La Comunidad de Madrid, un rosario de conflictos
La gesti¨®n del Gobierno regional madrile?o ha sido una sucesi¨®n de pol¨¦micas y enfrentamientos entre el partido mayoritario, el PSOF, y la oposici¨®n, Coalici¨®n Popular y el PCE. La batalla por el recargo del 3% y las cr¨ªticas sobre la subordinaci¨®n de Joaqu¨ªn Leguina al Gobierno central han supuesto una p¨¦rdida de credibilidad no s¨®lo para los socialistas sino para la propia comunidad. Pero el presidente regional se muestra relativamente satisfecho de su labor y argumenta con cierta amargura que las realizaciones de su Gobierno no han sido valoradas por los ciudadanos ni reconocidas por una oposici¨®n que te niega el pan y la sal.
La historia de la autonom¨ªa madrile?a es la de sus conflictos. La pol¨¦mica del himno y la bandera, la proyectada televisi¨®n, el parque regional de la cuenca alta del Manzanares, y la culminaci¨®n, la campa?a contra el recargo del 3%. Este Gobierno regional ha cosechado cinco recursos de inconstitucionalidad. Dos, contra el par que del Manzanares, uno de Coalici¨®n Popular y otro del Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez, aunque ¨¦ste ¨²ltimo fue retirado despu¨¦s. El Gobierno recurri¨® tambi¨¦n un art¨ªculo de la ley del consejo asesor de Radiotelevisi¨®n Espa?ola (RTVE) en Madrid. Coalici¨®n Popular y el Defensor del Pueblo presentaron sendos recursos contra el recargo del 3%.En junio del pasado a?o se produjo, adem¨¢s, la primera crisis del Gobierno regional, que acaba con la sustituci¨®n del consejero de Econom¨ªa y Hacienda, Francisco Gil, por Luis Cendrero. En oto?o puede haber alguna otra dimisi¨®n.
Coalici¨®n Popular ha asumido la funci¨®n de martillo del Gobierno regional. El acoso de los diputados del Grupo Popular ha sido constante, acoso que tanto el PSOE como el PCE creen desproporcionado. La oposici¨®n de derechas ha trabajado para zancadillear continuamente los planes del Gobierno regional, m¨¢s que en la presentaci¨®n de proyectos alternativos. Jos¨¦ L¨®pez L¨®pez, actual portavoz del Grupo Popular en la Asamblea de Madrid, insiste en la paradoja de que un Gobierno regional de izquierdas "tiene relaciones menos fluidas con el Gobierno central que las de otras comunidades regidas por la derecha".
El Grupo Popular califica estos dos primeros a?os de gesti¨®n de decepcionantes: "Ni se ha terminado el proceso de transferencias, ni se han conseguido las competencias en materia de Educaci¨®n, ni hay un incremento perceptible de la inversi¨®n p¨²blica, ni la comunidad disfruta de autonom¨ªa financiera. Al margen de los temas concretos en que hemos estado en desacuerdo, como la ley del parque del Manzanares", afirma L¨®pez L¨®pez, "los pecados m¨¢s graves del Gobierno regional son los que ha cometido por omisi¨®n".
Para la oposici¨®n conservadora, "se ha hecho muy poco contra el paro y la inseguridad ciudadana, que es lo que m¨¢s preocupa a los madrile?os. Incluso la Zona de Urgente Reindustrializaci¨®n (ZUR) va a marcha lenta, y la Consejer¨ªa de Agricultura y Ganader¨ªa, por ejemplo, se dedica a hacer parques metropolitanos, un tema que es muy importante, pero que no es el de mayor prioridad".
La oposici¨®n no deja de recordar, a Leguina los planteamientos excesivamente optimistas que desgran¨® en su discurso de investidura. Lorenzo Hern¨¢ndez, portavoz en la Asamblea de Madrid del Grupo Comunista, reafirma hoy el escepticismo que sinti¨® cuando, en el citado discurso, oy¨® a Leguina prometer que a principios de 1985 estar¨ªa concluido el proceso de transferencias incluidas en el estatuto, y la comunidad habr¨ªa recibido, previa aprobaci¨®n por ley org¨¢nica, las competencias de Educaci¨®n, Sanidad, Trabajo y Seguridad Social que el estatuto aplaza cinco a?os desde su entrada en vigor.
