El Psiqui¨¢trico de Murcia
Saludos y felicitaciones antes de nada a ese peri¨®dico, en cuyas p¨¢ginas 1, 2 y 3 del domingo 20 de octubre de 1985, me he dejado lle-Pasa a la p¨¢gina 10
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var por los cristales rotos de Hans Magnus, y, trasladando algo de lo dicho en ese art¨ªculo, concretamente los pobres del cartel que menciona o sin ¨¦l, por estos lares ya se ven menos, pero tienen ¨¦xito con los for¨¢neos, del Rastro no. opino y sobre todo les escribo porque la forma de redactar me llev¨® con sobresalto hasta su final aclarador y todo respecto a la descripci¨®n inicial del proceder de la Guardia Civil y funcionamiento del psiqui¨¢trico en Ciempozuelos, y ya que ¨²ltimamente paseo y descubro los jardines del hospital psiqui¨¢trico Rom¨¢n Alberca, de Murcia, por visitas de mi profesi¨®n y antes de nada decirles que lo visto no era lo que yo pensaba, lo primero una amplia entrada y jardines, ya en el patio central las auxiliares toman el sol tras los ¨¢rboles, los internos pasean o est¨¢n sentados a su libre albedr¨ªo o en el bar. Una se?ora me dice si la invito a un refresco, otra pide un "cigarrico", a otros enfermos hoy, martes, por el v¨ªdeo, les ponen la pel¨ªcula, con t¨ªtulos, F¨¢brica de locos, de Natalie Wood. Los lunes y viernes, bingo a las cinco de la tarde. Sala de lectura con prensa y revistas a su disposici¨®n. Taller de teatro en un lateral del edificio y desde ir y venir de los enfermos en libertad ya al salir veo las dos garitas en las cuales no se ve a nadie hoy, pero cuando hay es un funcionario sentado pl¨¢cidamente que saluda a quien sale o entra sin mucho control. As¨ª que se palpa libertad en el centro. Y en cuanto a la Guardia Civil, desde luego, a mis a?os me acuerdo de viejas actuaciones muy diferentes, ya que ahora s¨®lo recuerdo vagamente el color de sus uniformes, pues no les veo.
En cuanto a pintadas Reagan se lleva la palma, con tratamientos claros, y para terminar creo que son miles, cientos los Ciempozuelos en Espa?a, libres, sin que ello no quite hierro a los problemas.
En fin, Enzensberger, gracias por tu canto a la esperanza descubierta desde tu ¨®ptica final compartida.-
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