La Uni¨®n Sovi¨¦tica estudia un ambicioso plan para desviar aguas de Siberia a las Rep¨²blicas de Asia Central

El plan m¨¢s ambicioso jam¨¢s emprendido por el hombre contra la naturaleza es objeto de una enconada- pol¨¦mica en la URSS. Se trata de la redistribuci¨®n de las abundantes aguas de Siberia hacia las ¨¢ridas Rep¨²blicas de Asia Central, donde est¨¢ el futuro de la agricultura del pa¨ªs. El Siberal (Siberia-mar de Aral) o el proyecto del siglo, como se ha venido a llamar a este plan, se inscribe en la serie de gestas epop¨¦yicas sovi¨¦ticas al estilo del ferrocarril Baikal Amur (BAM) o, la colonizaci¨®n de las tierras v¨ªrgenes emprendida por Jruschov. Prev¨¦ el desv¨ªo de una parte del caudal de los r¨ªos Ob e Irtish hac¨ªa Kazajst¨¢n, Uzbekist¨¢n y Turkmenist¨¢n mediante la construcci¨®n de un canal de 2.550 kil¨¢metros que llevar¨ªa las aguas del despoblado norte hacia los -mares Caspio y Aral, cuyo nivel disminuye de a?o en a?o.

Este grandioso proyecto de trasvase de aguas del norte hacia las zonas ¨¢ridas del sur, que se remonta al siglo XIX y que fue retomado en los a?os estalinianos, comenz¨® a ser estudiado en serio en 1976 como parte del plan para el quinquenio que se iniciaba entonces. Para el a?o pr¨®ximo, el Consejo de Ministros de la URSS debe decidir si Siberal es viable o no. Mientras tanto, economistas, ecologistas y pol¨ªticos toman posiciones diversas y, en algunos casos, antag¨®nicas.Frente a los enormes costes del plan y las profundas transformaciones que ocasionar¨ªa, algunos abogan por redistribuir mejor los recursos en el ¨¢mbito del Estado, donde la poblaci¨®n asi¨¢tica tiene tasas de natalidad muy superiores a las medias. Hay tambi¨¦n quien defiende los intereses regionales siberianos, alegando que es m¨¢s rentable desplazar a la poblaci¨®n de Asia Central hacia Siberia que llevar el agua hacia el Sur.

Est¨¢n adem¨¢s quienes temen las implicaciones ecol¨®gicas de la realizaci¨®n del trasvase. Y no s¨®lo para la ecolog¨ªa sovi¨¦tica, donde actuales pantanos pueden convertirse en tierras ¨¢ridas y viceversa, sino para la ecolog¨ªa mundial. Cient¨ªficos sovi¨¦ticos y occidentales temen un cambio en la estructura del Polo Norte y la alteraci¨®n de la capa de hielo del ?rtico.

El l¨ªmite de los hielos

"Al llevar parte del agua templada hacia el Sur, habr¨¢ menos dirigi¨¦ndose hacia el Norte, y entonces el l¨ªmite de los hielos permanentes se va a desplazar hacia el Sur". Este problema era puesto de manifiesto la pasada primavera, en Novosibirsk, por el profesor Roald Kondratjev, miembro de la direcci¨®n del departamento siberiano de la Academia de Ciencias Agr¨ªcolas (Vaskhnil) de la Uni¨®n Sovi¨¦tica.Otras consecuencias ecol¨®gicas pueden ser el aumento del contenido de sal en el ?rtico, la disminuci¨®n de la fauna acu¨¢tica en los r¨ªos siberianos y una mayor acumulaci¨®n de contaminaci¨®n en ellos.

En Novosibirsk, la capital de Siberia occidental, el Siberal se vive,como una amenaza, pero en la moderna Alma-Ata, la capital de Kazajstan, el lobby local es claramente favorable al desv¨ªo fluvial.

Ante un grupo de periodistas occidentales, el jefe de la Con¨²si¨®n de Planificaci¨®n de la Rep¨²blica (Gosplan), Muhamed Rajidov, asegura que Kazajstan resolver¨¢ muchos problemas si el proyecto prospera. Cree tambi¨¦n que ¨¦ste no influir¨¢ en el clima, "porque el agua no se va a tomar de golpe, sino que ir¨ªamos aumentando la cantidad poco a poco".