"Los males que aquejan a la autonom¨ªa madrile?a provienen de esta situaci¨®n, caracterizada por el frenazo del Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez a los procesos de transferencias, por su miedo a que se le dispare el d¨¦ficit p¨²blico, y la actitud de subordinaci¨®n partidaria que ha adoptado el Gobierno regional", afirma Hern¨¢ndez. "A¨²n no se han recibido todas las transferencias, no se sabe nada de las leyes org¨¢nicas que las Cortes iban a aprobar, la situaci¨®n financiera de la comunidad es grave y Leguina opta por el famoso recargo del 3%. El fracaso del Gobierno regional en este tema ha significado tambi¨¦n un distanciamiento de los ciudadanos hacia un ente del que casi la primera noticia que han tenido ha sido una amenaza directa a sus bolsillos".
"Esa pol¨ªtica de no molestar al Gobierno central condiciona todo lo dem¨¢s", a?ade el portavoz comunista. "Se aceptan sin protestar los retrasos de las transferencias, los proyectos se eternizan -a¨²n no se ha nombrado siquiera el gerente de la Zona de Urgente Reindustrializaci¨®n (ZUR)- o no se emite deuda p¨²blica para no incrementar el d¨¦ficit".
Hern¨¢ndez pertenece al sector carrillista del PCE. Los diputados fieles a la actual direcci¨®n comunista coinciden en estos planteamientos, aunque matizan que "no es un problema de Leguina; la comunidad sufre la pol¨ªtica de frenazo al proceso auton¨®mico impuesto por el Gobierno central, y es casi indiferente qui¨¦nes sean las personas que ocupan el Gobierno regional".
Joaqu¨ªn Leguina, sin embargo, piensa que la comunidad avanza, contra viento y marea, y que su consolidaci¨®n es un hecho irreversible. El presidente del Gobierno regional acusa a la oposici¨®n, particularmente a Coalici¨®n Popular, de practicar una pol¨ªtica negativa a todo lo que venga del Gobierno aut¨®nomo y de olvidar las dificultades de rodaje de los primeros meses.
"En los dos pr¨®ximos a?os comenzar¨¢n a notarse los efectos positivos de la gesti¨®n", asegura Leguina. "Est¨¢n en marcha proyectos muy importantes: la instalaci¨®n de la Zona de Urgente Reindustrializaci¨®n, el Plan Cuatrienal de Asistencia Social, la creaci¨®n de grandes parques metropolitanos, el control de las ur
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banizaciones ilegales, la depuraci¨®n de las aguas, el Consorcio Regional del Transporte, los nuevos recintos feriales... Todo eso demostrar¨¢ a los madrile?os que la comunidad les conviene porque resuelve sus necesidades".La frustraci¨®n del 3%
"Aceptamos las cr¨ªticas", afirma el presidente regional, "pero nos gustar¨ªa que se reconocieran tambi¨¦n nuestros aciertos". Leguina cree, adem¨¢s, que existen "enemigos de la comunidad", a veces por razones coyunturales o de inter¨¦s personal o corporativista, pero tambi¨¦n pol¨ªticos. "Hay un sector de la izquierda que piensa que las autonom¨ªas son dos, Pa¨ªs Vasco y Catalu?a, y lo dem¨¢s sobra. La derecha cerril piensa que las autonom¨ªas son inventos para dar empleo a pol¨ªticos de tercera. Todos se definen como constitucionalistas, pero olvidan que la Constituci¨®n define a Espa?a como un Estado de autonom¨ªas".
Sobre su subordinaci¨®n al Gobierno central, Leguina explica que "no voy a criticar al Gobierno, porque no encuentro hechos objetivos que demuestren un retraso intencionado en el proceso de transferencias a Madrid. El retraso no es tan importante y se debe a la sentencia sobre la LOAPA".
S¨®lo hay un caso en el que Leguina reconoce haberse sentido traicionado: "Los sistemas de financiaci¨®n de la Comunidad de Madrid son insuficientes. El Fondo de Compensaci¨®n Interterritorial utiliza baremos para el reparto de recursos que discriminan a Madrid, y la cesi¨®n de tributos, tan esperada al principio de la gesti¨®n, va a quedar en segundo plano por el ingreso de Espa?a en la CEE. La ley del Fondo de Solidaridad y el famoso recargo del 3% eran una f¨®rmula para allegar recursos para la inversi¨®n p¨²blica. Era la f¨®rmula que recomendaban a las comunidades algunos t¨¦cnicos del PSOE que luego, cuando se desat¨® la pol¨¦mica, se pusieron a mirar para otro lado. El fracaso del recargo ha puesto en entredicho todo el sistema de financiaci¨®n de las comunidades".
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