Cunhal convoca un congreso extraordinario del PCP para discutir el apoyo a Soares

El Partido Comunista Portugu¨¦s (PCP) decidir¨¢ el domingo, en un congreso extraordinario, su postura ante la candidatura del socialista Mario Soares a la jefatura del Estado. La resoluci¨®n aprobada el martes por el Comit¨¦ Central del PCP y divulgada ayer por Alvaro Cunhal, secretario general, es muy clara con respecto al candidato conservador, Diego Freitas do Amaral. "Es indesmentible que el mayor peligro, en el momento actual, resulta de la din¨¢mica ultrarreaccionaria, fascistoide y agresiva" que puede llevar Freitas a la jefatura del Estado, dice el PCP.

Afirma tambi¨¦n la resoluci¨®n que el "peligro es real" e "inminente" y que el "deber supremo de los dem¨®cratas es conjurar este peligro". Pero al mismo tiempo el PCP "mantiene integralmente" que la candidatura de Soares es "una candidatura de derecha" y que no tiene ninguna confianza en ¨¦l para "defender la democracia y resolver los problemas nacionales".Si los comunistas portugueses deciden el 2 de febrero votar a favor de Soares, ser¨¢ para "unir a todos los dem¨®cratas y trabajadores para derrotar la grave e inmediata amenaza" que se perfila "por detr¨¢s y ante la perspectiva" de una victoria de Freitas, el ex presidente del democristiano Centro Democr¨¢tico Social (CDS).

Seg¨²n Cunhal, no se trata de encontrar en Soares un salvador de la democracia y de la libertad, sino de quebrar una din¨¢mica de "recuperaci¨®n del poder" por las fuerzas pol¨ªticas, econ¨®micas y sociales que gobernaban en Lisboa hasta el 25 de abril de 1974. Para el l¨ªder comunista, Soares fue durante 10 a?os uno de los instrumentos de esta pol¨ªtica restauracionista y lo fue a¨²n durante la campa?a que realiz¨® en la primera vuelta de las elecciones. Pero lo ha dejado de ser ahora que la funci¨®n que desempe?¨® puede ser asumida, con m¨¢s ¨¦xito, por el nuevo l¨ªder del Partido Social Dem¨®crata (PSD), An¨ªbal Cavaco Silva.

Dificultad para convencer

Cunhal ley¨® las resoluciones del Comit¨¦ Central y fue el ¨²nico en responder ayer a las preguntas de los periodistas portugueses y extranjeros. Subray¨® que los comunistas "cumplieron con honor" su tarea en la primera vuelta, que era "luchar hasta el extremo de sus posibilidades" para conseguir la "convergencia democr¨¢tica" y crear, con la victoria del izquierdista Francisco Salgado Zenha, "una alternativa a la pol¨ªtica de derecha de los ¨²ltimos 10 a?os". Dejaba as¨ª traslucir las dificultades que tendr¨¢ ahora el PCP para convencer a su electorado de dar los mismos votos a Soares. Record¨® que la resoluci¨®n aprobada por el X Congreso del PCP, de diciembre de 1983, afirmaba que Soares ser¨ªa, en las elecciones presidenciales siguientes, "el candidato que la derecha tratar¨ªa de elegir en la primera o en la segunda vuelta", y que "cualquier apoyo o indicaci¨®n de voto a favor (de Soares) est¨¢ excluida". Porque el congreso essoberano, resulta ahora preciso uno extraordinario a fin de levantar la prohibici¨®n hecha en 1983.El anticomunismo fue el argumento m¨¢s utilizado por Freitas, Soares y la independiente Lourdes Pintasilgo en el acoso contra Salgado Zenha y Antonio Ramalho Eanes en la primera vuelta de la campa?a electoral; y ha provocado reacciones de miedo en la vieja guardia del PCP.

Los sindicalistas comunistas, por su parte, sienten enorme repulsa a apoyar para la presidencia al hombre que, como primer ministro, fue hasta hace tres meses acusado como responsable del deterioro de las condiciones de vida de los trabajadores. Y ello en el preciso momento en que el nuevo Gobierno adopt¨® una serie de medidas que la direcci¨®n del PCP califica de demag¨®gicas, pero que significan una innegable moderaci¨®n de la pol¨ªtica de austeridad seguida por el Gabinete de Soares.

Este, quien afirma que s¨®lo ser¨¢ vencido el 16 de febrero si "el PCP hace el juego de la derecha", se prepara a justificar con esta traici¨®n comunista su pol¨ªtica de alianza con el PSD y el CDS en las municipales de octubre: el mismo d¨ªa en que exig¨ªa el voto comunista, sin ofrecer nada en cambio, el PS votaba al lado de socialdem¨®cratas y democristianos la exclusi¨®n de los comunistas, segunda fuerza pol¨ªtica de la capital, de todas las comisiones municipales.