El historiador marxista Medvedev considera que el programa del PCUS es tendencioso
El programa del Partido Comunista de la URSS (PCUS), cuyo borrador fue difundido el pasado s¨¢bado, adolece de falta de rigor cient¨ªfico, est¨¢ "impregnado de tendenciosidad" y no hace "un an¨¢lisis serio del camino recorrido por la Uni¨®n Sovi¨¦tica en sus casi 70 a?os de existencia", seg¨²n afirm¨® a EL PA?S el fil¨®sofo e historiador marxista Roy Medvedev, tras una primera lectura del documento. A sus 60 a?os, Medvedev, que reside en Mosc¨², es una de las pocas voces cr¨ªticas prestigiosas, si no la ¨²nica, que desde posiciones marxistas no oficiales analizan el sistema sovi¨¦tico p¨²blicamente sin entrar en conflicto irreparable con el poder.
El historiador, autor de numerosos ensayos publicados en el extranjero sobre la pol¨ªtica y la sociedad sovi¨¦tica, fue sometido a una vigilancia policial domiciliaria desde poco despu¨¦s de la muerte de Yuri Andropov. A principios de verano la vigilancia desapareci¨® pero, a partir de septiembre pasado, ha sido sustituida por el bloqueo del tel¨¦fono en el apartamento atiborrado de libros que Medvedev ocupa en un barrio alejado del centro.Para Medvedev, que fue expulsado del PCUS en 1968 por oponerse a la rehabilitaci¨®n de Stalin, el nuevo programa se diferencia de su versi¨®n anterior -aprobada en 1961 - por ser un documento m¨¢s corto y m¨¢s pensado, que evita detalles y promesas concretas. "Al presentar formulaciones m¨¢s vagas es menos vulnerable a las cr¨ªticas sobre las promesas no cumplidas", se?ala.
Medvedev, que anteriormente hab¨ªa expresado expectativas positivas sobre el liderazgo de Mijail Gorbachov, cree que el nuevo texto "no cierra el camino a cambios serios y constructivos". Ampar¨¢ndose en citas de Lenin, Medvedev afirma que el programa deber¨ªa "haber analizado lo que hicimos y lo que no hicimos de todo aquello que quer¨ªamos". El anterior programa, de la ¨¦poca de Nikita Jruschov, promet¨ªa amplia satisfacci¨®n de todos los deseos y necesidades.
"Si el programa es un documento cient¨ªfico, como se afirma, ¨¦ste exige un an¨¢lisis cient¨ªfico, lo que supone objetividad, y, sin embargo, el texto est¨¢ impregnado de tendenciosidad", afirma el historiador.
Cr¨ªticas escondidas
Seg¨²n Medvedev, las cr¨ªticas a Stalin, Jruschov y Breznev contenidas en el documento "est¨¢n escondidas en frases que no ocupan mucho sitio y que est¨¢n utilizadas en el ¨¢mbito del ensalzamiento de los logros del partido, pero no en el an¨¢lisis de sus insuficiencias".La falta de un an¨¢lisis cient¨ªfico afecta a la manera de abordar el movimiento comunista, cuya escisi¨®n se ha profundizado en los ¨²ltimos 20 a?os. El programa de 1961 citaba pa¨ªses concretos, como China o Albania, como miembros de la comunidad Socialista, y excomulgaba a otros, como Yugoslavia. Ahora las alusiones concretas se han perdido y "se habla de Iuchar por la unidad, pero no se dice d¨®nde se perdi¨® esta unidad'.
El texto tampoco alude a la posibilidad de "utilizar de forma creativa la experiencia de otros pa¨ªses socialistas, como por ejemplo Hungr¨ªa", y, "como si lo bueno s¨®lo pudiera venir de la URSS, no presupone que estos pa¨ªses pueden darnos algo ¨²til a nosotros". "Faltan tambi¨¦n frases que pudieran haber abierto una puerta a la integraci¨®n humana, no s¨®lo econ¨®mica, de la comunidad socialista".
En las relaciones con el mundo occidental, el programa, a juicio de Medvedev, "hubiera debido valorar mejor los ¨¦xitos de Occidente en el campo de la cultura, la t¨¦cnica y la democracia y haber sido m¨¢s objetivo con los adversarios ideol¨®gicos".
El documento, que debe ser aprobado en el congreso del PCUS en 1986, habla de la necesidad de di¨¢logo y cooperaci¨®n con EE UU, pero "no es capaz de encontrar nada positivo en aquel pa¨ªs, al que achaca todo tipo de males, y ¨¦ste no es un buen principio para el di¨¢logo". Para Medvedev, "se tendr¨ªa que haber explicado por qu¨¦ existe a¨²n el capitalismo y por qu¨¦ sigue avanzando".
Otra de las cosas que el documento evita es explicar por qu¨¦ no se cumpli¨® el anterior programa en los 24 a?os de su vigencia. "Nos prometieron un aumento de las expectativas de vida, la eliminaci¨®n del trabajo pesado, la superaci¨®n econ¨®mica de Estados Unidos, y todo eso no se ha cumplido".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.