Presunto 'etarra' asesinado en Bayona

Un refugiado vinculado supuestamente a ETA Militar, Santos Blanco Gonz¨¢lez, de 52 a?os, falleci¨® en el hospital de Bayona a consecuencia de las heridas sufridas en un atentado perpetrado en la noche del mi¨¦rcoles y atribuido a los autodenominados Grupos Antiterroristas de Liberaci¨®n (GAL). La falta de testigos impide precisar la hora exacta del atentado y recomponer detalladamente los hechos, que tuvieron lugar pasadas las veintiuna horas en la confluencia de las calles de V¨ªctor Hugo y Quai d'Ubourdieu, en el centro de Bayona.

De las investigaciones practicadas por la polic¨ªa francesa se deduce que la v¨ªctima caminaba en solitario cuando fue abordada por un individuo que llevaba una peluca negra de mujer y portaba una pistola del 11,43. El asesino dispar¨® a bocajarro dos veces, y Santos Blanco Gonz¨¢lez, natural de San Sebasti¨¢n, refugiado en Francia hace cuatro a?os, cay¨® al suelo con un balazo en el pecho, junto al coraz¨®n, y un impacto en el cuello. El herido permaneci¨® ca¨ªdo en la calle desangr¨¢ndose hasta ser localizado por una patrulla policial que lo traslad¨® al hospital. Su muerte se produjo a primera hora de la ma?ana de ayer, en un momento en que los m¨¦dicos confiaban en que pudiera remontar su cr¨ªtica situaci¨®n.Cerca del lugar en que se produjo el atentado, en la calle de Gard¨ªn, reservada a uso peatonal, y paralela a la de V¨ªctor Hugo, la polic¨ªa francesa ha encontrado una peluca de mujer, la pistola y una granada de mano abandonada, los tres elementos que determinan el rastro de los GAL en los ¨²ltimos atentados.

As¨ª, en los tiroteos de los bares V¨ªctor, de Ciboure -un refugiado herido grave-; Launekin, de Bayona -un ciudadano franc¨¦s muerto y un refugiado herido-; Trinketxiki, de Ciboure -dos gitanos asesinados-, los mercenarios de los GAL arrojaron granadas de mano que no llegaron a estallar y abandonaron en su huida las armas y las pelucas. Una t¨¦cnica que los GAL incorporan ritualmente a sus ¨²ltimos asesinatos y que les permite cubrirse la retirada, desembarazarse de las pruebas de sus cr¨ªmenes, mezclarse entre la gente sin despertar sospechas y desfigurar su fisonom¨ªa ante los testigos. De hecho, en los tres ¨²ltimos atentados, parte de los testigos aseguraron que el autor de los disparos era una mujer "ancha de espaldas", mientras otra parte de los testigos, con igual ¨¦nfasis y convicci¨®n, atribuy¨® los disparos a un hombre "peque?o, de piernas cortas y fuerte complexi¨®n".

Santos Blanco Gonz¨¢lez, apodado Aitite (abuelo), ten¨ªa permisos de residencia y de trabajo en el Pa¨ªs Vasco franc¨¦s y, al parecer, nunca hab¨ªa sido detenido en Francia por actividades ilegales.

Ayer tarde, a partir de las 18.30, varios cientos de personas, muchas de ellas familiares de refugiados, se concentraron en el punto del atentado siguiendo la convocatoria efectuada por el Comit¨¦ de Apoyo a los Refugiados.