen ser canciones hechas por un ejecutivo de una multinacional del disco, y lo ¨²nico que interesa es cobrar mucho y cobrar por la Sociedad de Autores. Hay que tener en cuenta que cada una de estas canciones se emite por televisi¨®n m¨¢s de 200 veces y se radia machaconamente. Es mucho dinero el que se cobra por esto. A m¨ª me parece un negocio impresentable. No ir¨ªa a este festival nunca".Las televisiones de Francia y Grecia han vuelto al redil despu¨¦s de abandonar el festival en 1982, gesto simb¨®lico y truncado del cambio anunciado por los gestores socialistas de aquella y de esta televisi¨®n. La crisis ya se hab¨ªa agudizado en 1980, cuando Israel, pa¨ªs vencedor en dos ocasiones consecutivas (1978 y 1979), renunci¨® a organizar el certamen en 1980 debido a los elevados costes de producci¨®n, alrededor de un mill¨®n de d¨®lares de aquel a?o.
Paloma San Basilio ha manifestado en el bolet¨ªn oficial de TVE que "no hay festival caduco, sino canciones caducas. La fiesta termin¨® es todo lo contrario, es una hermosa canci¨®n. Si el festival no sirviera para nada, hace tiempo que lo habr¨ªan eliminado, y por el contrario, contin¨²a cada vez con m¨¢s medios. En esta ocasi¨®n me han elegido a m¨ª, estoy totalmente de acuerdo y voy a Europa cantando".
"No entra en nuestro planes ni a corto ni a medio plazo participar en el Festival de Eurovisi¨®n", manifest¨® a este diario Josep Maria Mainat,-del grupo musical catal¨¢n La Trinca. "Aunque, mira, si nos dejaran cantar lo que quisi¨¦ramos y como quisi¨¦ramos... a lo mejor hasta ir¨ªamos para re¨ªrnos un rato". El cantante considera que este festival "es como otro cualquiera, pero en Espa?a, tradicionalmente, se buscaba a trav¨¦s de ¨¦l la exaltaci¨®n patri¨®tica, y eso le ha dado aqu¨ª una dimensi¨®n distinta; era como un asunto de Estado. Pero, claro, eso no es culpa del festival. Los dem¨¢s pa¨ªses se lo han tomado siempre de otra manera y le han dado mucha menos importancia".
Para Josep Maria Mainat es "muy acertado y democr¨¢tico" que este a?o se retransmita el festival de Eurovisi¨®n por la Segunda Cadena. El miembro de La Trinca valora el acontecimiento como "un montaje comercial en el que es bastante improbable que aparezca algo que revolucione el mundo de la m¨²sica".
"El hecho de que se trate de canciones que deben gustar al o¨ªrlas por primera vez, no ayuda precisamente a la realizaci¨®n de grandes composiciones", se?al¨® Mainat, que concluy¨®: "La verdad es que esto del Festival de Eurovisi¨®n nos importa un pito".
Expectaci¨®n en Suecia
400 periodistas, la mitad de ellos de Suecia, cubrir¨¢n desde Gotemburgo el certamen. Los organizadores estiman que la producci¨®n del festival costar¨¢ alrededor de 97 millones de pesetas, informa Ricardo Moreno desde Estocolmo. Se espera recaudar cerca de 19 millones de pesetas por la venta de entradas y el resto ser¨¢ aportado parte por los pa¨ªses participantes y parte por la televisi¨®n sueca.Otros millones andan en danza a trav¨¦s de las multinacionales del disco y negocios conexos. Lo que permanece desconocido es el nivel art¨ªstico que tendr¨¢ el festival, en el que siempre cabe la esperanza de una sorpresa.
Suecia fue sede de la final de la canci¨®n europea hace diez a?os en Estocolmo, oportunidad en que Holanda se clasific¨® en, primer lugar. Un a?o antes, el cuarteto sueco Abba hab¨ªa triunfado en Brighton con la canci¨®n Waterloo y Massiel, en el 68 en Londres, con La, la, la. El a?o pasado en Luxemburgo fueron los hermanos Herrey suecos que viven en Estados Unidos, los vencedores.
Para esta noche los favoritos parecen ser lzhar Cohen, de Israel, y el grupo Wind, de la Rep¨²blica Federal de Alemania.
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