La batalla de los esp¨ªas
La l¨®gica de todo esto empieza a escap¨¢rsenos. Nosotros (o sea, Reino Unido y Dinamarca, hasta un cierto punto oscuro, con algunos puntos de transici¨®n brumosos) logramos atraer a un funcionario del KGB.Durante d¨¦cadas, tal vez porque alimentamos alguna buena materia prima, recibi¨® promociones y m¨¢s promociones. Al fin, es con toda probabilidad una personalidad muy importante. Pero, por cualquier raz¨®n que sea, tuvo el viento a favor y desert¨® de forma permanente. Todo esto ha sido celebrado como un supertriunfo para Occidente. ( ... )
Lo que sucedi¨® despu¨¦s es mucho m¨¢s raro. Como jefe local del KGB, Olef Gordievski conoc¨ªa, obviamente, los nombres de sus hombre s en el Reino Unido. Veinticinco fueron expulsados. Despu¨¦s de su deserci¨®n, Mosc¨² llegar¨ªa a saber que nosotros sab¨ªamos qui¨¦nes eran, lo que les har¨ªa ineficaces desde ese instante. En el curso inevitable de las cosas, el Foreign Office despach¨® el asunto con toda claridad, con pena y con la esperanza de que la vida diplom¨¢tica pudiese volver r¨¢pidamente a la normalidad. ( ... )
Algunas veces (como con el presidente Fran?oise Mitterrand), el Kremlin se contiene antes de lanzarse a represalias. Otras veces (como con el Reino Unido en ocasiones anteriores) las expulsiones han sido escalonadas. Pero esta vez 25 fueron expulsados por ambos pa¨ªses. ( ... )
Gorbachov desconcierta a algunos que esperaban de ¨¦l algo mejor. Tal vez, antes de Ginebra, ha enviado un mensaje a la Casa Blanca. Tal vez Gordievski es un personaje crucial y decisivo y al Kremlin le ha ca¨ªdo muy mal. ( ... )
Seis rusos m¨¢s han sido expulsados debido a sus pr¨¢cticas inaceptables. La pr¨®xima etapa es tan previsible como el empate que sigue al combate entre Karpov y Kasparov. Peor, lo que estaba impl¨ªcito en la posici¨®n brit¨¢nica el domingo 15 se clarific¨® el lunes siguiente. Los seis nuevos expulsados eran inocentes v¨ªctimas, y nosotros sab¨ªamos todo de ellos.
El Foreign Office no quiso que el incidente Gordievski agriase las relaciones diplom¨¢ticas. ( ... ) Los mundos est¨¢n separados y son paralelos, como Bonn y Berl¨ªn Este lo ponen en evidencia.
, 17 de septiembre
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