Herminio Trigo
Sucesor de Anguita en la alcald¨ªa de C¨®rdoba
Herminio Trigo ser¨¢ el segundo alcalde comunista de la historia de C¨®rdoba, el sucesor del carism¨¢tico Julio Anguita. Fiel al t¨®pico m¨¢s f¨¢cil, para no contrariar los decires populares, Herminio es "trigo limpio" de la despensa comunista espa?ola. Desde hoy ser¨¢ alcalde en funciones y a final de mes tomar¨¢ posesi¨®n oficialmente del cargo. Maestro de escuela de cuando todav¨ªa se llamaban as¨ª, cin¨¦filo de casi siempre y pol¨ªtico de casa, C¨®rdoba, durante los 12 ¨²ltimos a?os, Herminio es el punto y seguido para el Ayuntamiento cordob¨¦s.
"Esto nunca fue un califato, en el sentido de Estado independiente. Qu¨¦ m¨¢s quisiera yo", afirma; "lo que s¨ª seguir¨¢ siendo es un dominio rojo. Lo que Cordoba ha pretendido y pretende recuperar es su condici¨®n de ciudad encuentro de tres culturas. Y los intereses del mundo isl¨¢mico ser¨¢n canalizados con seriedad por los cauces oficiales".Herminio Trigo, casado y con cuatro hijos, ha sido un canalizador, un hombre de encuentro. Fue un joven cordob¨¦s vinculado al catolicismo progre de los a?os cincuenta. Hace casi un cuarto de siglo empez¨® como dirigente de las Juventudes de Acci¨®n Cat¨®lica; aument¨® sus m¨¦ritos espirituales en los cursillos de cristiandad y hoy se confiesa agn¨®stico. En 1962 lleg¨® al magisterio. Ense?¨® en Montilla y en el barrio cordob¨¦s de San Basilio. En 1974, un lustro despu¨¦s de conocer a Anguita en la Escuela Normal de C¨®rdoba, ingres¨® en el PCE.No fue olfato: "Siempre tuve un esp¨ªritu cr¨ªtico antifranquista nacido de la relaci¨®n con amigos y profesores, y el PCE era entonces la pieza clave de la lucha antifranquista". Hoy todav¨ªa representa para ¨¦l "la ¨²nica opci¨®n de izquierda v¨¢lida para este pa¨ªs".
Su papel como alter ego de Anguita le ha pro-porcionado en los dos ¨²ltimos a?os un mayor tiempo esc¨¦nico en la pol¨ªtica municipal cordobesa. A pesar de haber. tenido en sus manos la responsabilidad de las dos grandes cuestiones pendientes de la C¨®rdoba de fin de siglo -la nueva estaci¨®n de Renfe y el Plan General de Ordenaci¨®n Urbana, en fase de aprobaci¨®n final- se ha ganado un callado prestigio pol¨ªtico.
De alcalde transitorio pasar¨¢ a alcaldable comunista en las pr¨®ximas elecciones. Quedan 15 meses de por medio, que emplear¨¢ en analizar su propia condici¨®n y capacidad. "Nunca me vi de alcalde". Pero Anguita se va. "De todas formas, si no no soy yo, ser¨¢ otro, porque esto no es cuesti¨®n de nombres, sino del trabajo en equipo que hemos hecho durante siete a?os".
As¨ª, su optimismo comunista, dentro de las coordenadas locales, es de pel¨ªcula. Devoto del cine , siempre con una sonrisa exculpatoria o de modestia, se muestra convencido de que tambi¨¦n, a otra escala, con un gui¨®n de de Manuel V¨¢zquez Montalb¨¢n y una realizaci¨®n suya, la pel¨ªcula comunista espa?ola tendr¨ªa mejor final que el que ahora se le augura. El cine es su evasi¨®n y formaci¨®n. El Ayuntamiento, su obligaci¨®n.
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