Un ni?o de dos a?os, en coma despu¨¦s de recibir una paliza

Francisco Javier Vallejo, un ni?o de poco m¨¢s de dos a?os, se encuentra en coma desde la madrugada de ayer en el hospital Primero de Octubre a consecuencia de una paliza que presuntamente le propinaron su madre y el hombre que vive con ella. El peque?o est¨¢ completamente desnutrido y tiene quemaduras de cigarrillo, hematomas m¨²ltiples y marcas, realizadas posiblemente con una correa, en gran parte del cuerpo. Francisca Vallejo, de 27 a?os, y Pedro Aguilar Delgado, de 26, ingresaron ayer en prisi¨®n a disposici¨®n del juez de Getafe.

Los vecinos de la calle de Galilea -en la madrile?a localidad de Parla- que tomaban el fresco durante la noche del lunes no pod¨ªan imaginar, cuando vieron salir a la madre con el ni?o en brazos, lo que hab¨ªa ocurrido. Nadie escuch¨® nada. Es m¨¢s: algunas personas se sorprendieron al ver al peque?o. Pensaban, al no escuchar ning¨²n ruido que denotara su presencia, que no estaba con la pareja."Javi iba como muerto. Pens¨¦ que ten¨ªa una fiebre alt¨ªsima", declar¨® una vecina que lo vio salir, mientras el resto del vecindario ped¨ªa a gritos los peores castigos para la madre y su compa?ero.

El primero en llegar al domicilio, seg¨²n el relato de los vecinos, fue el facultativo del ambulatorio de Parla, avisado por la propia familia del ni?o. El m¨¦dico, al advertir la gravedad de Francisco Javier, orden¨® su ingreso en un hospital. La madre y su compa?ero lo llevaron en una ambulancia hasta el Primero de Octubre, donde dieron versiones contradictorias sobre c¨®mo se hab¨ªa producido las heridas el ni?o.

Despu¨¦s, desaparecieron del centro sanitario. Los m¨¦dicos del hospital avisaron a la polic¨ªa, y la pareja fue detenida de madrugada en su domicilio por inspectores de la comisar¨ªa de Parla. Ambos ingresaron ayer en prisi¨®n por orden del Juzgado de Instrucci¨®n de Getafe, que instruye las diligencias.

Quemaduras y correazos

El peque?o, que fue operado durante la ma?ana de ayer, sufre coma cerebral, hematomas m¨²ltiples, quemaduras producidas probablemente con cigarrillos y diversas heridas por todo el cuerpo. Se encontraba anoche muy grave. Sufre tambi¨¦n una gran desnutrici¨®n.La madre de Francisco, una mujer de vestimenta llamativa que trabajaba en un club nocturno, es descrita por los vecinos como extremadamente violenta. En alguna ocasi¨®n lleg¨® a amenazar con una navaja a alguna vecina en una discusi¨®n. Francisca viv¨ªa con dos de sus hijas, de nueve y seis a?os, desde hace dos a?os, en el n¨²mero 26 de la calle de Galilea. Pedro Aguilar, su compa?ero, que no ten¨ªa ocupaci¨®n fija, habitaba en el mismo domicilio desde las pasadas Navidades. Los vecinos lo calificaron como una persona tranquila que no se met¨ªa con nadie.

El peque?o viv¨ªa por temporadas con sus padrinos, un matrimonio de Parla al que la madre abonaba una cantidad de dinero por su cuidado. Mabel, su madrina, fue la ¨²nica persona que ayer acudi¨® al centro. sanitario, donde el peque?o se debat¨ªa entre la vida y la muerte, a interesarse por ¨¦l.

En el domicilio de la familia, ubicado en una barriada de casas de cuatro alturas de promoci¨®n oficial, se encontraban ayer la abuela del peque?o, que lleg¨® hace unos d¨ªas, y las dos hermanas del ni?o. Desde la calle, y a trav¨¦s de la ¨²nica ventana que estaba abierta, se pod¨ªa ver una habitaci¨®n con el papel completamente desgarrado, y ropa interior colgada en la terraza. La luz fue cortada a est¨¢ vivienda por falta de pago hace bastante tiempo. Los inquilinos tampoco pagaban el alquiler del piso.

Denuncia vecinal

El silencio que rodeaba la vivienda habitualmente fue precisamente lo que motiv¨® que algunos vecinos presentaran una denuncia en el Ayuntamiento para que alguien viera lo que pasaba con los ni?os. "Una asistenta social estuvo en la casa, pero no debi¨® encontrar cosas raras, porque no sucedi¨® nada", explic¨® una vecina. Otra mujer describ¨ªa la alimentaci¨®n de los ni?os. "Al peque?o lo deb¨ªan alimentar solo a base de yogures, porque ella es lo ¨²nico que compraba".Asistentes sociales de Parla realizaban ayer gestiones para que las dos ni?as fueran recogidas en alguna instituci¨®n p¨²blica.