Tras Brasil, la Uni¨®n Sovi¨¦tica es el pa¨ªs m¨¢s rico del mundo en recursos hidr¨¢ulicos, con un caudal anual de 4.500 kil¨®metros c¨²bicos. El agua, sin embargo, est¨¢ desigualmente repartida y su distribuci¨®n no guarda una correspondencia arm¨®nica con las posibilidades de desarrollo agr¨ªcola de las distintas zonas de acuerdo con el clima y las condiciones del terreno. Un 60% del agua de los r¨ªos sovi¨¦ticos va a parar al oc¨¦ano ?rtico, y poco m¨¢s de un 10%, a las cuencas del Caspio y el Aral.

Aqu¨ª llegan r¨ªos sobrecargados por una demanda humana, agr¨ªcola e industrial tan grande que el caudal disponible apenas si da para atender a las necesidades actuales. Estimaciones cient¨ªficas calculan que los recursos de agua de Asia Central se habr¨¢n agotado para fines de siglo.

"En el mar de Aral, el problema es muy agudo", comenta un miembro de la Academia de Ciencias de Kazajstan en Alma-Ata. "No s¨®lo desciende el nivel del mar, sino que sufre tambi¨¦n la regi¨®n de alrededor y la salinidad de la tierra aumenta".

"En Siberia hay tambi¨¦n muchas estepas y territorios que necesitan agua y donde las precipitaciones son anualmente de 300 a 350 mm", se?ala Roald Kodratjev. "Si se nos diese el dinero que se piensa gastar para ese canal de Kazajstan, aqu¨ª podr¨ªamos tener el mismo aumento que la producci¨®n de Kazajstan cuando llegue all¨ª el agua, y adem¨¢s m¨¢s barata", sentencia el cient¨ªfico siberiano.

Las esperanzas sovi¨¦ticas de auto abastecimiento agr¨ªcola -ligadas al programa alimenticio de 1982- est¨¢n puestas en Asia Central y en Kazajstan, unas zonas donde las condiciones para los cultivos agr¨ªcolas son muy favorables si no fuera por la falta de agua. La soluci¨®n la ven los dirigentes sovi¨¦ticos en la ampliaci¨®n de las zonas de regad¨ªo.

El canal se va a construir

Bajo el mandato de Konstant¨ªn Chernenko, en octubre de 1984, un pleno del Comit¨¦ Central del PCUS (Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica) aprob¨® un programa de irrigaci¨®n con el cual la superficie de regad¨ªo debe pasar, de 30 millones a 32 millones de hect¨¢reas, y las tierras desecadas, de 19 millones de hect¨¢reas a 21 millones de hect¨¢reas en un per¨ªodo que va hasta finales de siglo. El programa parec¨ªa dar como viable el proyecto de trasvase de las aguas siberianas.Hoy, bajo el mandato de Mijail Gorbachov -quien no intervino, que se sepa, en el pleno de Octubre-, las voces a favor y en contra del proyecto se expresan intermitentemente. M¨¢s de 150 instituciones de investigaci¨®n estudian la viabilidad de Siberal, y entre ellas el pol¨¦mico Instituto Econ¨®mico de Novosibirsk, que. dirige el economista Abel Agambegian.

En el mes de junio pasado,, el ministro de Irrigaci¨®n y Recursos Hidr¨¢ulicos de la URSS, Nikolai Vasiliev, anunci¨® que el proyecto Siberal contin¨²a adelante.

Sin embargo, medios agr¨ªcolas occidentales en Mosc¨² opinan que la intervenci¨®n del ministro ten¨ªa por objeto reafirmar la posici¨®n del lobby representado por el funcionario. Recientemente, un serial televisivo mostraba -como tel¨®n de fondo de la acci¨®n principal- las consecuencias negativas de la desviaci¨®n.

"El tema ¨¦st¨¢ decidido y no hay ninguna duda. El canal se va a construir", afirma el presidente del Gosplan de Kazajstan. En la Academia de Ciencias de Alma-Ata, con todo, no lo ven tan claro.

"Lo principal", dicen, "es la cantidad de agua que se desv¨ªa. A¨²n no se ha decidido. Y no se decide porque va a costar mucho. Las inversiones son muy grandes". Los costes ecol¨®gicos pueden serlo tambi¨¦n.