Clima de crispaci¨®n entre los asistentes al Alderdi Eguna
El Partido Nacionalista Vasco (PNV) conmemor¨® ayer en Vitoria la fiesta del Alderdi Eguna (D¨ªa del Partido) en un ambiente de manifiesta crispaci¨®n entre sus militantes. El acto pol¨ªtico no congreg¨®, al contrario que en a?os anteriores, a toda la militancia. Los dirigentes del PNV no ofrecieron respuesta alguna a la petici¨®n de amnist¨ªa para los expulsados navarros formulada desde importantes sectores del partido, y reconocieron p¨²blicamente la crisis interna que aqueja a la familia nacionalista, aunque en esta ocasi¨®n apuntaban impl¨ªcitamente a un sector de la Prensa como el enemigo exterior que acosa al partido.
La celebraci¨®n no lleg¨® a congregar a los 100.000 asistentes de otros a?os (cifra aproximada de militantes), y la concurrencia fue la menos numerosa de las ocho celebraciones de esta fiesta anual registradas hasta ahora. No obstante, fuentes de la direcci¨®n del PNV indicaron que hab¨ªan contabilizado 35.000 coches y 400 autocares.En las campas de Salburua se congreg¨® una "multitud de abertzales", como dijo el presidente del PNV, Jes¨²s Insausti, pero se observ¨® la ausencia de los expulsados navarros y del grueso de la militancia de Guip¨²zcoa y ?lava.
La mayor¨ªa de estos grupos celebr¨® este se?alado d¨ªa en la campa de San Miguel de Aralar (Navarra), adonde acudi¨® tambi¨¦n Carlos Garaikoetxea, quien hab¨ªa asistido antes, en calidad de ex lendakari, a la fiesta oficial del partido en Vitoria, sentado en la tribuna junto a Jos¨¦ Antonio Ardanza. Los periodistas no vieron entre os asistentes a Xabier Arzallus, ex presidente del partido, quien probablemente se encontraba confundido entre la multitud.
En un clima marcado por la tensi¨®n, que en algunos momentos desencaden¨® fuertes enfrentamientos entre grupos de militantes, los dirigentes del PNV se dirigieron a los asistentes en un tono marcado por un exacerbado optimismo, contrarrestado por el reconocimiento p¨²blico de la crisis interna y la petici¨®n a los militantes de mantener la serenidad.
Carlos Claver¨ªa, actual dirigente del PNV en Navarra, que no escatim¨® esfuerzos a la hora de explicar que el partido goza de buena salud en el viejo reino ("las estructuras del PNV en Navarra se encuentran perfectamente cimentadas", lleg¨® a decir), manifest¨® su descontento con la reciente sentencia del Tribunal Constitucional mediante la cual se anula la inclusi¨®n del escudo de Navarra en el emblema de la comunidad aut¨®noma vasca.
"Si el mencionado tribunal se vuelve de espaldas a la historia y a la voluntad del pueblo vasco", dijo, "si en lugar de aplicar jurisprudencia aplica medidas pol¨ªticas, nos queda el recurso de resistir aplicando la f¨®rmula de nuestras viejas Cortes y de las Juntas Generales, el pase foral: se obedece pero no se cumple".
Agradecido a Garaikoetxea
El lendakari, al abordar la crisis interna del partido, a diferencia del presidente del PNV y del representante de Navarra, centr¨® los objetivos de la lucha nacionalista en la defensa del Estatuto frente a los posibles recortes auton¨®micos y Frente a los sectores rupturistas del abertzalismo radical.
Tras recordar a las bases nacionalistas que si estaba all¨ª era "por obedecer" a su partido y "por compromiso" con su pa¨ªs, Ardanza hizo una menci¨®n expresa de agradecimiento al anterior Gobierno de Carlos Garaikoetxea. "Ninguna mezquindad pol¨ªtica, ninguna disputa personal, ninguna confrontaci¨®n posterior nos tiene que hacer renunciar a defender lo que aquellos hombres hicieron", agreg¨®.
El presidente del Gobierno vasco, tras recordar que estos ocho meses de gesti¨®n han servido para consolidar una buena parte de la vida institucional, emplaz¨® a los militantes de su partido: "Cuando os hablen de contradicciones entre la ejecutiva del partido y el Gobierno, confiad en el Gobierno y confiad en el partido. Este pa¨ªs necesita serenidad. No tenemos m¨¢s enemigos que aquellos que vulneran el Estatuto o quieren imponernos su voluntad por la fuerza. Tenemos el Estatuto, que vamos a defender hasta el final".
Por su parte, Jes¨²s Insausti, Uzturre, aunque tambi¨¦n se refiri¨® al desarrollo estatutario y a la violencia que azota al Pa¨ªs Vasco, centr¨® su mensaje en la crisis interna de las filas nacionalistas, para referirse a la existencia de un enemigo exterior que justifique por s¨ª solo la grave crisis que aqueja al Partido Nacionalista Vasco. En este sentido, no cit¨® ni al Gobierno central ni a ETA; tan s¨®lo se refiri¨® a algunas informaciones period¨ªsticas que hab¨ªan hecho especial hincapi¨¦ en el decrecimiento del entusiasmo en las bases del PNV en torno a una fiesta como el Alderdi Eguna.
El odio y la preocupaci¨®n
"Se han equivocado", dijo, "se ha mentido, se ha sembrado el odio y la preocupaci¨®n y no hay que ocultar lo evidente: nos lo han hecho pasar mal a todos. Os pido serenidad y ¨¢nimo decidido para afrontar los asedios que vengan y las operaciones pol¨ªticas sucias que se nos aparezcan. Hemos vivido un a?o de celebraci¨®n en medio de marejadas, que algunos han querido convertir en tempestades quiz¨¢ porque no tienen otro medio mejor para hacer embarrancar este barco, que lleva ya 90 a?os de limpia trayectoria al servicio de Euskadi".
Sin dar precisiones y con un tono m¨¢s ambiguo que el expuesto por el lendakari en el Parlamento, dijo: "No basta con disponerse a hablar; hay que dar pruebas, es preciso demostrar una voluntad seria de di¨¢logo, que no vemos".
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