Manifiesto mas¨®n

Confrontada a la a¨²n reciente conmoci¨®n informativa que acerca de la masoner¨ªa hab¨ªa ganado a los medios de difusi¨®n espa?oles, nuestra orden hab¨ªa optado por un prudente recato, permaneciendo deliberadamente al margen de una agitaci¨®n susceptible, en su premura, de resultar aventurada y hasta poco compatible con el sereno rigor y discreta seriedad que son desde siempre elemental patrimonio de todo el quehacer mas¨®nico.Se ha podido as¨ª asistir a una cierta exhibici¨®n de corrientes y personajes no todos autorizados, y a una fugaz profusi¨®n de, a veces, autodesignados portavoces, pretendidos especialistas mas¨®nicos que, semejante a los ¨¢rboles que impidieran ver el bosque, contrarrestaban la audiencia de los pocos testimonios leg¨ªtimos expresados, desprendi¨¦ndose en conjunto una relativa ignorancia del panorama mas¨®nico actual, esencialmente en cuanto respecta al "problema" femenino, que nuestra orden -?c¨®mo se puede, en efecto, discriminar a la mujer en nombre de la hermandad y entendimiento universales?- tiene m¨¢s que superado en su existencia universal y mixta y su ya fuerte implantaci¨®n y progresiva presencia activa en suelo ib¨¦rico (pa¨ªses vasco, catal¨¢n, castellano, valenciano, portugu¨¦s, etc¨¦tera).

Aplacadas las apetencias publicitarias; calmados los frenes¨ªs de estrellato, El Derecho Humano quiere unir su voz a la de todos los masones regulares de todas las obediencias para decir su consciencia de los problemas del siglo y su fraternal ligaz¨®n con la sociedad espa?ola, reiterar su indignaci¨®n ante el exceso autoritario que por doquier sobrevive, deplorar los deterioros sociales en Occidente, la educaci¨®n orientada o religioso-obscurantista, la informaci¨®n rebajada a propaganda, la miseria y el dolor del Tercer Mundo, la insolencia del poder en su ejercicio que genera sociedades ego¨ªstas y pueblos desorientados privados de opini¨®n c¨ªvica y vocaciones solidarias, para recordar a todos la urgente necesidad de contribuir a instaurar la preeminencia de un esp¨ªritu fraternal y tolerante no tributario de contingencias materiales ni pol¨ªticas; para proclamar su fe, su decidida confianza en los destinos de la especie, su obstinada decisi¨®n de trabajar por hermanar y perfeccionar a los seres, llamando a los espa?oles preclaros, mujer y hombre, de todos los horizontes, a que prosigan con ¨¦l el esfuerzo que merece tan ingente y noble causa: b¨²squeda de la verdad por la exigencia reflexiva, el libre examen y el estudio racional del simbolismo como posible respuesta a las inquietudes eternas del coraz¨®n de los hombres, y su sensibilidad hacia la justicia social, la libertad, el derecho como alta interpretaci¨®n del milagro de la espiga que da su pan para todos y,junto al pan, ese "algo", la cultura, pasaporte de comprensi¨®n solidaria y aut¨¦ntica civilizaci¨®n.

de la orden mas¨®nica universal mixta El Derecho Humano.