La Junta Directiva de Alianza Popular aborda la pr¨®xima reestructuraci¨®n del partido
El presidente de Alianza Popular (AP) y jefe de la oposici¨®n conservadora, Manuel Fraga, se enfrenta a partir de hoy con una semana especialmente llena de acontecimientos, que, previsiblemente, le mantendr¨¢n apartado de su particular precampa?a electoral en Galicia. Los dirigentes aliancistas conf¨ªan en iniciar esta semana no s¨®lo una ofensiva de la Coalici¨®n Popular, sino tambi¨¦n una reestructuraci¨®n interna de AP, siempre en busca de la consolidaci¨®n como "alternativa electoral" frente al socialismo.
La firma de los pactos de coalici¨®n con los dirigentes del Partido Dem¨®crata Popular (PDP) y del Partido Liberal (PL), la entrevista que Fraga mantendr¨¢ el jueves con el presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, y la propia reuni¨®n, esta tarde, de la junta directiva nacional de AP -la primera desde el mes de julio- son acontecimientos que hacen pensar en una inevitable aceleraci¨®n de la estrategia de la oposici¨®n ante los meses que se avecinan.La organizaci¨®n de la campa?a gallega parece acaparar en la actualidad la mayor parte de los afanes de los partidos de la Coalici¨®n Popular, si bien miembros del PDP han criticado privadamente el hecho de que "Fraga parece no pensar en otra cosa que en las elecciones de Galicia". El presidente de AP pareci¨® confirmar esta sensaci¨®n en reciente entrevista con EL PAIS. "Lleno de limitaciones como estoy, soy, modestamente, el pol¨ªtico que estrecho m¨¢s manos, que recorro m¨¢s kil¨®metros, que tomo m¨¢s copas con m¨¢s gente", dijo, refiri¨¦ndose a sus constantes idas y venidas principalmente por Galicia, aunque no olvide visitar, de pasada, otras regiones espa?olas.
Pero esta semana el presidente de AP se ver¨¢ f¨®rzado a ocuparse de asuntos estatales. El mi¨¦rcoles se celebra solemne y p¨²blicamente la firma de los pactos de la Coalici¨®n Popular para las pr¨®ximas elecciones, auton¨®micas y generales y el jueves Fraga se entrevistar¨¢, por segunda vez en dos meses, con Felipe Gonz¨¢lez, con quien volver¨¢ a repasar los fallos del consenso constitucional, en general, y el tratamiento que TVE da a la oposici¨®n, muy en particular.
La firma de los pactos de coalici¨®n sigue a una dura y, en ocasiones, tensa negociaci¨®n con los socios liberal y, especialmente, democristiano. Las aguas parecen haberse calmado ahora, con excepci¨®n de lo que en el PDP llaman "algunos flecos sin mayor importancia". AP, PDP y PL, ahora en uni¨®n de los Centristas de Galicia, encabezados por Victorino N¨²?ez, parecen afrontar las pr¨®ximas elecciones auton¨®micas sin excesivos problemas en el horizonte, aunque la confecci¨®n de las listas, en las que ahora deben incluirse los centristas en Orense, siempre crea tensiones.
Por otro lado, en, AP se rnantienen las reticencias hacia los democristianos, siempre "excesivamente deseosos de protagonismo"; el fichaje para el PDP de Rodolfo Mart¨ªn Villa, una pieza que hab¨ªa sido codiciada por AP, es contemplado como un factor de posibles problemas en un futuro no lejano, cuando haya que seleccionar un candidato de la Coalici¨®n Popular para las elecciones auton¨®micas de Castilla y Le¨®n, a celebrar en la primavera de 1987. Claro que ello exigir¨¢ renovar previamente los pactos de coalici¨®n, dado que los que se firmen el mi¨¦rcoles ser¨¢n v¨¢lidos tan s¨®lo hasta las elecciones generales de junio u octubre de 1986. Y nadie asegura hoy, ni en AP ni en el PDP ni en el PL, que la coalici¨®n se mantendr¨¢ m¨¢s all¨¢ de estas fechas.
Conflictos regionales
De acuerdo con el contenido no escrito de los pactos, Fraga, Alzaga y Segurado encabezar¨¢n previsiblemente las listas por Madrid en las elecciones generales, en las que, de acuerdo con las cifras m¨¢s optimistas que manejan los dirigentes de la Coalici¨®n Popular, se obtendr¨ªa en torno a los 160 esca?os; es decir, no se ganar¨ªan las elecciones, pero los socialistas no lograr¨ªan la mayor¨ªa absoluta. Tambi¨¦n se prev¨¦ que los tres dirigentes de la coalici¨®n har¨¢n campa?a en Galicia, aunque el protagonismo indiscutible corresponder¨¢ a Fraga, que ha hecho de las gallegas sus elecciones; as¨ª lo admiten algunos de sus seguidores, que aceptan que el presidente de AP "tal vez espera demasiado de la recuperaci¨®n estatal que pueda producirse a ra¨ªz de los resultados que se obtengan en Galicia", por m¨¢s que "no cabe duda de la importancia" de los mismos.
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