Mirada sobre Clint Eastwood

Una reciente retrospectiva en la filmoteca francesa y el descubrimiento de que la historia es distinta de lo que nos mostraban los manuales han convertido a Clint Eastwood en un cineasta muy valorado por la cr¨ªtica. Las acusaciones de fascismo o machismo que pesaban sobre una filmografia consagrada a la violencia se han volatilizado para dejar paso a una serie de consideraciones sobre su sentido del humor y su car¨¢cter de ¨²ltimo rom¨¢ntico, glorificador del h¨¦roe solitario que lucha contra los malvados.El fuera de la ley sit¨²a la acci¨®n en la inmediata posguerra americana, justo al acabar oficialmente la conflagraci¨®n entre el Norte y el Sur. Soldados de ambos bandos quedan incomunicados o deciden continuar la guerra por su cuenta, transform¨¢ndose en una suerte de bandoleros amparados por unos laxos principios pol¨ªticos. Para Eastwood supone, de alguna manera, volver al inundo de uno de sus filmes preferidos, el muy estimable El seductor, que cinco a?os antes le dirigiera su maestro, Donald Siegel. All¨ª tambi¨¦n Eastwood s¨¦ convert¨ªa en objeto deseado por una serie de chicas hasta que el esp¨ªritu de venganza de una de ellas le impuls¨¦ a mutilarle con pretextos m¨¦dicos.

En El fuera de la ley, Eastwood se puso a las ¨®rdenes de Phil Kauffman, el guionista del filme. Pero muy pronto qued¨® claro que Eastwood ya s¨®lo se dejaba dirigir por Siegel. Adem¨¢s, El fuera de la ley era una producci¨®n Malpaso, compa?¨ªa propiedad del actor, de modo que el destino de Kauffman estaba cantado. Como cineasta, Eastwood ha procurado asimilar la eficacia narrativa de Siegel y el gusto por la estilizaci¨®n de Leone. Del primero ha sacado la manera de tratar la violencia; del segundo, los gui?os de complicidad humor¨ªstica con los que hacerla tolerable.

La actualidad nos muestra a directores como Landis homenajeando a Abbot y Costello en Cuando llega la noche. Si esto es admisible y se considera razonable, mucho m¨¢s lo es dedicar c¨¢lidos elogios a Eastwood. Hawks, Ford, Mann o WaIsh quedan lejos, muy lejos, tanto como distintas son las maneras del viejo Hollywood y sus Gary Cooper o Randolph Scott de las actuales producciones independientes con astros como Eastwood. La renovaci¨®n o continuaci¨®n del westem quiz¨¢ pase menos por filmes como Elfuera de la ley o el m¨¢s reciente Pal¨¦ rider que por la obra marginal de un Monte Hefiman, de cineastas que ya no filman directamente un paisaje porque saben que lo que la c¨¢mara capta no es ese paisaje, sino una mirada sobre el mismo.

El fuera de la ley se emite hoy a las 21:35 por la segunda cadena.