El furor por repartir cartas
257.000 matriculados se disputar¨¢n el pr¨®ximo mes 5.000 plazas disponibles en Correos
Es un furor profesional, una vocaci¨®n desatada la que ha llevado a j¨®venes y menos j¨®venes de la m¨¢s variada condici¨®n a presentarse a esta convocatoria de empleo p¨²blico. "Esta avalancha tiene una raz¨®n bien simple: el cartero es el funcionario p¨²blico m¨¢s conocido de todo el pa¨ªs", manifiesta F¨¦lix de Sande, secretario general de la Direcci¨®n General de Correos y Telecomunicaciones y presidente del tribunal que realizar¨¢ las pruebas. "Correos ha tenido siempre mucha solera en las oposiciones. El cartero es un funcionario bien recibido en casi todos los sitios, pero se enga?an los opositores que se presentan pensando que no les pueden exigir muchos Conocimientos para repartir cartas", a?ade por su parte Jos¨¦ Esteban Garc¨ªa Pereira, director y propietario de la academia Telpost.La oposici¨®n para los auxiliares tiene dos distintos ejercicios. En uno de ellos hay que resolver dos problemas de c¨¢lculo y un ejercicio de contabilidad y estad¨ªstica. El otro es un cuestionario de 125 preguntas jur¨ªdicas, de legislaci¨®n b¨¢sica y de geograf¨ªa interior e internacional. Al examinando le pueden preguntar, por ejemplo, el n¨²mero de diputados que componen el Congreso o la organizaci¨®n perif¨¦rica del Ministerio de Transportes, Turismo y Comunicaciones; el funcionamiento de la franquicia postal o la normativa sobre casilleros domiciliarios. Le pueden requerir, tambi¨¦n, para que diga de carrerilla los enlaces postales de cualquier provincia espa?ola.
Esta ¨²ltima materia del programa, la geograf¨ªa, obliga a aprenderse de memoria unos 1.400 top¨®nimos espa?oles, am¨¦n de algunos cientos del extranjero. "Un ciudadano normal no tiene por qu¨¦ saber que Castro Urdiales est¨¢ en Cantabria y no en Vizcaya", afirma F¨¦lix de Sande. "Pero ,un funcionario de Correos s¨ª".
De Sande, que ingres¨® en Correos-en 1969, cuando contaba 18 a?os, puede repetir a¨²n hoy sin titubeos, y este reportero es testigo, cualquier ruta postal de la geograf¨ªa espa?ola.
De los centenares de miles de opositores matriculados, aproximadamente el 30% no se presentar¨¢ finalmente al examen. La mayor¨ªa del 70% restante recurre, para su preparaci¨®n, a las academias. Maeztu, Ceus, -Caballero, Text, Telpost, Cursor, Adams, Carranza, Didacta. Seg¨²n el director de una de ellas, en Madrid hay ahora 8 o 10 academias impartiendo clases y vendiendo textos para estos aspirantes a carteros. A ellas hay que a?adir otras tantas que operan en Barcelona y el resto de Espa?a.
Asistir a las clases cuesta mensualmente entre 4.000 y 5.000 pesetas, m¨¢s el precio de la matr¨ªcula, que oscila entre 500 y 1.500 pesetas. En cada clase hay unos 40 alumnos. Cada mes se imparten entre 22 y 50 horas lectivas.
Los temarios cuestan entre 2.600 y 5.400 pesetas. Un simple c¨¢lculo, consistente en multiplicar precios de clases y textos por el n¨²mero de opositores, da una idea de los ping¨¹es beneficios que las academias obtienen en unas oposiciones tan concurridas como ¨¦stas.
Pero no son s¨®lo estos centros quienes movilizan grandes cantidades de dinero. Todo opositor paga al inscribirse 750 pesetas por derechos de matr¨ªcula. El dinero va al tesoro p¨²blico, que, por su parte, se hace cargo de los gastos que la oposici¨®n genera. En la balanza final de ingresos y gastos el tesoro p¨²blico suele salir claramente beneficiado.
Este destino de los dineros de matr¨ªcula de los opositores es nuevo. Antes, en anteriores convocatorias, el sobrante, tras gastos , se lo repart¨ªan los miembros del tribunal. En la direcci¨®n general hab¨ªa entonces cola para ser examinador, ya que unos pocos d¨ªas de dedicaci¨®n supon¨ªan el equivalente cremat¨ªstico a varios meses de sueldo.
