Fuerte incidencia de la corriente vendedora
El n¨²mero y la calidad de los valores que se encuentran bajo la presi¨®n del papel est¨¢ aumentando progresivamente, lo que indica el alcance de la corriente realizadora que ayer, con la incorporaci¨®n de los valores bancarios, adquiri¨® un tinte m¨¢s negativo que el de las jornadas precedentes. El previsible beneficio que para muchas empresas puede suponer la baja en el precio de los crudos apenas se dej¨® sentir, pues, como suele ser habitual, cuando se impone una tendencia a la baja los factores positivos tienen escaso eco entre los inversionistas, m¨¢s interesados en salir bien parados de la situaci¨®n presente que en ocuparse del futuro, aunque ¨¦ste sea inmediato. Lo importante ahora es no salir el ¨²ltimo y esperar a que se produzca la l¨®gica reacci¨®n t¨¦cnica para estudiar la posibilidad de tomar posiciones.Entre los factores que empiezan a tomar peso est¨¢ el de la inflaci¨®n, quiz¨¢ porque se trata m¨¢s de buscar justificaciones a la situaci¨®n actual, para no asustar a nadie, que de otorgarle el car¨¢cter de previsi¨®n ante el porvenir. El hecho de que las autoridades monetarias tengan la intenci¨®n de mantener estables los tipos de inter¨¦s en las emisiones a medio y largo plazo parece haber pasado desapercibido en un mercado que cada vez depende m¨¢s de los precios del dinero. El estancamiento de los tipos de inter¨¦s puede provocar una situaci¨®n similar en los mercados de renta variable, sobre todo despu¨¦s del fuerte sprint inicial registrado en estos primeros d¨ªas del a?o. A esto hay que a?adirle el que parte del exceso de liquidez institucional ha llegado a su fin, con lo que a partir de ahora habr¨¢ que contar con una peque?a reducci¨®n en los niveles de contrataci¨®n.
El inter¨¦s en el sector bancario estaba centrado en el volumen de papel con que saldr¨ªan los saldos de los siete grandes, ya que nadie parec¨ªa dudar sobre el signo de la mayor¨ªa de las operaciones. Los hechos le dieron la raz¨®n a la voz de la experiencia, pues el saldo global de este grupo fue de casi medio mill¨®n de t¨ªtulos a la venta, y esta vez sin excepciones, y con un Banco Hispano dispuesto a seguir siendo el que lleve la voz cantante. Su saldo particular fue el m¨¢s elevado, con algo m¨¢s de 200.000 t¨ªtulos sin contrapartida compradora.
Poco que destacar hay en el resto de los sectores, que tambi¨¦n se vieron sometidos a la presi¨®n del papel, m¨¢s fuerte en algunos casos debido a la casi total ausencia de intenciones compradoras. La mayor¨ªa de los grupos registraron bajas de cierta importancia, sobre todo en sus valores principales, con la ¨²nica excepci¨®n del sector qu¨ªmico, en donde el dinero encontr¨® -y s¨®lo en un valor- uno de los pocos casos en que ciertas perspectivas lograron imponerse al ambiente negativo.
En cuanto al mercado de pagar¨¦s del Tesoro, el volumen negociado ha descendido de forma radical, al tiempo que los tipos de inter¨¦s anuales han podido recuperarse y superar otra vez la cota del 9%. Algo parecido sucedi¨® con el mercado interbancario, donde las operaciones de dep¨®sitos a un d¨ªa subieron de un 2,06% hasta el 10,13%, lo que viene a confirmar el final de la presi¨®n del dinero institucional.
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