Di St¨¦fano, tras despedirse del Boca Juniors: "No tengo 'verso' para enga?ar a la gente"
Alfredo di St¨¦fano, dificil para el di¨¢logo abierto, aun en los momentos de sus m¨¢s grandes victorias, tiene una respuesta r¨¢pida de sinceridad: "Yo no tengo verso para enga?ar a la gente, pero soy derecho y no ando con vueltas".Entre la pena y la bronca le salen, convulsivamente, retazos de un contenido mon¨®logo que casi no repara en las preguntas: "Tuvimos muchos lesionados, suspendidos y otra clase de problemas. Me parece que algunos chicos no saben lo que significa el Boca. El d¨ªa que perdimos 3-0 con el Independiente, al terminar el partido varios cambiaron sus camisetas con los rivales. ?C¨®mo puede ser! Nos golean, nos bailan y encima les entregan sus colores. Eso en mi tiempo no pasaba. Es inadmisible".
Pregunta. ?Qu¨¦ le respond¨ªan cuando hablaba de esto con los jugadores?
Respuesta. No se lo creen, no escuchan. Es muy f¨¢cil echarle la culpa a los dem¨¢s. Se cometen errores, tiran penaltis fuera y luego la culpa es del entrenador. Toda mi vida dije que el t¨¦cnico es una doceava parte del equipo, pero dentro del campo la responsabilidad es de ellos. As¨ª era en mi tiempo, y esto no cambi¨® ni cambiar¨¢ nunca. Yo no puedo entrar al campo a hacer los goles.
El car¨¢cter
P. Ahora los dirigentes dicen que usted no ten¨ªa buen car¨¢cter con ellos ni tampoco con los jugadores.R. Siempre salen con eso. Pero cuando el equipo ganaba, a nadie le importaba mi car¨¢cter. Yo no tengo verso para enga?ar a la gente, pero soy derecho y no ando con vueltas. Lo que tengo que decir, lo digo, y listo. Yo s¨®lo siento pena y bronca porque la hinchada del Boca es una de las m¨¢s importantes del mundo y el p¨²blico estuvo siempre con nosotros hasta el ¨²ltimo momento.
P. ?Por qu¨¦ se fue?
R. Me fui porque no estoy dispuesto a aceptar presiones de nadie. Hay gente que lo m¨¢s redondo que conoce no es un bal¨®n, sino un ladrillo, pero igual se atreve a opinar de f¨²tbol.
P. Si no hubiera existido la presi¨®n de la directiva, ?habr¨ªa renunciado igual?
R. No. Estaba dispuesto a cumplir mi contrato hasta el 31 de diciembre. Pero un dirigente no puede decir que los jugadores no han puesto el coraz¨®n porque eso no es verdad. Hicieron lo imposible, pero les falta experiencia. El equipo cumpli¨® el objetivo previsto a comienzos de temporada y lleg¨® a disputar los primeros puestos del torneo; luego declin¨® f¨ªsicamente. El regreso del profesor Paredes a Madrid fue muy dificil de superar para nosotros.
"Ya conoc¨ªa la situaci¨®n"
P. Los problemas internos de la directiva, la crisis econ¨®mica y la escasez de recursos con los que cont¨® fueron motivos ciertos que perjudicaron su labor. ?Por qu¨¦ no hizo nunca menci¨®n de ellos?R. Porque ya conoc¨ªa la situaci¨®n antes de aceptar. Yo sab¨ªa que algunos chicos no pod¨ªan correr al mismo ritmo todo el partido o que otros ten¨ªan problemas econ¨®micos, pero no iba a andar publicitando eso por ah¨ª. Estoy conforme con mi trabajo. Dej¨¦ todo por los colores que me toc¨® defender. Siempre fui as¨ª y no voy a cambiar ahora despu¨¦s de ¨¦sto. Aquel que me contrata sabe para qu¨¦ puede contar conmigo. Para que luego las miradas y un silencio sentido den por terminado el asunto entre los amigos.
P. ?Piensa regresar inmediatamente a Espa?a?
R. No. Me quedo en Buenos Aires a pasar la Navidad con mi familia; luego ver¨¦. El a?o que viene tengo contrato con la televisi¨®n de Venezuela para comentar el Mundial 86 de M¨¦xico. Entre tanto, seguir¨¦ viendo f¨²tbol donde me encuentre. Es mi vida".
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