Un hurac¨¢n hace fracasar estrepitosamente el montaje inaugural de 'Macbeth'
Los grandes convocados de este a?o son Peter Brook, Tadeuzs Kantor y Antoine Vitez
La inauguraci¨®n del 39? Festival de Teatro de Avi?¨®n result¨® un verdadero fracaso. El tan esperado montaje de Macbeth, de Shakespeare, a cargo de la Comedia Francesa naufrag¨® estrepitosamente por culpa de un fort¨ªsimo viento, que barri¨® el patio central del palacio de los Papas y que ech¨® por tierra no s¨®lo los decorados, sino tambi¨¦n varios meses de trabajo de la compa?¨ªa m¨¢s importante de Francia. Macbeth se convirti¨®, por obra y gracia del viento mistral, en La tempestad.
El p¨²blico, unas 2.500 personas, sigui¨® los incidentes con paciencia y en algunos casos, pese a la mala conciencia, con francas risas. La tragedia de Shakespeare se transform¨® en una comedia norteamericana de desprop¨®sitos.El joven actor Jean Yves Dubois, que representaba a Malcolm, ayud¨® a acentuar el giro esperp¨¦ntico, empe?¨¢ndose en mantener su corona en la cabeza, aunque para ello tuviera que sujetarla permanentemente con una mano. En el esfuerzo, no pudo controlar la capa, que le tapaba ocasionalmente la cabeza. Los actores secundarios, desconcertados e incapaces de o¨ªr el di¨¢logo (como, por otra parte, la mayor¨ªa del p¨²blico) optaron por dar sus r¨¦plicas cuando mejor les parec¨ªa.
Lady Macbeth (Catherine Fe rr¨¦n) logr¨® sobreponerse al desastre e interpretar su papel con fuerza, aunque tuvo que luchar valientemente con un espectacular vestido, recamado en oro, que se hinchaba como una vela al menor soplo del aire. Tanto es as¨ª que un meritorio tuvo que situarse a su lado para ayudarle a mantener los pies en el suelo.
La fachada del palacio, cubierta con una inmensa tela negra, ondeaba como una bandera y no ayudaba en absoluto a aclarar el escenario, sumido en sombras por culpa de fallos en los reflectores y de unas antorchas que no consiguieron mantener viva su llama ante la furia del mistral.
Calma tras la tormenta
"Yo no he mandado a mi troupe a luchar contra los elementos", pod¨ªa parafrasear el director del esp¨¦ctaculo, Jean Pierre Vincent. Macbeth lucir¨¢ con toda su fuerza dram¨¢tica en cuanto se calme el viento o en cuanto sea representada en un teatro convencional, al abrigo de huracanes. La cr¨ªtica francesa, por el momento, no le ha disculpado, ni a¨²n teniendo en cuenta que la tragedia shakesperiana tiene fama de maldita en los ambientes teatrales de todo el mundo, hasta el extremo de que muchos actores prefieren denominarla la tragedia escocesa.
El fracaso de la apertura del festival no ha agriado, sin embargo, el ambiente. El nuevo director, Alain Crombecque, ha logrado un presupuesto de m¨¢s de 12 millones de francos (unos 220 millones de pesetas) la mitad del cual provienede las arcas municipales. El Ayuntamiento de la ciudad, dispuesto a que el festival recobre su brillo, dio facilidades para que, al margen del espect¨¢culo oficial, decenas de peque?os grupos, mimos y bailarines alegren la calle.
Avi?¨®n ha respondido con calor y se ha convertido en una ciudad internacional en la que se pasa de un idioma a otro con gran facilidad. La compa?¨ªa que representar¨¢ El Mahabhrata cuenta con actores y actrices de 13 pa¨ªses. En total, se presentan 40 espect¨¢culos oficiales y cerca 100 fuera del circuito cl¨¢sico y se esperan m¨¢s de 130.000 espectadores.
Jean-Claude Carri¨¨re, adaptador de El Mahabarata, dice que hay gran diferencia entre un festival cinematogr¨¢fico y uno teatral. "En Avi?¨®n se puede respirar m¨¢s tranquilamente. Los escenarios est¨¢n dispersos y a veces se encuentran incluso en los alrededores de la ciudad".
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