Francia multiplica sus gestiones para que un tercer pa¨ªs acoja al derrocado Duvalier

El ex presidente vitalicio de Hait¨ª Jean-Claude Duvalier y su s¨¦quito de 22 miembros continuaban ayer descansando en un tranquilo y lujoso hotel de los Alpes franceses, mientras el Gobierno de Fran?ois Mitterrand se esforzaba sin ¨¦xito para que alg¨²n pa¨ªs aceptara recibir al derrocado l¨ªder haitiano.Rodeado por numerosos polic¨ªas que le protegen de posibles atentados, Duvalier pas¨® sus primeros d¨ªas de exilio paseando con su esposa, Michelle, por los alrededores nevados del Hotel de la Abad¨ªa, una antigua abad¨ªa benedictina en la ribera este del lago Annecy, cerca de la frontera suiza.

Duvalier huy¨® en la madrugada del viernes del tropical Hait¨ª, donde encabez¨® durante casi 15 a?os una dictadura hereditaria que le hab¨ªa legado su padre, Fran?ois, al morir, tras 13 a?os y medio de autocracia. El Gobierno socialista franc¨¦s ha calificado la estancia de Duvalier en Francia como temporal y ha reiterado que debe salir antes de que transcurran ocho d¨ªas. "Estamos buscando un pa¨ªs de asilo permanente. Este pa¨ªs no puede ser Francia. Tampoco queremos que se prolonge su estancia aqu¨ª", dijo ayer el primer ministro franc¨¦s, Laurent Fabius.

Los esfuerzos del Gobierno, que enfrenta unas disputadas elecciones el pr¨®ximo mes, por desembarazarse de Baby Doc est¨¢n resulta do m¨¢s dif¨ªciles de lo que parec¨ªan.

Gab¨®n, Camer¨²n, Suiza, Grecia y Espa?a ya han rehusado concederle asilo. Los intentos de Francia se orientan hacia alg¨²n Estado africano franc¨®fono, pero las dificultades fueron reflejadas por el peri¨®dico semioficial de Gab¨®n L'Uni¨®n, que titul¨®: "Gab¨®n no es un cubo de basura".El ex dictador haitiano parec¨ªa ayer dispuesto a prolongar su estancia, seg¨²n diversos indicios. El s¨¢bado, numerosos aparatos de televisi¨®n y de v¨ªdeo fueron introducidos en el hotel. Los secretarios de Duvalier han intentado reservarle una mesa en un restaurante local para mediados de la semana. Un empleado del hotel que responde a las llamadas telef¨®nicas avisa a los interesados que "todas las habitaciones est¨¢n reservadas indefinidamente".

Duvalier, que ha dividido su tiempo entre la sauna, la comida y peque?os paseos, no ha sido bien recibido en el peque?o y tradicionalmente hospitalario pueblo de Talloires. "El se?or Duvalier est¨¢ aqu¨ª por ocho d¨ªas, pero ?ser¨¢n como los ocho d¨ªas del se?or Jean Bedel Bokassa?", se pregunt¨® el alcalde de Talloires, Joseph Burdeyron. Bokassa, el ex emperador de la Rep¨²blica Centroafricana obtuvo asilo temporal en Francia en 1979 y a¨²n sigue en el pa¨ªs. Duvalier, como Bokassa, posee varias casas en Francia, una de ellas un castillo del siglo XVIII en las afueras de Par¨ªs.