Secreto estad¨ªstico

Un delito contra la libertad y seguridad en el trabajo se produjo en la Caja de Ahorros de Almer¨ªa al distribuirse unos cuestionarios en los que se preguntaban datos personales y familiares. En apariencia, ¨¦stos eran an¨®nimos y la encuesta se present¨® como una simple recogida de datos generales. Pero se pudo comprobar que la caja de ahorros ten¨ªa constancia de qui¨¦n hab¨ªa respondido cada cuestionario porque estaban marcados con un numero impreso de forma especial, viol¨¢ndose; con ello, el secreto estad¨ªstico.Con ¨¦ste se protege, en parte, la intimidad. Los datos son consignados por grupos de personas, est¨¢n agregados y no pueden deducirse los que corresponden a cada individuo. Adem¨¢s del secreto estad¨ªstico, Espa?a firm¨® el Convenio 109 del Consejo de Europa en 1982, comprometi¨¦ndose con ello a tener aprobada una ley de protecci¨®n de datos en un plazo m¨¢ximo de seis meses tras la ratificaci¨®n del convenio por el Congreso. "Este plazo se ha superado ampliamente y a¨²n no disponemos de esta ley", seg¨²n Adoraci¨®n de Miguel.

Justamente en el verano de 1984 se celebr¨® una reuni¨®n en Madrid organizada por el Consejo de Europa para analizar los problemas de legislaci¨®n en materia de protecci¨®n de datos. La conclusi¨®n m¨¢s importante fue que la in formaci¨®n ha de ser, como regla general, facilitada de forma impersonal. Se debe informar adem¨¢s de la finalidad exacta para la que se recogen los datos y utilizarse ¨²nicamente en ese sentido. Si alguno de estos datos se sale de esta finalidad, debe poder exigirse la rectificaci¨®n y, cuando pase un tiempo determinado -en la ley danesa, por ejemplo, son cinco a?os-, los datos se consideran cancelados y deben borrarse.

En cada banco de datos tiene que haber un responsable que garantice plenamente la confidencialidad -en Espa?a no los hay- y antes de responder un cuestionario ha de informarse claramente sobre la obligatoriedad o no de dar respuestas, especific¨¢ndose cu¨¢l es la pena si no se responde.