Hay a¨²n alguien m¨¢s que pesca en este r¨ªo revuelto de opositores. Adem¨¢s las 750 pesetas que el BOE fija como derechos de examen, la Caja Postal, en la que se hace el ingreso, cobra 40 pesetas m¨¢s en concepto de transferencia. Esos ocho duros, multiplicados por cientos de miles de pagadores, resultan una suculenta cantidad, si bien es justo reconocer que tambi¨¦n aumenta el trabajo en esta entidad bancaria.
Carteros docentes
Por lo general, las materias relacionadas directamente con el servicio de correos son impartidas en las academias por carteros en activo, cuesti¨®n que, al parecer, no vulnera la ley de Incompatibilidades. Hay incluso funcionarios que alquilan directamente aulas tan pronto como se convoca la oposici¨®n y dirigen personalmente esas academias de temporada.
El resto de materias -jur¨ªdicas, de geograf¨ªa, etc¨¦tera- es impartido por los propios directores de los centros, que no siempre est¨¢n en posesi¨®n de los t¨ªtulos acad¨¦micos correspondientes. Jos¨¦ Esteban Garc¨ªa Pereira, director y due?o de Telpost, est¨¢ ligado a estas oposiciones incluso por tradici¨®n familiar. Su padre, Hilario Garc¨ªa, habilitado de Correos, se ganaba ya hace muchos a?os un sobresueldo preparando en su domicilio a los que quer¨ªan opositar. Despu¨¦s acab¨® fundando la academia Hora.
Esta saga familiar, a la que hay que a?adir un hermano de Jos¨¦ Esteban, que dirige la sucursal de Barcelona, tiene dentro de Correos a unos 5.000 antiguos alumnos. "Pero eso no quiere decir que nuestro alumnado vaya a tener un trato de favor en la oposici¨®n. A m¨ª me viene gente preguntando cu¨¢nto dinero pido por un enchufe o un padrinazgo. Antes s¨ª se pod¨ªan conseguir, pero ahora el volumen de opositores hace que los ejercicios se corrijan por ordenador, con lo que es totalmente imposible recomendar a nadie".
Garc¨ªa Pereira, en cuya academia se preparan ¨²nicamente oposiciones de correos y telecomunicaciones, acusa a la Administraci¨®n de incumplir sus. propios compromisos. "Los derechos del opositor se conculcan con excesiva frecuencia. En 1981 se convoc¨® una oposici¨®n al cuerpo de gesti¨®n. Estamos a mediados de 1985 y a¨²n no se ha celebrado, pese a que hay 1.500 personas matriculadas. Los plazos no se cumplen. Por otro lado, en la convocatoria actual los programas son muy poco espec¨ªficos en algunas materias. Y pese a que se dice: que no hay temario oficial, la mutualidad ben¨¦fica de Correos edita unos libros que se venden en las propias ventanillas de la direcci¨®n general y que, adem¨¢s, tienen muchas cuestiones sin actualizar"?
Otro director de academia, que prefiere mantener su nombre en el anonimato, ampl¨ªa las cr¨ªticas a sus propios colegas. "Hay centros que se han montado exclusivamente para ganar dinero, sin ninguna garant¨ªa ni seriedad docente. Se hace comprar a los opositores un mont¨®n de libros, por lo general muy caros, y luego, en las clases, un se?or se limita a leer en voz alta lo que en ellos pone".
Correos no entra ni sale en este tema de las academias. ¨²nicamente ha intervenido cuando alguna de ellas ha utilizado en su publicidad el logotipo de la direcci¨®n general.
J¨®venes de 18 a 23 a?os que buscan su primer empleo estable son los m¨¢s frecuentes clientes de estas oposiciones. "Hace a?os acud¨ªan casi exclusivamente personas relacionadas con funcionarios del cuerpo", cuenta Garc¨ªa Pereira. "Pero con la crisis econ¨®mica viene todo tipo de gente. Por lo general son j¨®venes de nivel cultural medio-alto, con una notable presencia de licenciados universitarios en paro. Pero tenemos incluso entre el alumnado a se?oras de mediana edad que se meten en esto porque tienen los hijos criados y se aburren en casa".
De las 2.240 plazas de turno libre de clasificaci¨®n y reparto, 1.148 son para Catalu?a y 376 para el Pa¨ªs Vasco. "Hay, una raz¨®n muy simple para este reparto. Hace unos a?os, los catalanes y vascos ten¨ªan la posibilidad de trabajar en la industria y los servicios, y ganar m¨¢s dinero que en Correos. Esto hizo que muchas plazas nuestras tuvieran que cubrirse con interinos y contratados. Pero ahora hemos decidido sacarlas a oposici¨®n", aclara F¨¦lix de Sande.
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