Madrid en 'pop'
Se aprecia en estos conciertos isidriles la variedad de sonidos ideas, im¨¢genes y gustos que tienen y tambi¨¦n acogen los madrile?os. Los seguidores del folclor marchoso, empapados bajo la lluvia, aguantaron en el paseo de Camoens del Parque del Retiro, mientras el p¨²blico del Palacio de Deportes, la mayor parte muy joven, escuchaba dichoso y c¨®modo el repertorio de pop m¨¢s conocido -o popular, mejor expresado- que ha surgido de esta ciudad: la m¨²sica de La Uni¨®n y de Mecano, milenarios en discos vendidos.Presentados por uno de sus productores, Jos¨¦ Antonio Abell¨¢n, los cuatro componentes del grupo Curva Peligrosa salieron a las ocho en punto. Tocaron durante una media hora acompa?ados de cuatro m¨²sicos: Andreas, al saxo, y Stephen Frankevich, a la trompeta, y Tom¨¢s San Miguel y Luis Carlos, de Ol¨¦-Ol¨¦, que es el otro productor, a los teclados. Arreglos de metal y sintetizador tan poderosos cargaron en exceso, incluso taparon la m¨²sica de un grupo cuyo sonido propio quiz¨¢ difiera del que parecen proponerle. Tales adornos no benefician a Curva Peligrosa, que apenas pudo llegar a una audiencia muy indiferente. "Un tema para las discotecas de este verano", anunciaron de tal modo su Estoy loco, y acabaron con un reggae llamado Presentimiento, igualmente barroco.
Conciertos de San IsidroActuaciones de Curva Peligrosa, La Uni¨®n y Mecano
Palacio de Deportes. Madrid, 15 de mayo.
Satisfacer el reto
La Uni¨®n, el grupo revelaci¨®n del pop espa?ol en 1984, se present¨® por primera vez en Madrid ante un p¨²blico cuantioso y sin entrada libre y terminaron airosos de haber cumplido un reto: no desmerecer en directo del sonido grabado en sus discos, tal y como se comentaba en el verano pasado.
Es posible que ¨¦sta fuera la raz¨®n de demorar su deb¨², su alternativa, en t¨¦rminos taurinos. Rafael S¨¢nchez canta con dominio y brillantez, pero sobra el eco continuo que envuelve, m¨¢s bien persigue, su voz. Y sus movimientos en escena insin¨²an, pero no agitan a los espectadores, que se movieron principalmente con los ¨¦xitos, Lobo-hombre en Par¨ªs, la m¨¢s celebrada, Cabaret y Sildavia. Suenan bien los del grupo de La Uni¨®n por la guitarra r¨ªtmica de Mario Mart¨ªnez y por el bajo insistente de Luis Bol¨ªn, que se distinguen entre la elaboraci¨®n del ritmo y los teclados. Y La invasi¨®n fue un tema in¨¦dito, "una canci¨®n maldita que no saldr¨¢ nunca en ning¨²n disco", que confirma que La Uni¨®n funcionar¨¢ si repite sorpresas como su primera canci¨®n, su primer y m¨¢ximo ¨¦xito. Es su pr¨®xima prueba.
En poco o nada cambi¨® la actuaci¨®n del tr¨ªo Mecano de su presentaci¨®n ¨²ltima, que fue televisada. Desde 1982 no tocaba el grupo Mecano en Madrid. La aclamaci¨®n del p¨²blico, apoyada por un. montaje realmente grandioso de luces y sonido, confirman las virtudes de Ana Torroja, una cantante que se supera d¨ªa a d¨ªa.
Nacho Cano es un m¨²sico cuyo futuro de esplendor, como el presente, parece claro, y Jos¨¦ Mar¨ªa Cano, un compositor que ha recogido la admiraci¨®n que merec¨ªa por temas como Aire o Hawaii-Bombay, que fue tan coreada en el concierto. Arturo Terriza, bater¨ªa, y Spiro, al bajo, colaboraron en mantener una base s¨®lida de la instrumentaci¨®n. Interpretaron 24 temas, incluidos los bises finales.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.