El mercado de las artes pl¨¢sticas crece en Espa?a con la apertura o ampliaci¨®n de galer¨ªas
Desde los a?os setenta, era noticia com¨²n la desaparici¨®n de numerosas galer¨ªas de arte. Cierto es tambi¨¦n que durante ese per¨ªodo surgieron otras, pero fueron m¨¢s bien aventuras aisladas, nacidas en medio de un clima de desaliento. Sin embargo, hoy parece dibujarse un panorama distinto. S¨®lo en Madrid el n¨²mero de galer¨ªas que se ha abierto entre finales de la pasada temporada y el inicio de la actual ronda ya la decena. En ese mismo esp¨ªritu de actividad, otras galer¨ªas en activo, como Sen o Gamarra-Garrigues, han emprendido reformas sustanciales y se anuncian otras nuevas aperturas.
En algunos casos, como el de la galer¨ªa Arte en Europa, la apertura o reforma de galer¨ªas ha supuesto el regreso de conocidos profesionales. Para los responsables de galer¨ªas como ?ngel Romero, Arte-Express u Oliva-Mara se trata, sin embargo, del inicio de una nueva aventura personal.Para ?ngel Romero, promotor de la galer¨ªa que lleva su nombre, no es un negocio que se pueda, emprender con la misma impunidad que cualquier otro. Oliva Perez, codirectora de Oliva-Mara, suma a esa pasi¨®n personal la creencia de que el medio est¨¢ viviendo un momento bueno: "No se trata s¨®lo de una cuesti¨®n de mercado, sino, fundamentalmente, del inter¨¦s por el arte que se ha despertado entre la gente joven y que hoy constituye ya un sector importante del p¨²blico de las galer¨ªas".
La idea de que el mercado art¨ªstico espa?ol atraviesa un momento esperanzador es compartida por todos los profesionales consultados. Carmen Gamarra, corresponsable de Gamarra-Garrigues, una galer¨ªa que acumul¨® un s¨®lido prestigio bajo su anterior nombre de Alen?on, relaciona la decisi¨®n de emprender su reforma del local con ese clima de optimismo: "La reforma y el cambio de nombre coinciden con el quinto aniversario de la galer¨ªa. Abrimos en el mism¨ªsimo fondo del pozo, cuando todas las galer¨ªas lloraban y muchas cerraban. No hemos conocido la euforia de los sesenta y, tal vez por ello, nos ha parecido m¨¢s espectacular el desarrollo que se ha producido en los dos ¨²ltimos a?os".
Antonio Navascu¨¦s, que entre 1964 y 1978 fue responsable -junto a su mujer, Margarita de Lucas- de la trayectoria de Edurne, una galer¨ªa hist¨®rica en el panorama madrile?o, y que ahora ha regresado con su Arte en Europa, piensa que el mundo del arte es a¨²n muy peque?o en nuestro pa¨ªs y que existe un gran p¨²blico potencial, dispuesto a incorporarse a ¨¦l.
Con todo, otras opiniones muestran un optimismo m¨¢s moderado. Sof¨ªa Barroso y Fernando Palazuelo, directores de Arte-Express, creen que, frente a la extraordinaria efervescencia de nuestro arte actual, la respuesta econ¨®mica ha mantenido hasta ahora un ¨ªndice de crecimiento mucho m¨¢s lento.
Eugenia de Su?er, de la galer¨ªa Sen, aun reconociendo que las ventas se han incrementado significativamente, nos manifest¨® su recelo ante la posibilidad de que pueda generarse una euforia semejante a la de los a?os sesenta. "Eso hizo que el desastre fuer a mayor con la llegada de la crisis. Se cre¨® un gran desconcierto en el p¨²blico que repercuti¨® negativamente en el mercado".
Mar¨ªa Victoria Otero, hasta hace poco directora de Altex y ahora al frente deBerthaud-Otero, es m¨¢s esc¨¦ptica. Piensa que los cambios que han alterado la fisonom¨ªa del mercado art¨ªstico espa?ol no permiten inferir la existencia de un horizonte econ¨®mico mucho m¨¢s esperanzador, aun contando con las expectativas que abre la incorporaci¨®n a Europa.
Por ello mismo prefiere desligar su caso del conjunto de nuevas galer¨ªas, contemplando su decisi¨®n de independizarse como un proceso l¨®gico dentro de una larga trayectoria profesional. Con todo, entre quienes se asoman a esta experiencia existe tambi¨¦n la convicci¨®n de que se trata de un camino largo y arduo. As¨ª, para Mar Estrada, de Oliva-Mara, "el proyecto de una galer¨ªa debe afrontarse con una visi¨®n de futuro, sin prisas".
Nuevos coleccionistas
La unanimidad respalda la opini¨®n de que la fisonom¨ªa actual del mercado se define por la aparici¨®n de un nuevo tipo de coleccionista en el que todos identifican a una joven generaci¨®n que comienza a afianzar su situaci¨®n econ¨®mica y toma el relevo del coleccionismo tradicional. "Los nuevos coleccionistas", dice Isabel Garrigues, de Gamarra-Garrigues, son gente que ha nacido a esa afici¨®n y la ha desarrollado a la par que nuestra trayectoria como galeristas. Hoy comienzan a tener colecciones importantes, basadas en su pasi¨®n por el arte". Esa afici¨®n como motor de las adquisiciones define tambi¨¦n para Eugenia de Su?er la actitud del nuevo coleccionista: "La palabra inversi¨®n, tan usual antes como motivo del coleccionismo, est¨¢ desapareciendo".El reto del nuevo coleccionismo debe corresponderse con un nuevo concepto de galer¨ªa. Para Margarita de Lucas, de Arte en Europa, "es preciso plantear un modelo din¨¢mico, con nuevas opciones y modos de relaci¨®n. Esto es un modo de ganarse la vida, pero tambi¨¦n una labor cultural".
En relaci¨®n con la l¨ªnea de compromiso art¨ªstico que definir¨ªa el proyecto de nuevas galer¨ªas, las precisiones no van mucho m¨¢s all¨¢ de un prop¨®sito de apostar por opciones indeterminadas de vanguardia o criterios de calidad.
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