La justicia francesa sabe que la munici¨®n utilizada en atentados contra 'etarras' es de fabricaci¨®n espa?ola
La justicia francesa del departamento de los Pirineos Atl¨¢nticos, que instruye sumarios por los atentados perpetrados contra etarras y refugiados vascos en el sur de Francia desde 1976 hasta ahora, tiene constancia de que la munici¨®n utilizada en el asesinato de Justo Elizar¨¢n el 13 de septiembre de 1979 y las intervenidas a los supuestos autores del atentado que cost¨® a la vida al hist¨®rico de ETA Tom¨¢s P¨¦rez Revilla el 15 de junio de 1984 pertenecen a una misma partida o son lotes consecutivos fabricados en la Empresa Nacional Santa B¨¢rbara, de Toledo.
La Corte de Apelaci¨®n de Pau afirma en el documento oficial de 1 de octubre de 1980 sobre el caso Elizar¨¢n que, "como en precedentes atentados, los casquillos [la munici¨®n] encontrados son de fabricaci¨®n militar espa?ola. Seis de ellos eran de nueve mil¨ªmetros corto y otro del nueve largo". ?ste es uno los principales. datos investigados por la justicia francesa en la denominada guerra sucia contra ETA.El director comercial de la Empresa Nacional Santa B¨¢rbara, cuya identidad quiere que permanezca reservada, inform¨® a este peri¨®dico que, efectivamente, la sucursal de Toledo fabrica munici¨®n de nueve mil¨ªmetros para armas cortas. Asimismo, dijo desconocer estos extremos de los que tiene constancia la justicia francesa, puesto que tal munici¨®n se vende en grandes cantidades y puede ser adquirida por particulares con la correspondiente licencia. La Empresa Nacional Santa B¨¢rbara, de Industrias Militares, SA, fabrica tres tipos de cartucher¨ªa de nueve mil¨ªmetros y "ser¨ªa innumerable la relaci¨®n de armas que utilizan ?¨¢ munici¨®n de nueve mil¨ªmetros", seg¨²n datos de la propia f¨¢brica. Esta munici¨®n se usa para pistolas autom¨¢ticas y subfusiles.
Las f¨¢bricas militares de armas pasaron a formar parte de la Empresa Nacional Santa B¨¢rbara, dependiente del Instituo Nacional de Industria, en 1960, aunque la mayor¨ªa de sus puestos directivos siguen en manos de militares.
Por los asesinatos de Justo Elizar¨¢n y Tom¨¢s P¨¦rez Revilla, la justicia francesa conden¨® en el primer caso a Marc Obad¨ªa, Jean Claude Ruiz, M¨¢xime Szonek, Henry Berges, Jacques Debesa, y por el segundo, a Jean Pierre Bounin, Jean Philippe Labade, Patrick de Carvalho y Roland Sanpietro. De ellos, s¨®lo se encuentran en prisi¨®n los dos ¨²ltimos, puesto que los restantes fueron puestos en libertad por "irregularidades en el sumario", en su mayor¨ªa ordenadas por el juez Svahn, de la Corte de Apelaci¨®n de Pau. Esta decisi¨®n sorprendi¨® en gran manera al juez de Bayona, Gilbert Cousteaux, que dirige la mayor¨ªa de los procesos por atentados contra etarras y refugiados vascos en el sur de Francia.
Fuentes judiciales francesas consultadas por este peri¨®dico en Bayona est¨¢n. convencidas de que el Batall¨®n Vasco Espa?ol (BVE) y los Grupos Antiterroristas de Liberaci¨®n (GAL) son el mismo grupo que act¨²a en el sur de Francia con los mismos objetivos y la misma financiaci¨®n desde hace a?os. Tal convencimiento se reafirma porque muchos de los implicados en atentados del BVE pertenecen ahora a los GAL, como es el caso, por ejemplo, de Mohamed Khiar, hombre del grurpo de Jean Pierre Ch¨¦rid, implicado en numerosos atentados en el sur de Francia en ambas ¨¦pocas.
El juez de Bayona, Gilbert Cousteaux, el m¨¢ximo experto en la denominada guerra sucia a ETA, no quiere hacer declaraciones sobre el caso, aunque no puede ocultar su satisfacci¨®n por la condena al ex comisario general de Informaci¨®n Manuel Ballesteros por negarse a facilitar los nombres de los tres colaboradores que cruzaron la frontera despu¨¦s del ametrallamiento del bar Hendayais, donde murieron tres personas, dos de ellas instant¨¢neamente.
Reticencias
Sobre si existen pruebas que relacionen a los GAL con servicios espa?oles, el juez Cousteaux mira fijo y tenso al periodista, esboza una t¨ªmida sonrisa y responde: "No". La justicia francesa del departamento de los Pirineos atl¨¢nticos no conf¨ªa en la polic¨ªa espa?ola y mantiene sus reticencias con los jueces espa?oles, seg¨²n fuentes de la propia administraci¨®n judical francesa. Recientemente, jueces de Bayona y de la Corte de Pau se reunieron para decidir si contestaban a la comisi¨®n rogatoria solicitada en el caso Brouard por la cual se piden a Francia numerosos datos sobre los GAL. Durante la reuni¨®n se trat¨® fundamentalmente la sospecha de que tal solicitud s¨®lo pretendiera averiguar qu¨¦ pruebas y datos tiene la justicia francesa sobre los grupos anti-ETA, cuya financiaci¨®n a¨²n no est¨¢ demostrada. Finalmente se decidi¨® responder, a la comisi¨®n rogatoria, puesto que alguien inform¨® que tal informaci¨®n no iba a tener ese destinoEl juez Fau, tambi¨¦n de Bayona y quien durante un tiempo investig¨® la guerra sucia, tuvo conocimiento de que dos pistolas Smith and Wedson intervenidas a principios de 1980 en San Juan de Luz a Andr¨¦ Pervins, mercenario anti-ETA fallecido en 1982, fueron compradas por miembros de las fuerzas de seguridad espa?olas en una f¨¢brica de Houston (Estados Unidos). Las autoridades espa?olas respondieron en aquel caso que, efectivamente, hab¨ªan comprado esas armas, pero que fueron robadas de un coche policial y no volvieron a saber de su paradero.
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